La ceremonia solo duro unos minutos, pero fueron suficientes para darme cuenta de que Vicenzo no estaba nada feliz con la presencia del nuevo miembro de los doce. Cuando, él ya, nuevo miembro, siguió a Caronte para recibir su tatuaje, algunos integrantes comenzaron a levantarse de sus asientos pare retirarse.—¿Vas a retirarte ahora? —me incline un poco para susurrar cerca del oído de Vicenzo.—Me gustaría, pero no puedo hacerlo todavía —respondió con un semblante neutro —Vuelve, Noah a estado mucho tiempo sin compañía de mi confianza.—Lo siento — me levanté de mi asiento —Pero tendré que ausentarme unos dias.—¿De qué estas hablando? —se levantó molesto llamando la atención de algunos miembros.—Tranquilo, volveré para celebrar tu boda — traté de descifrar la mirada de mi amigo, pero mis casi lágrimas no dejaba que viera esos enormes ojos negros, como la noche — Cuida de nuestra familia, por favor —comencé a dirigirme a la salida —Hasta mi regreso.—¿Dónde iras? —demonios no quería
Aunque la joven me ataco con todas las intenciones de lastimarme, yo no pude hacer otra cosa que bloquear sus ataques, no quería lastimarla, solo era un niña que buscaba proteger un objetivo.—¡DANISSA, DETENTE! —lleve mi mirada hacia la entrada de esa mansión.Me quedé viendo fijamente a ese hombre, sin duda tenia que ser el hermano de Noah. Sus ojos, el cabello, incluso tenia algunos rasgos demasiado marcados, que lo hacía muy parecido a mi amiga.—¿Qué es lo que quieres? —demonios, de cerca es aun mas guapo — Si quieres lastimas a la joven Lutten…—Vengo por ti —lo observé de arriba abajo —Necesito…. —lleve mi mirada a esa joven quien parecía que quería matarme con la mirada —¿Podemos hablar en privado?—Te daré 5 minutos —hizo un gesto con la mano, para que bajaran las armas.—Creo que necesitaré mas de 5 minutos —deje salir una media sonrisa.—Dije 5 minutos —vaya por un momento, sentí que estaba hablando con Vicenzo —Hablaremos en medio del camino, no tan cerca de este lugar, ni
Narra Hela:Aunque trataba de comunicarme con Vicenzo eso me era casi imposible, trate de llamar a Alessandro, pero su teléfono al parecer se encontraba apagado o el lugar donde se encontraba no tenía cobertura. Un poco preocupada comencé a leer los mensajes que me fueron enviados, cuando leí que Leonard habia secuestrado a los gemelos y a Noah, y además termino por casi matar a Alessandro, sentí como algo dentro de mi pecho se rompió.—¡AH!— presione tan fuerte el teléfono que se terminó por apagarse, molesta, arroje esa mierda a mi bolso —¡VOY A MATARLO! —comencé a arrojar todo lo que se encontraba a mi alrededor, llamando la atención de los pilotos —¡AH!Tuve que pedirle como último favor a mis colegas que rastrearan el paradero de ese desgraciado, que estaba dispuesta a entregar toda mi fortuna solo para saber la ubicación del lugar donde se encontraban mis pequeños y Noah.Abrace mis rodillas para llorar, todo esto había sido mi culpa, todo esto era mi culpa. Si tan solo hubiera
Logre darle un golpe en su pecho, quitándole el aire, logrando golpear su rostro en repetidas ocasiones, tan fuerte, que por primera vez, luego de mucho tiempo desde que solo era una niña, mis nudillos comenzaron a doler.—¡Eres un maldito hijo de puta! — junté mis manos para dar un golpe final en su cabeza.Pero aquello pareció no provocar nada en él, con un semblante molesto se incorporó limpiando un poco de sangre de su boca.Durante un buen tiempo pudo esquivar mis ataques, los cuales estaban destinados a puntos vitales para causarle el mayor daño posible. Al tratar de clavar uno de los cuchillos en su pecho, como si hubiera previsto lo que haria logro agacharse para darme un fuerte golpe en mi pecho, logrando que saliera volando unos metros de él.—Deja que te mate, Hela —se acercó a medida que trataba de levantarme, pero me estaba costando bastante hacerlo, ya que me encontraba muy cansada y herida —De todas formas morirás.—Vete….Vete a la mierda —termine escupiendo un poco de
Narra Alessandro:Al sentir un dolor agudo en mi pecho, lleve mi mano a mi corazón, un sentimiento de tristeza comenzó a invadirme. —Alessandro —la voz de Vicenzo termino llamando mi atención — Quiero que recuperes el cuerpo de Noah. Encargate de comunicarte con Ale, para que regrese de inmediato.—Entendido —aun con esa horrible sensación me dirigí a la salida.A medida que caminaba por el pasillo saque con un poco de dificultad el teléfono, esperando que esta vez Hela contestara el maldito teléfono.Llamando a Hela.—Hola, en este momento no me encuentro disponible —otra vez el estúpido buzón de voz —Si quieres decirme algo importante, dejame tu mensaje, me comunicaré contigo a la brevedad.—Hela no sé donde carajos estas, pero tienes que volver cuanto antes —unas enfermeras me abrieron las puertas para que saliera —Necesitamos que vuelvas porque…..Noah, Noah murió. Tienes que volver cuanto antes, deja de estar perdiendo el tiempo.Fin de la llamada.(…)Tuve que preparar a un grup
En aquel momento Vicenzo abrió la puerta de la camioneta para bajar llevando su mirada hasta aquel hombre que decía ser el hermano de Noah. No pude seguirle el paso, ya que tenia que quedarme cerca de los gemelos, pero logro encontrarme lo suficientemente cerca para poder escuchar su conversación.—Ha pasado mucho tiempo, Vasiliev —ambos comenzaron a acercarse.—Vicenzo. Nunca se me paso por la cabeza que mi hermana podría estar contigo —acorto su distancia —No sé si matarte o agradecértelo. ¿Dime que hacer primero?—Podrán resolver sus diferencia luego —aquella mujer hablo interrumpiéndolos —Lo importante es poder encontrar a tu hermana, Vasiliev.—Alessandro —me quedé viendo a Vicenzo —Puedes llevar a los niños a su habitación.No estaba muy convencido de dejarlos solos, pero tenia que obedecer la orden de Vicenzo. Con mucho cuidado tome los porta bebes, para llevarlos hasta la seguridad de su habitación. Esperaba encontrar a Hela recostada en la mecedora de la habitación de los peq
Tres meses después.Me mantuve parado a un lado de mi padrino, con la mirada puesta en todos esos paquetes acumulados. Nunca imagine estar delante del negocio de la familia, pero ahora que Vicenzo me habia prácticamente obligado a representar a la familia, no pude negarme.Al llegar las camionetas que distribuirían la mercancía, camine a pasos lento para salir de este lugar.—Me encargaré de distribuir todo — volteé para observar al señor Taddeo —Podre hacerlo desde casa, tú regresa a la finca....—No, no hace falta que hagas nada —me detuvo viendo como algunos hombres comenzaban a llenas las camionetas —Si Vicenzo se entera de que estuvieron aquí...—No podemos quedarnos de brazos cruzados — giré un poco, viendo acercarse al padre de Vicenzo —A pesar de las diferencias, Vicenzo no deja de ser parte de la familia.—Lo siento —los observé a ambos —Pero tengo que rechazar su ayuda.—Alessandro —esa mirada de regaño de parte de mi padrino hizo que bajara un poco la mirada.—Disculpe, pad
(…)Me gire en la cama esperando encontrar la mejor posición para descansar, al escuchar una risita suave abrí los ojos encontrando la silueta de Hela sentada en la cama, al otro extremos de la habitación.—¿Ale?¡Hela! —estuve a punto de encender la lámpara, pero sentí como tomo mi mano para impedirlo —¿Pero…?—Alessandro —susurro, llevando su mano a mi mejilla, cerré los ojos al sentir su toque frio —Mi Alessandro.—¿Dónde estuviste todo este tiempo? —tome su mano llevándola a mis labios para tratar de calentar su toque con un beso —¿Estas muy fría? —me levante de la cama —Te dije que conducir esa motocicleta te terminaría por congelar, si me hubieras dicho donde te encontrabas, hubiera ido a buscarte.—Alessandro —no pude evitar abrazarla notando su cuerpo frío —Te amo.—Estoy muy molesto contigo en este momento — me aferré tanto a ella, que pensé que terminaría por quitarle la respiración —Desapareces por tantos meses, para regresar diciéndome que me amas.—Te amo —me separé un poc