94. Parecen dos chiquillos⤝AXEL⤞Las mentiras entre Mila y yo quedaron vetadas desde el inicio de nuestra relación y no hablo de la sentimental sino de mucho tiempo atrás. Sin embargo, hay cosas de las que no puedo hablar con ella tanto como me gustaría hacerlo. Asuntos que no me corresponde divulgar.Sobre todo, si tiene que ver con mi padre y su prima.Aún estoy sorprendido con la confesión de hace unas horas. No esperaba una llamada de mi padre en plena luna de miel y menos para confesarme sus sentimientos hacia Zaria. Jamás se me pasó por la cabeza que su relación fuera tan estrecha y que existiera algo más que una amistad.Aunque me pareció raro la familiaridad con la que Zaria lo trataba, lo atribuí de inmediato que se debía a su naturaleza despreocupada y relajada.Lo último que imaginé era que mi padre se interesara en ella de manera romántica y menos que quisiera algo serio.Después del infierno que vivió junto a mi madre, todo lo que deseo es su felicidad, pero no estoy seg
95. ¿Debería buscarlo?Capítulos especiales ⤝Z & A⤞⤝ZARIA⤞Los suaves, hábiles y experimentados dedos de Aiden recorren mi espalda mientras arremete con fiereza en mi interior. Mis uñas arañan la piel de su espalda. Pero no soy capaz de evitarlo. El placer que se extiende por cada centímetro de mi cuerpo es arrollador.Me siento tan llena y mis íntimos pliegues se cierran lenta y placenteramente alrededor de su duro pene.—No deberíamos… —dice con voz jadeante, empujando las caderas con fuerza.No, no deberíamos desde el punto de vista de la sociedad. Aiden tiene edad para ser mi padre, pero… no lo es.Es un hombre y yo una mujer en toda la extensión de la palabra. Basta una sola de sus miradas para despertar el fuego en mi interior y desear tenerlo así, justo, así como lo sostengo ahora, apretándose en mi interior.—¡Aah…! —gimo en respuesta, atrapando sus caderas entre mis largas piernas.No quiero que piense en lo bueno o malo de nuestras acciones. No quiero que piense en nada má
96. No te merezco⤝Z & A⤞⤝ZARIA⤞Un temblor me sacude, me niego a pensar en Aiden de esa manera. No cuando he visto con mis propios ojos lo preocupado que se muestra por Nova y la bebé. Sin embargo, ¿qué otra explicación puedo darle a su silencio? Entiendo que las cosas no sean fáciles para él, tampoco es sencillo para mí.No solo se trata de un hombre mayor, cosa que me tiene sin cuidado, pero no puedo opinar por él. Puede que para Aiden la diferencia de edades tenga peso. Además, también es el suegro de mi prima.No obstante, sabe que estoy abierta a conversar.—Debo irme, se me hace tarde —la voz de Nova interrumpe mis pensamientos. Me fijo en su plato y veo que ha terminado de comer. ¿Tanto tiempo me perdí?—Piénsalo, Nova —digo, pero ella ya se ha levantado de la silla, toma su plato y lo lleva al fregadero—. Me ocuparé de limpiar —agrego.—Gracias, y en cuánto a lo otro, será solo hasta unos días antes de que la bebé nazca. Te prometo que tendré cuidado.No estoy de acuerdo, pe
97. Mi otra mitad⤝Z & A⤞⤝AIDEN⤞Quiero creer, necesito confiar en las palabras de Zaria, pero, ¿a mi edad, realmente puedo permitírmelo? Aunque estoy seguro de mis sentimientos hacia ella, no puedo evitar preguntarme: ¿cuánto durará lo que ella siente por mí? ¿En qué momento las diferencias de edades van a separarnos? En algún momento sé que va a suceder.Zaria es una mujer joven, hermosa, apasionada. La única que ha sido capaz de despertar en mí el deseo, la pasión. Las ganas de volver a amar, pero siendo justos y honestos. No le he dicho toda la verdad. No sabe que Livia no es hija mía, no soy capaz de confesárselo y ni siquiera sé la jodida razón. Tal vez porque no quiero que me vea con lástima o decepción al darse cuenta de que no soy el hombre que cree. Al final solo fui un idiota en manos de Caroline. Un payaso. Le perdoné lo imperdonable con el único propósito de que mis hijos tuvieran a su madre. Sin embargo, tarde me di cuenta del error que cometí. No se puede obligar a
98. La nieta de mi novio⤝Z & A⤞⤝ZARIA⤞Con premura y algo de torpeza, recojo mi ropa del piso y me cubro el pecho con la blusa mientras Aiden atiende la llamada. Su rostro palidece y mi corazón se estremece cuando escucho el nombre de Nova salir de sus labios.Quiero preguntar y saber lo que sucede con ella, pero las palabras se quedan atoradas en mi garganta cuando Aiden vuelve a hablar.—¿Un accidente? —pregunta, mirándome con los ojos asustados, su mano tiembla visiblemente—. ¿Cómo está? —vuelve a preguntar, esta vez con más urgencia, recogiendo sus pantalones para vestirse.Ni siquiera me molesto en correr al cuarto de baño para limpiarme. Eso se puede esperar, pero el asunto de Nova no y por la expresión de Aiden, las cosas no parecen alentadoras.—Voy para allá —dice, cuelga el teléfono y termina de colocarse los pantalones.—¿Qué ha pasado con Nova? —pregunto, buscando mi bolso con la mirada y las llaves de mi auto.—Es Nova, sufrió un accidente mientras salía del restaurante
99. Hice lo que tenía que hacer⤝Z & A⤞⤝AIDEN⤞Comunicarme con Knox no ha sido nada fácil y convencerlo de venir al hospital mucho menos, pero finalmente, lo consigo. Ahora todo lo que puedo hacer es sentarme, esperar a que llegue y tener noticias de Nova.La culpa me castiga sin piedad, jamás debí pedirle que dejara la seguridad del apartamento. Esto no habría pasado si hubiese manejado las cosas de otra manera. Fui descuidado y egoísta.Me levanto incapaz de continuar sentado y camino de un lado a otro, mirando hacia la entrada, esperando ver llegar a Knox o a Zaria, de quien no he sabido nada en los últimos veinte minutos. También espero ver a alguien salir de la sala de operaciones para darme información, pero no hay nada, ni una sola señal de los médicos o enfermeras.La angustia oprime mi pecho, es la misma sensación que tuve cuando Knox me avisó del accidente de Livia en Texas, hace unos meses. Es la misma impotencia de no poder entrar, sostenerle la mano y prometerle que todo
100. Volvemos a San Antonio⤝MILA⤞Las últimas semanas de nuestra luna de miel, han sido como un sueño. De Antigua Guatemala, nos trasladamos a San Juan La Laguna, visitando cada uno de los pueblos vecinos. Conociendo su historia.Más tarde, nos trasladamos a Cobán, en Alta Verapaz donde visitamos el Biotopo y las hermosas lagunas de Semuc Champey. No cabe duda de que el tiempo pasa volando cuando se disfruta en pareja y con amor.Tres semanas después de haber llegado a Guatemala, aterrizamos en Flores, en el departamento de Petén, donde pensamos pasar nuestros últimos días, conociendo la ciudad maya que se esconde entre sus vastos bosques.—¿Cansada? —pregunta Axel, acariciando la cuerva de mi vientre. Ahora, con diez semanas de embarazo, se ha hecho notar.Tendremos que dar un par de explicaciones al volver, pero estoy completamente segura de que nuestras familias estarán felices con la llegada de nuestro bebé.Tan felices como Axel y yo estamos mientras esperamos para conocerlo.—U
101. ¡Tú eres el culpable!⤝MILA⤞«Podría hacerlo, podría darle mi apellido.»Me quedo de una pieza al escuchar a Axel y, por primera vez, en relación con Nova y su bebé, me siento incómoda con la situación. No soy alguien egoísta y tampoco mezquina. Pero no estamos hablando de cualquier cosa, sino de reconocer a un bebé como hijo propio.Es una acción muy loable, pero…—Es algo que tengo que hacer, Mila. Quiero proteger a la bebé de Nova —insiste. Un nudo sube a mi garganta, está tan decidido que dudo mucho que algo de lo que diga lo haga cambiar de opinión; sin embargo, tengo algo que decir.Libero mi mano de su agarre y me aclaro la garganta, tratando de que el nudo desaparezca y me permita hablar; pero siento la lengua pesada, como si una roca la aplastara.—Dime algo, no te quedes callada, Mila —pide, buscando de nuevo mi mano. La voz del capitán se escucha por el altavoz, ordenando colocarnos los cinturones de seguridad para aterrizar.Su mirada fija sobre mí, quema como el mism