—¡Con justa razón es que te vigilamos! —exclamó Merry Evans a Victoria con molestia—, si fuiste capaz de ocultarme lo de tu embarazo real, ¿de qué otra cosa no serías?, ¡no nos decepciones!, recuerda que cualquier otro plan que tengamos si necesitamos de ti, LO HARÁS. Victoria frunció el ceño, sabía que su madrastra prácticamente la estaba amenazando. No tenía alternativa, esa mujer seguía teniendo en su poder las cosas y personas que a ella tanto le importaban. Edward Evans, ingresó en ese momento al darse cuenta que su madre había ido a ver a Victoria. El hombre de cabello oscuro estaba preocupados de que su madre cruzara los límites con Victoria, más aún sabiendo ahora que el embarazo de ella no era una mentira por el plan. —Vámonos, mamá —pidió Edward apoyando sus manos en los hombros de su querida madre que vió hacia atrás y asintió. Ambos comenzaron a dirigirse a la salida y Merry azotó la puerta al marcharse. Victoria se dejó caer sobre la cama en la cual estaba sentada,
Observando desde ese corredor abierto la lluvia caer, se encontraba ese CEO sentado en una de las cómodas sillas.En sus brazos, su tan querida hija, Elizabeth la cual estaba profundamente dormida.Jackson que se había quitado su saco, mismo con el que cubrió a Elizabeth, veía esos dibujos que recogió hace media hora atrás y ahora se encontraban nuevamente en la mesa. Arrugados, algunos rotos torpemente y en mal estado por la rabieta que Elizabeth hizo. Él suspiró sintiendo esa pesadez en su pecho y recordando las palabras de su hija y las que él dijo para calmarla. Sin embargo, no era tan fácil. La decepción, la molestía, los celos por todos esos malos entendidos que tanto Victoria como él dejaron sin aclarar. En lugar de hablar del problema, ambos tomaron el camino simple alejándose del otro. ¿Pero quién podía culparla a ella?, Victoria tenía mucho que perder si no seguía órdenes. ¿Quién podía culparlo a él?, después de tantas decepciones amorosas Jackson perdía la confianza
Cuando Victoria abrió sus ojos, se dió cuenta que se encontraba en su cama, a su lado estaba su medio hermano menor, Edward Evans. —Ya despertaste, que bueno~ —sonrió el hombre de cabello oscuro— hemos llamado al doctor de la familia, él te hizo una revisión, parece que tanto tú como el bebé están bien, pero pidió que comas tus comidas y meriendas por el bienestar de él. Victoria se sentó sobre la cama sintiéndose un poco mareada. —Así que… ¿Me desmayé? —Sí. Te traje aquí, mi madre llamó a Anthony Lawrence y parece que él viene en camino. —Oh… Gracias por ayudarme, Edward —sonrió Victoria a su medio hermano, una sonrisa cansada y un poco forzada de parte de ella. Ella sabía que incluso él estaba envuelto en todas las mentiras y planes de Merry.Después de todo, fue ese hombre joven que la llevó esa noche de pesadilla a la mansión de los Evans por primera vez, meses atrás. Sin embargo, también era consciente que su hermano parecía estar más al margen y a cómo ella, también hacia
—Cumple tus promesas Jackson. Yo no crié a un hijo mentiroso —se metió en la conversión la madre de ese hombre que estaba sentada atrás de Elizabeth, cargando a la niña en su regazo. —Mamá por favor, estoy hablando con Eli —pidió Jackson amablemente a su madre. —¡Ja!, no seas terco, ¡lo que pasa es que no quieres escuchar la verdad!, supe que aún no has contactado al doctor Watson, ¿qué estás esperando?, Joel nos dijo que vives trabajando, ¿eso quieres realmente?, ¿ignorar tu realidad y hundirte en el trabajo?, deja de huir y afronta. —¡No es eso!, solo… Intento que todo vuelva a la normalidad e investigo que pasa con esos Evans, por el bien de Eli. —¿Mi bien qué, papi? —se metió Elizabeth a la conversación mientras jugaba con el cabello de su muñeca de trapo—, no trabajes mucho, te vas a cansar y no vas a poder venir a jugar conmigo~ —sonrió la niña en su inocencia. Jackson suspiró para segundos después, sonreírle con cariño a su hija. —Iré a jugar contigo mañana, mi bebé~ —
—Cuando su anterior esposa quedó embarazada, ella me pidió cambiar las fechas para que coincidan en caso de que usted prestara atención… —contaba el doctor Watson nervioso— Para que no se diera cuenta que no conectaban ya que cuando ella quedó realmente embarazada, usted estaba de viaje de negocios señor Mitchell. —No me interesa saber eso, ya lo sospechaba cuando ella me informó que Elizabeth no era mi hija biológica. De lo que quiero que hables es de Victoria y Anthony Lawrence. —A eso voy… —decía el doctor que seguía sentado tras el escritorio en su oficina— Le dije que no a su esposa por mi moral médica, por que trabajaba para usted y la relación de confianza y negocios… Fue cuando ese hombre me contactó. Me amenazó diciendo que tenía el mismo o mas poder que usted para arruinarme, así que accedí a ayudarles. —¿Por qué Anthony Lawrence ayudaba a Stefanny a engañarme? —preguntó Jackson sin verle sentido debido al apasionado romance de su ex esposa fallecida y ese hombre de negoc
—¡Iba a tratar contigo por las buenas!, de verdad que quería ir poco a poco ganando tu amor y darte el máximo privilegio de ser mi esposa un tiempo, Victoria. PERO ERES UNA NECIA Y METICHE, Jackson está loco, ¿qué ve en ti? —¡¡NO INSULTES A MI ESPOSO!!, ¡Él no está loco y no es nada de lo que me dijiste antes! ¡Él es un millón de veces más hombre y buena persona que tú! —¿El loco que encerró a Stefanny y luego a Elizabeth? Jajaja~ —¡¡¡LA ENCERRÓ POR CULPA DE USTEDES!!! —gritó Victoria desesperada— ¡Es un padre que adora a su hija y lo ví con mis propios ojos!, cómo recordaba cuando la cargó por primera vez, cómo sufría cuando no estaba en buenos términos con ella, cómo se preocupaba y estaba pendiente de ella revisando su teléfono personal si sonaba hasta en su trabajo por si se trataba de ella. TÚ DESAPARECISTE, jamás buscaste a Elizabeth y ahora quieren-¡¡PLAF!! Sonó la fuerte bofetada que Anthony le dió a Victoria. —¡AH! —gritó ella que cayó sentada sobre un sofá largo cercan
••••••••••En la ciudad. Edward Evans llegó con Victoria al estacionamiento exterior de un edificio departamental. —Sé que no te sentirás bien en la mansión con mi madre cerca. Aquí al menos podrás descansar por hoy y después cuando te sientas mejor volver —explicaba el hombre joven yendo con Victoria al interior. —¿Vienes aquí muy a menudo? —preguntó Victoria notando que era un edificio bastante lujoso. —A veces. Sabes que trabajo en la empresa de papá. Desde que él está en coma, yo me ocupo de todo… Creíamos que Jackson llegaría a meterse por ser el siguiente accionista mayoritario después de ti, pero… Ahora entendemos por qué no lo hizo. —¿Por que en realidad solo es el encargado mientras Elizabeth crece? —preguntó Victoria mientras subían al ascensor. —Sí. Eso fue lo que descubrimos gracias a tu esfuerzo, así que realmente nos ayudaste. Ahora estamos un poco más tranquilos, al menos tenemos tiempo de actuar. —Pero Merry y Anthony, piensan quitarle a Elizabeth —recalcó Victo
—¿Quién eres? —Señora Merry Evans, soy la secretaria del doctor Javier Smith. Es para recordarle que su cita está programada para pasado mañana a las 2pm. —Oh, si, si, el doctor Smith, ya recordé. Gracias, confirmo para esa hora —finalizó Merry la llamada mientras una sonrisa maliciosa curvaba sus labios. "No tengas a ese bebé, eso fue lo que le dije a Stefanny. Dará problemas… Pero no me hizo caso""En lugar de eso se las ingenio para engañar a Jackson Mitchell, aún así, mi hija no mereció el trato que ese hombre le dió en sus últimos años de vida" Pensó la mujer mientras salía del departamento y llamaba para que fueran por ella, ya que no podía usar el automóvil de su hijo por que podía estar aún siendo vigilado. "Ese bebé será solo una molestía para nuestros planes, esa mujer cada vez se vuelve más irrespetuosa, ingrata y mal hablada con uno" "Una vez que lo pierda, caerá en la locura y Anthony podrá continuar con su plan sin tanto drama de esa desgraciada" Pensó con malici