¿Cómo se podía decir que una persona estaba a punto de explotar? Era más que sencillo para decirlo con palabras, pero si con acciones en lo que cuando menos lo esperaron los sirvientes del lugar lograron escuchar un gran estruendo en la oficina de Bastian, quien había acabado con todo lo que tenía a su paso, en lo que al entrar máximo, no podía creer al ver algo tan caótico en el que desde su escritorio boletado, hasta las ventanas rotas se podía decir que había pasado un huracán en el lugar y había acabado con cada hermoso detalle que se habían encargado la decoradora de formar en aquellas cuatro paredes
--¿Qué dijiste Violeth...? Ya te lo advierto no quiero tener que enojarme más de lo que encuentro ahora...--aquel dio pasos hacia ella, pero Violeth se alejó de inmediato con temor a que este llegase a conquistarla con su cercanía, muy distinto a los pensamientos de Bastian quien solo veía de su parte rechazo y hasta odio en sus ojos llenos de determinación--Te dije que no me iré...--antes de siquiera pudiese terminar, ya Bastian la tenía cargada en sus hombros mientras su cabeza colgaba y ella gritaba como loca en busca de ayuda, pero las reglas eran claras y aunque Athan hiciera tra
La pintura estaba quedando perfecta, cada rasgo y cada pequeña muestra de su belleza estaba mostrando el detalle perfecto de Aitana, la pequeña hija de Bastian, pero el problema en todo aquello, era que seguramente él no lo tomaría como algo amable de su parte, tal vez lo tome como un insulto o como una manera en la que ella parecía estar retándolo, con Bastian no se sabía exactamente que podría llegar a invadirlo de un momento a otro, pero lo cierto era que de su parte nada bueno vendríaNo había que llegar a pensarlo mucho tal vez el que escuchar sus pensamientos, posiblemente creyera que solo está siendo algo deprimente, pero la verdad era que no era tal manera, no podía olvidar como se había ido por días después de lo que había ocurrido, según Morun indicaba que tenía un problema grande en la empresa y que no podía simplemente volver a la vi
--bienvenida a Korydallos, este el hotel cinco estrellas en él está alojado tu padre...--la voz de Athan logro sacar de los pensamientos a Violeth, quien observo el escalofriante lugar, que se mostraba imponente hacia ella, con su color blanco y sus guardias mostrándose armados hasta los dientes a los alrededores, aquel lugar era enorme, era tan increíblemente grande que parecía ser un enorme castillo, aunque lo que contuviese no fuesen precisamente príncipes y princesas--espero que el alojamiento y menú del restaurante sea de alta calidad como se ve el lugar...--intento bromear hacia aquella mala broma de Athan quien río y le guiño un ojo, mientras tomaba de la mano a Violeth para llevarla hacia adentro del lugar, algo que en aquel instante la chica ignoro por completo al sentirse tan nerviosa--eso lo veremos, si no nos gusta el menú, podemos poner una pésima reseña...-- Violeth no p
Los ojos verdes de Bastian, estaba tan llenos de odio, estaba tan coléricos, no podía creer lo que observaba, no podía creer que ella estuviese besándose con él, no podía creer que ver tal escena lograra dale tanto enojo, ¿ella cómo podía indicar hacia unos días lo estaba teniendo sentimientos por él y luego besarse con aquel hombre que consideraba su enemigo? Era tan asquerosa aquella imagen ante sus ojos, era tan frustrante sentirse de aquella manera en aquel instante, pero entonces sus palabras llegaron a su mente"--No puedo seguir más con esto... te mentí... te he mentido desde el principio... solo quería hacerte una broma, era solo un juego que habíamos iniciados cuando éramos solo unos niños... luego tu llegaste y me dijiste que te habías enamorado de mí, sin contar que habías llegado con ese enorme anillo y yo solo tení
Miles de sentimientos, miles de ideas e incluso manera de responderle a ella un profundo si, una hermoso y delirante si intentémoslo, miles de forma de amarla en aquel instante e indicarle más que gustoso que estaba más que delirando por aceptar estar con ella, por quitarle las palabras de su boca e indicarle en medio de un apasionado beso que él estaba ansioso por demostrarle que si quera estar con ella, que deseaba que iniciaran una nueva etapa de su vida a su ladoPero debía ser cociente de las cosas, debía ser cociente que las cosas no eran simplemente como pensaban, debía ser consiente que tenía un gran enemigo que no se quedaría tranquilo, que temía por que su vida y la de ella fuese incluso más difícil de lo que era en aquel momento, pues él sabía que su primo no se quedaría de brazos cruzados después de lo ocurrido, él sabía que aunque Athan de
El sol calaba por la ventana y todo parecía estar en completa calma, todo excepto que Violeth logro sentir un peso fuera de común en su cintura que logro asustarla demasiado, pues no recordaba nada como haberse acostado acompañada, además de que se encontraba en su habitación, es lo más sabía muy bien, porque aquella era su cama, en la que justamente se había quedado dormida la noche anterior, luego de haber ido a revisar a Bastian quien aunque se encontraba mejor, por órdenes del doctor él debía quedarse en reposo algunos días masVioleth un poco insegura dio media vuelta para encontrarse con el rostro más perfecto del que ella estaba segura que jamás se cansaría, ahí estaba Bastian completamente dormido, algo que ella no sabía en qué momento había logrado adentrarse en su habitación y se había quedado dormido a su lado, aquello l
--Bastian...--una hermosa mujer de cabellos oscuros y risos indomables tan parecidos a los de Bastian, había salido corriendo a recibirlo en cuanto la pareja había cruzado la puerta trasera que dirigía hacia el puerto privado de Bastian, en lo que Bastian al ver que su madre venía con el llena de dicha había soltado la mano de su Violeth para recibirla con un fuerte abrazo como solo ella solía ofrecérselos –estaba muy preocupada, Aron nos comentó sobre tu agotamientos y me preocupe demasiado, por lo que tu padre y yo decidimos venir a verte... por favor cuando te encuentres de esa manera danos aviso, yo me preocupo demasiado...Las palabras de su madre habían sido silenciadas, por Bastian quien le dio un fuerte abrazo, haciendo que aquella hermosa dama tan fina y hermosa se sorprendiera, pues su hijo no era de aquellos, su hijo era seco y poco expresivo, pero verlo ser amable y amoroso, había lo
--Bastian no corras tan rápido, es trampa, eres más rápido que yo no es justo…--Bastian dio un pequeña sonrisa y le hizo una mueca algo graciosa a aquel Athan de solo ocho años, el cual hacia un puchero lleno de enojo, algo que hizo reír de manera divertida a Alexandros Katalakis, quien observaba a sus nietos correr de un lado a otro en toda la enorme mansión Katalakis, sus nietos eran maravillosos y de ello no había la menor duda--no es mi culpa que seas mal perdedor…--Bastian corrió de nuevo de las hermosas playas hacia la mansión, en la que un enojado Athan lo seguía de cerca, pues aquel consideraba que no se dejaría ganar de su primo, pero antes de que siquiera aquellos pudiesen darse cuenta, habían logrado hacer que uno de los costosos jarrones de la familia había caído al suelo mientras ellos forcejeaban, algo que hizo que tanto Bastian como Athan abri