—¿Y por qué tendríamos que cuidarlo? Dione es su madre, que se encargué —dice Maya no muy feliz.
—Pues porque ella nos cuido.—Le pagan por hacerlo Logan, no lo hizo porque nos quiera.—Aun así nos cuida y si ella necesita ayuda en algún momento, nosotros podemos ofrecernos, porque la queremos y porque se lo debemos —Logan levanta su dedo como si fuese una lección.—Pues no cuenten conmigo. —Maya se cruza de brazos y luego se va.—No le hagas caso Dione, está rebelde porque te quiere y no lo quiere admitir —dice Lena dando media sonrisa.—Hablaré con ella —ofrece Kay, pero Dione lo detiene.—Permíteme.Le da media sonrisa y sube a la habitación de Maya, toca la puerta y está se abre por el ligero golpe, Dione toma el atreví de entrar y la ve en su cama con las piernas recogidas.—La puerta estaba abierta, así que no he roto las reglas —se acerca con delicadeza.—Solo vete, ya tienes a alguien a quien cuidar, alguien a quien aconsejar, peinar y ser su madre. —sollozaba.Dione se sienta a su lado y le acaricia la espalda, de repente Maya la abraza y solloza.—Realmente no quiero que te vayas, no quiero que dejes de cuidarnos, el brazo cómodo, protector y caluroso que nos has brindado será como una noche sola con frío si te vas.—En mis brazos entran todos.—Pero ese bebé será el centro de todos, ¿Y si es niña?Maya siente temor de que Dione no vuelva a tener los mismos cuidados con ella.—Sé que no lo ves ahora, pero el sexo que tenga, te necesitará, como una hermana mayor, yo no estaré cuidando a ustedes y ustedes la cuidarán a ella, la querrás como yo la quiero.Maya se separa del abrazo.—Pero aún no ha nacido.—Lo sé y la amo o lo amo, no puedes entenderlo, pero cuando nazca sé que querrás dar ese brazos caluroso que yo les he dado a ustedes.—Te quiero Dione y quiero que seas feliz, pero estoy acostumbrada a tu presencia que te considero una mamá, por eso no quiero que te alejes.—No lo haré.—¿Cómo estás tan segura? Mamá se alejó cuando debía cuidar a nuestros hermanos menores, y ahora ha nacido otro hermano, su trabajo deseado, otra vez no esta haciendo de lado.—Tal vez deberías hablar con ella.—Pero ella no escucha.—Haz que escuché, pero hazlo de una manera suave, a regaños y enojos, nunca podrán entenderse y llegar a un acuerdo.A esa familia le faltaba comunicación, al igual que la relación de Dione.—Gracias —vuelve a abrazarla.Luego de un rato se separan y juntas bajan con los demás.—¿Listo? —pregunta Jacob y ambas asienten con una sonrisa—. De acuerdo familia, tenemos que organizarnos, ¿Va? Tanto para apoyar a mamá y para apoyar a Dione.—Yo puedo trabajar hasta que tenga unos seis meses de embarazo, pero también pienso que es tu turno de cuidar a los niños Jacob, te toca apoyar a Melissa así como ella lo hizo contigo, eres dueño de una empresa, asiste cuando sea necesario, igual tienes a Arden en ello.—Necesitaré a un tercero para que Arden también te dedique tiempo, no quiero que haga lo mismo que hice.—Primero tengo que hablar con él y como nos organizaremos.—¿Qué tienes planeado? ¿Cómo piensas decírselo? —indaga Kay con cierto interés.—No lo sé.—Nosotros podemos ayudarte —ofrece Maya con una sonrisa.***Dione se encontraba apoyada en su auto esperando a que se novio saliera del trabajo, era de noche y conocía el aproximado de su lado, aunque en tal caso de que su novio quiera quedarse hasta tarde, tenía apoyo de parte de si suegro para que lo sacara del trabajo.Minutos después Arden sale del edificio revisando su celular y cuánto sube la mirada sonríe al ver a su novia frente a él.—Cuando mi padre me dijo que afuera me esperaba una sorpresa, no creí que fuera tan perfecta, ya que siempre ha tenido malos gustos para escogerme regalos, pero esta vez ha acertado.Se acerca a ella, la toma de la cintura y la besa con todo ese amor que sentía por ella, nuevamente Dione está segura de su relación.—Parece que yo soy la que recibe la sorpresa.Lo dice por el gran beso que le ha dado su novio.—Bueno pues estuve pensando lo que dijiste en el almuerzo y la posibilidad de separarnos me tuvo tan mal, que no quiero que exista esa posibilidad, te amo y eso es mas fuerte que cualquier discusión tonta. —Vuelve a besarla.—Me alegra oír eso, ¿Nos vamos? —le abre la puerta del copiloto.—No puede ser, tendré una noche de Cenicienta —bromea y la hace reír.—Sube —le ordena.—No me hables en ese tono que me enciende —le runrunea y le guiña el ojo.La hace reír y finalmente se sube al auto, Dione se va al lado del piloto y se sube para colocarlo en marcha, mientras maneja, coloca la mano en la pierna de su novio para darle mimos.—Me siento mujer en este momento —se ríe Arden.—Esta noche, yo controlo todo amor.—Y eso me gusta mucho.Ellos son una pareja muy versátiles, por eso les gusta de vez en cuando ser dominado por el otro.Llegan al restaurante y se bajan del auto, Dione le da las llaves al valet y toma el brazo de su novio para entrar juntos al restaurante.—Elegante —Arden admira la arquitectura del sitio.Se adentran y son recibidos muy bien por el servicio, los acomodan en su mesa reservada y le dejan el menú para que puedan discutir su orden.—Me gusta el lugar que has escogido —dice Arden.—Todo lo especial para mí chico —le guiña el ojo.—Si sigues así me tocará darte el chiquito —bromea y la hace reír.—¿Cómo estuvo tu día?—Va mejorando contigo a mi lado —toma su mano—, ¿Y el tuyo?—Digamos que fue muy interesante.—¿Ah sí? ¿Y eso?—Pronto lo sabrás, ¿Pedimos?Arden asiente y revisa el menú, Dione estaba muy nerviosa por lo que había planeado.—Te ves muy guapo —admira ella con amor.—Gracias amor, y tú estás radiante —Él también la ve con esos ojos de amor.Eso la hizo sentir segura, claro que serían un padres grandiosos, claro que este bebé los iba a volver a unir, no quería perder a Arden.Lo ama demasiado para siquiera pensar en esa posibilidad, aún así, aquellos nervios de como él tomaría la noticia estaba insoportable.—¿Todo bien amor? —Arden se extraña.Ha notado que la pierna de su novia se mueve con intranquilidad.—Si bebé.¿Por qué estaba tan nerviosa? Es lo normal, ¿no? La respuesta de Dione no fue suficiente para Arden, así que insistió.—De acuerdo nena, no es que me guste estos detalles, pero estás actuando muy rara.Dione se levanta de la mesa, se arrodilla ante Arden y saca una caja de su cartera.—¿Me pedirás matrimonio? —Arden se sorprende.Él pensaba pedírselo en un futuro cercano. Dione lo ve con ojos de amor, esta muy enamorada de ese hombre.—Arden Jacob King. Es inexplicable para Arden, pero que su novia le pidiera matrimonio lo hacía sentir muy emocionado.—Vamos a ser padres —dice feliz abriendo la caja y mostrando la prueba de embarazo.A su novio se le borra la sonrisa de inmediato y Dione queda confundida. Arden respira hondo y cubre su rostro, Dione intenta descubrirlo, pero él aleja su mano con brusquedad, estaba enojado.—No me toques —dice como si le diera
Semanas antes…Arden estaba extasiado probando el coño de su novia Dione, siempre creyó que era lo más delicioso que había probado y la veía como una diosa. Dione estaba en la cama acostada boca arriba con las piernas flexionadas y bien abiertas disfrutando del sexo oral que le daba su novio.Él estaba un poco desesperado, pues solo tenía dos horas antes de que su vuelo despegara, pero como siempre, las ganas que se tienen los ha consumido que no pudieron aguantarse hasta el otro fin de semana o quien sabe cuándo.—Mmm —gruñe Arden lamiendo los fluidos de Dione.Con solo pensarse a sí mismo probando a su novia se le pone duro. Arden mete dos de sus largos dedos penetrándola mientras lame y chupa su clítoris. La espalda de Dione se arquea y emana más fluidos de ella, su cueva era tan estrecha que Arden pudo sentir como sus paredes se contraían, por eso aleja su cara de su tentadora humedad, saca sus dedos y se monta sobre ella, toma su falo entre su mano y se adentra en ella penetr
—Tu eres el que quiere mudarse conmigo, renuncia a tu trabajo y ven a vivir conmigo —contesta algo alterada.—¿O sea que tu no quieres vivir conmigo? —Arquea una ceja ofendido y ella se queda callada—. Por lo visto, este amor no es tan fuerte como para arriesgarnos a perder nuestra vida acostumbrada.—No digas eso, claro que nos amamos y por supuesto que quiero vivir contigo, ¿pero por qué insistes tanto en que yo lo haga? ¿Acaso lo machista no te permite venir a vivir conmigo? —Ella se cruza de brazos.—¿Machista? ¿Qué? No, ¿de que hablas? —La ve confundido.—Claro, porque la mujer debe dejar todo por el hombre, pero él no puede dejar nada por la mujer porque siente que está perdiendo su hombría, ¿no? Dejar el trabajo o vivir en casa de ella… —Él la interrumpe.—¿Entonces me echarías en cara de que vivo en tu casa? —Ella le iba a responder, pero él siguió hablando—. Pues estás errada, este apartamento quedaría cerrado y nos compraríamos algo juntos para que no sientas que no apo
Si Dione le encontrara el trabajo, Arden estaría dispuesto a dejar el acuerdo con su padre para estar con Dione, no le importaría trabajar de otra cosa que no sea para heredar sus bienes.[17:16] Dione: Me parece justo y razonable.Los dos solían ser muy competitivos, era divertido y gracioso, a ninguno les gusta perder, pero saben aceptar su derrota.[17:18] Arden: Te amo, te aviso cuando llegue.[17:18] Dione: Buen viaje, te amo.Ella deja su celular en la mesita de noche y termina de limpiar lo que alguna vez empezó, Arden siempre la ayudaba, pero está vez no tenían tiempo, pues tenían todo el día comiéndose entre ellos.Entre tanto coqueteo y provocaciones, no faltaba las ganas de follar, algunas veces estaban tranquilos y de repente comenzaban los toqueteos sin resistirse.No solo el sexo era bueno, sino también la clase de persona que son para el otro. Dione y Arden se conocieron en un evento de recaudación, quién debía asistir era el padre de Arden, pero este estaba ta
Dione desplaza dos dedos por sus labios y los acaricias mientras estos comienzan a sudar.—Mmm cómo me encanta que te portes mal, eso me pone tan duro —dice con lujuria—. Eres una nena desobediente y para eso estoy yo, para castigarte, así que no te vayas a correr hasta que yo diga. —Como digas papi. —Ella cierra sus ojos para imaginarse la escena.—Quiero que me mires. —Se venga con una sonrisa y ella lo ve frustrada—. Te tomo por los tobillos y te llevo al borde de la cama, acerco mi punta a tu entrada, pero aún no te hago nada.—Pues yo quiero que me penetres de golpe haciendo que jadee, que sientas mi calor acogiendo tu falo. Dione enciende su lámpara, se quita el pantalón junto con bragas, abre las piernas y le muestra su masturbación al novio.—Mierda… Deja sus labios ligeramente abiertos para respirar por la boca, lo había provocado mucho.—Eres tan estrecha que debo hacer más esfuerzo para adentrarme a ti, me muevo de adelante y atrás en un vaivén dilatando tu orifi
—No tengo tiempo, el trabajo, visitar a Dione… —Su padre lo interrumpe.—La hermosa Dione, ¿cómo está? ¿Cuándo nos visita? Mira que aún nos debe la cita en familia —le recuerda.—No lo sé padre, esto se vuelve cada vez más complicado. —Hace una mueca.—¿Tienen problemas? —Lo ve intrigado.—Siempre los hay, pero ahora están afectando más que antes, imagínate que mi chica ahora tiene inseguridades, ella no era así, se desanima —le comenta y se detiene en la entrada.—A lo mejor le vendrá sus días, todo estará bien, su amor es tan fuerte como para que renuncien a tres años de esfuerzos, sea lo que sea, sé que lo resolverán. —Palmea el hombro de su hijo.—Estamos intentado vivir juntos, ¿sabes de alguien que quiera contratar a una psicóloga? Su padre se alarma y lo ve con impresión.—¿Está desempleada? —No papá, solo que no quiere renunciar antes de no tener algo seguro, ella también está haciendo lo mismo por mí —le informa.—¿Planeas
O tal vez ya era hora de trabajar independiente, solo que no sabía por dónde empezar, reconoce eso también es mucho papeleo para no tener problemas o si aun le faltaba años de experiencia, tendría que investigar y dedicarse a ello.Ella llega a su departamento algo cansada, solo mentalmente, pues no tuvo que hacer nada hoy, apenas llego, se regreso porque claramente la han despedido, ahora ella tenía que planearse lo que haría en su tiempo libre restante.Camina hacía su habitación, se desviste y se tumba en la cama boca abajo, tal vez dormiría un poco.—¿Dormir? No puedo creer que mi vida sea tan aburrida que solo me entornaba a mi trabajo —se queja Dione disgustada.Ella tenía una vida normal, ¿qué más podía hacer? Tal vez le faltaba compañía, pero no tenía pensado tener hijos ahora. Dione se voltea y se levanta con pereza, está fuera de su profesionalidad actuar de esa manera, pero es consciente que no se puede auto medicarse.Se levanta, busca su celular en su cartera y regre
Sea como sea, él no la iba a convencer, sabía que solo era una estrategia para aceptarlo, Dione nunca rechaza cuando ya todo está hecho, él la conoce bastante bien. Ella se levanta de la cama y tal vez piensa ignorar lo que su novio dijo, había poca probabilidad de que hiciera esa locura de llegar a su casa por la obvia razón de que tiene un trabajo que atender.***El apartamento de Dione es tocado con desesperación y esta sale de la ducha para atender, no era adecuado, pero no le quedaba de otra que recibir a quien sea que esté tocando en toalla. Llega a su puerta con éxito, ya que tenía miedo de resbalarse, cuando abre la puerta se muerde la lengua, era Arden.—Nena, recoge tus cosas, nos vamos, ya tengo todo listo. Dione queda sin palabras, no debió confiarse, Arden deja de mirar su rostro y pasea su mirada por su cuerpo, ahora tiene una mirada muy tentadora.—Me encanta la forma en la me recibes nena, de verdad que sí. —Se muerde el labio y la ve con delicia—. Pero nos