Temor, ese era el único sentimiento que invadía a Violeth, aunque sintiera una pequeña esperanza al saber el nombre del hombre que lograba ponerla tan nerviosa, o incluso que llegaba a hacerla dudar de muchas de sus prioridades, pero ahora no era momento para algo como eso, era momento de pesar que tenía que centrarse en aquel lindo e intimidante hombre que ahora se encontraba frente a ella ofreciéndole la mano, como si todas aquellas palabras que habían indicado de él no fuesen más que viles mentiras
--oh... vamos... en américa no son tan groseros... solo quiero hacer una amistad duradera y los griegos somos files creyentes que se crea un lazo un el contacto... ¿o es que acaso me temes?—Violeth no tenía planeado que aquel hombre llegarse a creer que tenía fuerza sobre ella, eso era algo que no tenía permitido, a pesar de todo se consideraba alguien lo suficientemente fuerte
El sol iluminaba el mar, el amanecer ya había desaparecido con su bella imagen, en la que Violeth contemplaba completamente sumida en sus pensamientos, miles de ideas y miles de sucesos que no dejaban de agobiarla, no dejaban de mostrarle lo culpable que lograba sentirse cuando ella en realidad no había hecho nada malo, no entendía por qué lograba sentirse herida cuando el debería ser el estuviese de esa manera, ella debió dormir tranquila. Pero el único problema era que su corazón y mente estaban completamente hechos un desastre, no lograba comprender por qué sucedía, pero lo único que tenía más que claro era que su cabeza era un caos completoVioleth no quería más que hundirse en la arena en la que se encontraba en la que por cierto había pasado toda noche con una pequeña manta, mientras observa el mar limpio que arrastraba cada ola en la que ella so&
--no puedes enamorarte... si lo haces arruinas todo por completo y yo tendré que lidiar contigo enamorado, algo que me da mucho fastidio... ¿o tal vez no? ¿Qué dices? ¿Crees que sea buena idea esa regla en nuestro juego?—Bastian dio un gran suspiro cargado de impaciencia, mientras masajeaba sus cienes buscando algún tipo de solución para el gran enojo que poseía en aquel instante, en lo que luego de darle una mirada cargada de enojo a su primo hablo lleno de fastidio--¿tengo opción en toda esta estupidez tuya? Porque si es de esa manera considera que tú no puedes mandar en mis sentimiento, si me enamoro o no es mi problema...--el problema primo es que si tú te enamoras no harás tu parte del juego y no me voy a divertir... es bastante frustrante que sí creo un juego para algo en específico es para lograr que todo se dé acorde a mis deseos... y uno de e
--entonces si haces una combinación de esencias con la comida, a las diosas le molesta...--uno de los miles de concejos eran explicados por Morun, mientras que Violeth asentía completamente concentrada en cada uno de las palabras de la mujer, pues parecía una completa experta en aquellas situaciones--entonces dice que debo separarlos y que no puedo combinarlos ¿correcto?—Morun asintió llena de felicidad al ser escuchada por Violeth, pues con los hombre del hogar no podía conversar y las mujeres que iban a limpia la villa solo lo hacían por corto tiempo y se retiraban de inmediato, debido a que Bastian no le gustaba mucho la intromisión de personas en las que no confiara en su hogar, por lo que ahora tener una mujer junto a ella era tan gratificante que se sentía completa al tener a alguien más después de la compañía de Kendra--así es... eres muy lista... ahora creo
--Violeth... te busca, Morun quiere...--las palabras de Bastian fueron detenidas de inmediato al notar aquello que poseía en las manos Violeth, por lo que su rostro dejo de mostrase completamente relajado, a mostrarse con sus facciones notablemente marcadas, mientras su mandíbula se apretaba al notar que ella había tenido el atrevido de revisar sus cosas--¿Qué haces en mi habitación? ¿Y qué haces con la foto de Kendra en tus manos?-- ¿ella cómo explicaría algo como ello? No tenía la menor idea, pero aún seguía ese sentimiento de tristeza de dolor, por lo que di un leve suspiro y le ofreció el retrato en sus manos y algo apenado lo observo buscando un poco de compresión en él--lo lamento no deseaba hacerlo, solo que...--no debe tocar nada que pertenezca a ella, a ella y mi hija... una vez logre perdonarlo cuando entraste en la habitación de Ait
¿Cómo se podía decir que una persona estaba a punto de explotar? Era más que sencillo para decirlo con palabras, pero si con acciones en lo que cuando menos lo esperaron los sirvientes del lugar lograron escuchar un gran estruendo en la oficina de Bastian, quien había acabado con todo lo que tenía a su paso, en lo que al entrar máximo, no podía creer al ver algo tan caótico en el que desde su escritorio boletado, hasta las ventanas rotas se podía decir que había pasado un huracán en el lugar y había acabado con cada hermoso detalle que se habían encargado la decoradora de formar en aquellas cuatro paredes --¿Qué dijiste Violeth...? Ya te lo advierto no quiero tener que enojarme más de lo que encuentro ahora...--aquel dio pasos hacia ella, pero Violeth se alejó de inmediato con temor a que este llegase a conquistarla con su cercanía, muy distinto a los pensamientos de Bastian quien solo veía de su parte rechazo y hasta odio en sus ojos llenos de determinación--Te dije que no me iré...--antes de siquiera pudiese terminar, ya Bastian la tenía cargada en sus hombros mientras su cabeza colgaba y ella gritaba como loca en busca de ayuda, pero las reglas eran claras y aunque Athan hiciera tracapitulo 17
La pintura estaba quedando perfecta, cada rasgo y cada pequeña muestra de su belleza estaba mostrando el detalle perfecto de Aitana, la pequeña hija de Bastian, pero el problema en todo aquello, era que seguramente él no lo tomaría como algo amable de su parte, tal vez lo tome como un insulto o como una manera en la que ella parecía estar retándolo, con Bastian no se sabía exactamente que podría llegar a invadirlo de un momento a otro, pero lo cierto era que de su parte nada bueno vendríaNo había que llegar a pensarlo mucho tal vez el que escuchar sus pensamientos, posiblemente creyera que solo está siendo algo deprimente, pero la verdad era que no era tal manera, no podía olvidar como se había ido por días después de lo que había ocurrido, según Morun indicaba que tenía un problema grande en la empresa y que no podía simplemente volver a la vi
--bienvenida a Korydallos, este el hotel cinco estrellas en él está alojado tu padre...--la voz de Athan logro sacar de los pensamientos a Violeth, quien observo el escalofriante lugar, que se mostraba imponente hacia ella, con su color blanco y sus guardias mostrándose armados hasta los dientes a los alrededores, aquel lugar era enorme, era tan increíblemente grande que parecía ser un enorme castillo, aunque lo que contuviese no fuesen precisamente príncipes y princesas--espero que el alojamiento y menú del restaurante sea de alta calidad como se ve el lugar...--intento bromear hacia aquella mala broma de Athan quien río y le guiño un ojo, mientras tomaba de la mano a Violeth para llevarla hacia adentro del lugar, algo que en aquel instante la chica ignoro por completo al sentirse tan nerviosa--eso lo veremos, si no nos gusta el menú, podemos poner una pésima reseña...-- Violeth no p