Y abrí mis brazos para llenarlos con tu presencia, me abracé a tu esencia y me hice fuerte gracias a tus besos. Te pido, no me dejes sola ni un segundo porque siento que muero si no estás, por favor, sé mío por toda la eternidad.AlondraDe nuevo en casa, estoy mejor, pero Christopher se niega a tocarme hasta que según él no me haya recuperado totalmente, claro que es algo hipócrita de su parte después de lo que hizo en el hospital, solo de recordarlo siento que la sangre me vuelve a hervir en las venas. No sé si fue la adrenalina por el miedo a ser descubiertos o que mi querido novio es un experto con su lengua, la verdad prefiero que sea la segunda opción.—Bueno, ya estás instalada de nuevo, si no necesitas nada más me iré a casa para dejarte descansar —comenta sacándome de mis pensamientos.—No quiero que te vayas —chillo y le extiendo la mano para que se acerque a mí.—Yo tampoco quiero irme, pero ambos necesitamos descansar —rezonga conciliador.Hago un puchero y enrollo los bra
Me entregué al sonido de tu voz, deje que tus manos marcaran mi piel, que tus dedos dibujaran sobre mi cuerpo el recorrido de tus labios en su andar. Soy tuya, te pertenezco, así como tú eres mío y yo soy tu dueña.ChristopherSé que me estoy aprovechando de la situación, pero el egoísmo no me deja pensar con claridad, la deseo en mi vida, quiero tenerla por siempre a mi lado y estoy seguro de que juntos podemos superar los traumas y si sus recuerdos vuelven alguna vez, me voy a encargar de que no olvide lo mucho que nos hemos amado todo este tiempo, que aunque ha sido poco, siento como si mi vida entera hubiese estado prendido de ella.—Alondra, solo tengo una pregunta que hacerte, tal vez debería adornar el momento con cientos de florituras, pero la verdad no existe ni una sola palabra que exprese lo suficientemente bien todo lo que siento por ti. Únicamente me queda esto, suplicarte que seas mi esposa y atarme a tu vida, esclavizarme a tu amor de por vida —digo anhelante mientras s
En medio del vacío vive la esperanza que me completa, esa esperanza que llena los rincones más apartados de mi ser con cada uno de los besos que dejas grabados en mi piel.AlondraLos días pasan muy rápido y se convierten en semanas, estamos en vísperas de navidad y el ambiente a mi alrededor no puede ser mejor, por primera vez no siento ese frío intenso que me llega hasta los huesos, el calor de una par de brazos a mi alrededor me mantienen protegida. He amado cada momento juntos los últimos días, juro que nunca me sentí mejor.Es como si hubiese vuelto a nacer, una nueva vida, nuevas oportunidades, una nueva meta de vida, algo por lo que luchar cada día, un motivo para ser feliz a cada segundo. Me siento tan plena, tan llena de luz, tan a gusto con esta vida que ahora me da igual, no recuperar los recuerdos que perdí, cada día que pasa pierden más importancia para mí, que solo me enfrasco en vivir el presente y soñar con la vida que me espera al lado del hombre que amo.—¡Estas, def
Convertirnos en nuestros dueños es el sueño que no me deja dormir. Es la fantasía que noche tras noche me hace desvelar mientras tus brazos me envuelven y me hacen presa de ti.Alondra Es imposible que yo esté embarazada, me niego a pensar en esa posibilidad, es mucho más lógico decir que mi apetito se debe a que desde que Christopher y yo estamos juntos hacemos el amor cada día antes de dormir y antes de salir de la cama por las mañanas, es normal que me sienta más activa y más hambrienta viéndolo desde ese punto de vista.Sonrío y niego antes de volver a tomar la hamburguesa entre mis manos y darle otra mordida.—Amiga, no quiero romper tus ilusiones, pero la verdad es que mi novio y yo somos como conejos, no páramos de hacerlo mientras estamos solos en la misma habitación, por las noches estoy tan agotada que prefiero dormir antes de levantarme a comer algo en la cocina —argumento convenciéndome de que esa es la razón para que mi apetito este tan activo últimamente.—Bueno, si tú
La felicidad que me ofreces es tan efímera como la posibilidad de que algún día yo pueda disfrutar a plenitud del amor que me das. Es más fácil y sencillo para mí no abandonar las sombras de este infierno sin luz. Alondra Siento que no puedo con los nervios, el estómago me duele y las piernas no logran sostenerme más de dos segundo sin amenazar con dejarme caer, por suerte estoy sentada mientras me maquillan y me peinan, debería de relajarme, pero no son solo los nervios de la boda, tengo un presentimiento, como si algo malo estuviera por suceder. —Listo, ya hemos terminado —anuncia la estilista. Me miro al espejo y la imagen que veo me ayuda a tranquilizarme un poco, la angustia en mi estómago es por la ceremonia, no existe otra causa posible y soy muy tonta al sentirme de esta manera, Christopher y yo vivimos juntos, ya nos hemos adaptado el uno al otro, esto es solo una formalidad para reafirmar que él y yo nos pertenecemos. Andrea me ayuda a poner el vestido que por alguna ra
Mi vida, o la tuya, es la esperanza que sigas adelante y me recuerdes de vez en cuando lo que me hace bajar en paz al abismo más profundo.AlondraEn la foto veo a Christopher inconsciente y amordazado, con las manos atadas mientras una línea de sangre baja por el costado de su cara desde la cabeza, contengo la respiración para evitar que el pánico se convierta en llanto y que alguien se dé cuenta de que estoy aquí. La cabeza me empieza a dolor con mucha intensidad y un estremecimiento me recorre por completo, no es hora de sucumbir, la vida de Christopher está en peligro.—¿Entonces? ¿Quieres que este idiota siga con vida o vas a dejarlo morir? —inquiere con algo de burla en el tono.No quiero ir con él, no quiero volver a vivir todo el daño que me causo, pero tampoco puedo dejar que el hombre que amo, muera si en mis manos está la posibilidad de salvarlo. Debo llamar a la policía, tengo que para esto. Cuelgo la llamada para poder marcarle a la policía, pero al hacerlo me doy cuenta
Es difícil de creer que se pueda amar lo desconocido hasta el punto de llegar a idolatrarlo, eres tu ese misterio que anhelo descubrir día a día, pero justo ahora la vida nos coloca al borde de un precipicio.ChristopherDespierto sintiendo u fuerte dolor de cabeza, miro a mi alrededor y me doy cuenta de que estoy en el cuarto de un hospital, estoy solo por lo que me levanto y quito de un tirón la vía que tengo conectada al brazo, recuerdo que hoy es mi boda con Alondra al verme la ropa que llevo puesta, maldición, seguramente piensa que la deje plantada, pero la verdad es que no sé cómo llegue hasta aquí.La puerta se abre y Andrea entra, su cara denota preocupación, ha estado llorando, entonces recuerdo que alguien entro en la habitación donde me estaba preparando para casarme, me golpeo y aunque intente defenderme al final termine inconsciente.—Andrea, ¿Qué es lo que está pasando? ¿Alondra? —Sus ojos se llenan de lágrimas al tiempo que niega con la cabeza—. ¿Qué fue lo que paso? —
Con mi sangre te daré libertad y con vida un futuro lleno de paz, volverás a mi lado con los fantasmas de tu pasado como compañía, pero encenderé una luz tan brillante dentro de ti que hasta las tinieblas tendrán temor de tu presencia.ChristopherLas horas pasan demasiado rápido y sigo sin saber nada de mi mujer, estoy seguro de que tiene que ver con alguien de su pasado, no es normal que una persona decida secuestrar a otra solo porque sí. Y dudo que deba a algún tipo de venganza en mi contra, llevo una vida recta y sin conflictos personales o empresariales, no sé a dónde más ir a buscarla, ya me he recorrido la ciudad por completo, pero no logro dar con ella.Detengo el auto lleno de frustración y me descargo contra el volante, saco mi teléfono con la esperanza de haber recibido algún mensaje de parte de los secuestradores, en este punto no me importa entregar todo lo que tengo por recuperarla, pero es inútil no tengo llamadas ni mensajes, el aparato vibra en mi mano y por un segun