--Bastian no corras tan rápido, es trampa, eres más rápido que yo no es justo…--Bastian dio un pequeña sonrisa y le hizo una mueca algo graciosa a aquel Athan de solo ocho años, el cual hacia un puchero lleno de enojo, algo que hizo reír de manera divertida a Alexandros Katalakis, quien observaba a sus nietos correr de un lado a otro en toda la enorme mansión Katalakis, sus nietos eran maravillosos y de ello no había la menor duda
--no es mi culpa que seas mal perdedor…--Bastian corrió de nuevo de las hermosas playas hacia la mansión, en la que un enojado Athan lo seguía de cerca, pues aquel consideraba que no se dejaría ganar de su primo, pero antes de que siquiera aquellos pudiesen darse cuenta, habían logrado hacer que uno de los costosos jarrones de la familia había caído al suelo mientras ellos forcejeaban, algo que hizo que tanto Bastian como Athan abri
por alguna razón los recuerdos de su infancia habían llegado a la cabeza de Bastian al observar como el auto se mostraba frente a al salía de la villa, en la que Bastian dio un gran suspiro y observo como Violeth no dejaba aquella mueca de preocupación, al sentirse culpable por las imposiciones de su padre, era más que notorio de lo que hablaría, era tan predecible, que Bastian se le había hecho demasiado extraño el hecho de que no hubiese llamado mucho antes, pues aquel hombre solía demostrar fácilmente cuando algo le molestaba e imponerse para que fuese como sus deseos indicaban, algo que Bastian nunca hacia y por ello él lo odiaba tanto, aunque si lo pensaba bien su padre no quería a nadie, ni siquiera a su madre, aquella que se daba afanes de amar tanto y no hacía más que engañarla--me preocupa... ¿crees que te regañara?—aquellas palabras hab&iacut
El día era lluvioso, demasiado para su gusto, pero ella no lograba entender por qué Bastian parecía estar tan feliz, aquel no se había levantado de su cama desde el momento que había amanecido a su lado y había indicado que ese día de lo dedicaría solo a ella, pero él estaba allí recostado abrazándola de la cintura sin permitirle más que para ir al baño cuando recién se había despertado, de más seguía como si un koala se tratara abrazo a su cintura, por lo que Violeth ya cansada de la situación se movió un poco incomoda y logro hacer que Bastian levantara la cabeza algo conmociona por la razón de la pequeña mujer y la observara sin lograrlo entender--¿enserio? ¿Vamos a estar aquí todo el día? Estoy aburrida no quiero solo dormir…--una sonrisa coqueta surco de los labios de Bastian quien má
--¿a dónde vamos?—la mirada llena de intriga de Violeth logro hacer que Bastian diera una sonrisa y he hiciera el mismo gesto que había indicado desde el primer momento en el que ella no había dejado de preguntar y el simplemente la ignoraba mientras le mostraba un flamante sonrisa--no lo te lo diré...--Violeth hizo un pequeño gesto de negación y con ello llego un puchero algo aniñado de su parte, algo que para Bastian era lo más agradable que había logrado ver en su vida
--entonces yo le dije que odiaba los hombre como él y que no se volviera a acercar a mi hijo...--la voz de Morun junto con las risas de Violeth se escuchaban en la cocina de la enorme y elegante villa de Bastian Katalakis, el cual al escuchar a su pequeña castaña camino con su fino traje a la medida que le quedaba completamente perfecto y observo por el umbral de la puerta a un hermosa chica riendo a carcajadas sobre las locuras de aquella mujer que parecía haberle contado cuando ella se debatía entre elegir a Serguei y Marco, la mano derecha del padre de Bastian, quien cuando una Morun joven había pisado al mansión Katalakis, había puesto de cabeza a aquellos dos hombres Positivo, era positivo, no había otra respuesta, se lo había confirmado la quinto prueba de embarazo casera que había hecho gracias a que Morun se había distraído mientras estaba en el mercado y ella había tenido la valentía de comparar algunos para confirmar, ¿pero cómo podía dudarlo? Ya llevaba días enferma, llevaba días vomitando, con mareos y simplemente parecía que el sueño le había invadido del todo, era un desastre no sabía qué hacer, no sabía cómo actuar, no sabía si a Bastian le gustaría la idea, no sabía si Bastian estaba preparado para ser padre de nuevoElla lo notaba en cada momento en que Bastian se detenía para observar la pintura de Aitana que se encontraba en la entrada de la villa, ella lo notaba en su mirada perdida y sus ojos soñadores. Él aun amaba a aquella niña, no era que ecapitulo 29
Capítulo 30El sonido era agradable para la conversación, todo se mostraba a todo su esplendor en lo que Violeth se sorprendió al notar que la villa de Bastian se podía adaptar de aquella manera a una fiesta como aquella, todo era maravilloso ante sus ojos, todo menos el hecho que aquella presión en su pecho seguía allí, seguía dando vueltas en su mente, seguía haciendo una y otra vez repicando en su interior, se sentía devastada, aturdida, no sabía qué hacer, no sabía cómo sentirse y lo pero no sabía si creer aquellas labras de Athan que había logrado hacerle demasiado daño--te ves hermosa...--una voz familiar logro sacarla de sus pensamientos, en lo que observo como aquella mujer que no había visto desde aquel día en el que Bastian y ella había ido en su encuentro y se había marchado de aquella manera ella no había
El aeropuerto se encontraba en completa soledad en aquel instante, Violeth no hacía más que pregonarse que hacia ella en aquel lugar, no hace más que preguntarse por qué razón ella debía tener que sufrir el hecho de que nada salía como ella deseara, se encontraba tan decepcionada de ella misma, se encontraba desbastada por el hecho de tener que sufrir por las conciencias de enamorarse tan rápido y fácil mente de un hombre que era más obvio que no la amaría, él lo había indicado tantas veces, él le había dado las señales, pero ella no lo comprendía, ella no comprendía el hecho de ella no era alguien que él pudiese considerar digna de su amor.No comprendía por razón ella no había logrado entender en aquel entonces, se decía una y otra vez que seguramente en aquellos momentos en el que el parecía querer decirle a
--¿mamá...? mamá... mamá--las palabras llenas de dolor de parte de Violeth habían logrado despertar de sus antiguos recuerdos y pensamientos a Choe, en lo que al ver a su destrozada hija quien venía con lo que parecía ser un vestido elegante y cubierta por una chaqueta de color negra más grande que ella, la mujer corrió hacia ella y la brazo llena con fuerza intentado con ello consolar su terrible corazón maltratado--tranquila bebé, mamá ya está aquí y nadie nunca jamás te hará daño, porque yo matare a todo él quiera acercase a ti para lastimarte... tu madre te protegerá de todo, siempre juntas siempre tu y yo...--Violeth entre llantos levanto su cabeza y observo a su madre llena de dolor, por lo que aun un poco insegura de como reaccionaria su madre, se separó un poco de su madre y tomo su mano dirigiéndola hacia su vientre y log