—Tienes razón~ —sonrió Victoria coqueta— quería seducirte, supongo que debería… ¿Continuar hasta el final? —decía ella mientras soltaba la elegante corbata de su esposo. Jackson mostró un risita traviesa, mientras sus grandes manos seguían sobre las piernas de su mujer desviando poco a poco su camino hacia su entrepierna… —Hace un momento te estabas quejando de hacerlo en este lugar~ parece que eran simples excusas… —comentó él sin quitarle los ojos de encima a ese rostro fino y ruborizado de tan bella mujer. En ese momento los carnosos labios rojos de Victoria se acercaron a los de Jackson deteniéndose a pocos centímetros de distancia. —Parece que "mi esposito" lo disfruta~ —decía ella mientras ahora sus manos iban desabrochando los botones de la camisa de Jackson— me gustaría probar también… Todo lo que te emociona~ Esas palabras bastaron para que ese hombre se pusiera de pie, cargando ágilmente a Victoria. —¡AH! —exclamó ella ante la sorpresa. PUFF~ Jackson tumbó sobre un s
••••••••••9: 00 am.Esa mañana en la empresa elite en seguridad privada de Jackson Mitchell. —¿Agendar todo esto? —preguntaba Victoria a la secretaria principal de Jackson. La mujer tenía un aura altiva y refinada, vistiendo ese elegante traje oscuro y viendo a Victoria con "mala cara". —¡Claro!, el CEO dijo que usted no estará aquí de adorno, ¿creía que sí?, aquí todos trabajan, señora Mitchell. Victoria dirigió sus ojos grises claros hacia la puerta de la oficina donde estaba su marido. "¡Desgraciado!, de todos los departamentos de su empresa, ¿era necesario asignarme como la secretaria encargada de su agenda personal?" "Pero claro, él lo hace para vigilar mis movimientos y tenerme a su alcance todo el día…" "Aunque…"Victoria sonrió en ese instante, poniendo buena cara y aceptando todo el trabajo que le explicaba esa mujer de cabello corto castaño. La secretaria principal se fue a su sitio y Victoria se quedó en ese escritorio al lado de esa mujer, frente a la computadora.
—Victoria, sé que estás comprometida con esa farsa, pero tienes que venir. Recuerda todo lo que está en juego, tu panadería, tus abuelos, tu padre, la fortuna Evans, tu herencia, hasta tu vida. Cuando Victoria escuchó eso prometió estar ahí y exhaló con pesar sentándose sobre el inodoro. En ese momento escuchó comentarios de empleadas en el baño que recién entraban. —¿De verdad esa mujer es su esposa?, no parece encajar muy bien con el CEO, él es tan guapo~ —Sí, ella es un poco corriente, ¿no? Jajaja~ —reía la otra mujer. —Seguro es una posesiva celosa que está aquí solo para vigilar que el CEO no la engañe jaja~ Victoria que se encontraba sentada escuchando esos comentarios, se llenó de ira y salió del baño de inmediato. Las dos empleadas se quedaron pálidas al verla y se disculparon de inmediato, pero ella las ignoró y salió rápidamente del baño. ¡No estaba de ánimos para lidiar con esas mujeres! Tenía la advertencia de Jackson de no hacer un escándalo en su empresa, la bue
Nicole Bennet al ver qué Victoria corrió en busca de la niña así como el chófer y un guarda espaldas, ella también, dejó solos a esos hombres y se fue tras Elizabeth. —¡¿Por qué demonios la has traído?!, ¡Nunca te dije que podías venir con Nicole! —preguntaba Jackson con su rostro rojo de la ira. —No te enojes hermano, ella solo quería ver a Elizabeth, estaba llorando en mi club, fuiste muy cruel. Sabes que ella es como una tía de tu hija —decía Andrés mientras acariciaba su adolorida mejilla después del puñetazo que Jackson le dio. El CEO Mitchell frunció el ceño ante las palabras de Andrés, sabiendo que ese hombre tenía razón… Al menos en parte.—¡Aún así, no quiero que vuelvas a hacer lo que se te da la gana en MI mansión!, ¿te ha quedado claro? …..Mientras ellos seguían hablando, Elizabeth corrió tanto como pudo hasta quedar sin suficiente aire.La niña de seis años se escondió tras un gran árbol cercano al pequeño lago en esa propiedad. El chófer que pasó buscándola por la
••••••••••12: 30 am. Victoria abrió sus ojos, se encontraba en su habitación, en la mansión de su marido. Ella se vió vistiendo una cómoda pijama, comenzó a recordar lo que había sucedido poco a poco. "Elizabeth se ahogaba…" "Esa mujer me mintió, sí sabía nadar… No, no puedo juzgarla del todo" "Quizá dijo que no sabía por que nadaba tan mal como yo" "Me pasó dando un fuerte golpe que me hizo perder el conocimiento y…" —¡¡¡MI BEBÉ!! —exclamó Victoria asustada, apoyando sus manos sobre su vientre, temiendo que algo malo le haya sucedido. Clac~ En ese instante, la puerta se abrió e ingresó el doctor Arnold Watson. —Victoria, ya has despertado, justo hablaba afuera con una de mis enfermeras. Ya ha ido a llamar al señor Mitchell. —¿Mi bebé, cómo está? —preguntó ella de inmediato. —Está bien, no te preocupes, estás fuera de peligro. Sin embargo, has sido muy irresponsable con tu embarazo, a este ritmo no me extraña que puedas perderlo más adelante y-—¡No diga eso doctor! —alzó
Nicole Bennet apenas ingresó a la oficina de Jackson se acercó hasta el escritorio. —Jackii~ gracias por dejarme pasar~ —sonreía ella con esa dulzura coqueta que la caracterizaba.—Respóndeme rápido, ¿qué has venido a hacer, Nicole?, no quiero rumores fuera de lugar por tu inapropiada presencia en mi empresa —advertía Jackson con frialdad. "¡Ja! Típico de mi Jackii, quiere correrme por el bien de su reputación" Pensaba la mujer de cabello rubio rizado apoyando una de sus manos en su cadera y viendo a Jackson, mostrando ella seguridad. —Me gustaría volver a visitar a Eli~ tener acceso a tu mansión sin restricciones como antes Jackii, ¿puedo?, ¿no te parece que lo merezco? —No.—Pero fui yo quién salvó a Elizabeth y… esa mujer. ¿No te parece que lo merezco?—¿Solo eso?La mujer se sentó directamente en el escritorio de Jackson, tirando de su corbata.—Sí, no quiero más.—Supongo que está bien, puedes volver a ir a mi hogar… ÚNICAMENTE a ver a Elizabeth, no quiero que molestes a mi
—¿Eh?, ¿por qué no? ¡Eso es tan injusto para Elizabeth!, solo serán unas horas… la noche del accidente, ella se sentía bastante triste porque siempre estaba sola —contaba Victoria intentando convencer a ese CEO. Jackson guardó silencio por unos segundos, para finalmente acceder.—Está bien, puedes visitarla, pero solo serán dos horas. —¡Sí, eso será más que suficiente! —exclamó Victoria emocionada— ¡Muchas gracias "mi esposito"! —finalizó la llamada Victoria de inmediato antes de que ese hombre le dijera algo más al respecto. …..3: 30 pm. —¿Salir? —preguntó Elizabeth confundida. —¡Sí!, no saldremos de la mansión, pero sí podrás salir de esta planta, al menos por hoy, tengo una sorpresa para ti esperando abajo~ La niña tenía miedo de que no fuera verdad el hecho de que podía salir y terminar nuevamente castigada por su padre. —¡No puedo! —exclamó Elizabeth insegura. Victoria suspiró poniéndose de rodillas frente a la pequeña niña. —Eli, tengo el permiso de tu papi~ él me de
¡PLAF! Él abrió sus ojos en gran manera sin poder creer que esa mujer le golpeó.Pero antes de que él pudiera decir palabra alguna Victoria habló furiosa: —¡ERES UN TONTO! ¡fíjate bien en lo que has hecho! —alzó ella la voz a su vez señalando la mesa— ¡Tu hija solo quería disculparse contigo!, ¡ella preparó galletas saladas para ti e hizo una muy linda caja dándote su obsequio con amor!, ¡eres un desgraciado, cómo has podido despreciarlo sin siquiera verlo! Jackson veía a Victoria tan furiosa, el rostro de ella lucía rojo y las lágrimas se asomaban por las comisuras de esos ojos grises claros. Él se acercó rápidamente a la mesa y abrió la cajita, viendo las galletas en el interior. "¡Maldición!" Pensó Jackson y salió corriendo a toda prisa rumbo a la planta donde vivía Elizabeth. Victoria exhaló y tomó una silla cercana sentándose en la misma. Ella apoyó sus codos en la mesa y enterró su rostro entre sus manos sintiéndose frustrada. ••••••••••Jackson llegó a las afueras de