Era el día de la boda, Connie y Rodrigo sabían del resultado de la prueba casera, había sido positivo, Sadé se encontraba extremadamente feliz por el suceso, era algo que no habían esperado, y más porque la chica tenía puesto el dispositivo, pero eso no le importaba a ninguno de los dos, ahora se convertirían en padres y eso los hacia completamente felices.
La chica se encontraba en la habitación de la finca de sus abuelos en la Toscana, la maquillista, peinadora y demás personas se encontraban co
La ceremonia religiosa fue realmente hermosa, fue oficiada en italiano con un traductor al español tanto para el novio como para los invitados que no hablaban el idioma; los novios se desprendían amor y lo contagiaban a las personas que se encontraban dentro de la iglesia, el momento más emotivo fue cuando los novios se juraron amor eterno. En la recepción algunos de los invitados se divertían, degustaban los platillos que la abuela de esta había ordenado, eltiramisúera completamente delicioso, la chica se encontraba completamente nerviosa, seacercóa la mesa donde se encontraba su familia sentada. Anna siempre su deseo era vivir en Europaahora porfin lo lograba, con Rodrigohabíaconocido Francia y otros lugares, pero siempre con limitaciones de gastos, le decía que el dinero que le daba por sus servicios de amante era lo suficiente para que pudiera ir de compras.Ella creía que este se encontraba en su error, necesitaba más, sus padres no la habían felicitado por su matrimonio con elviejo,dijeron que no aprobaban esa unión por conveniencia, a lo cual Anna le importo poco lo que ellos dijeron.Todo Cambio
Connie de la Vega Sotello tenia 19 años de edad, hace 2 años sus padres habían fallecido en un accidente automovilístico; quedando así sola con su hermano mayor Gonzalo que le llevaba 10 años de edad el cúal era abogado en la empresa de su mejor amigo, Rodrigo Sadé Ricarddi , una empresa naviera del estado de Quintana Roo. La joven estudiaba su cuarto semestre de la carrera de medicina en la universidad del estado, Connie siempre habia sido una chica dulce,tierna y un tanto timida; inteligente e igual algo nerd, siempre con las mejores calificaciones desde la primaria, hasta este grado de estudios; de una constitucion fisica delgada, de 1.58 cm de estatura,con unos hermosos ojos grises, piel color aceituna y cabello castaño ondulado abundante, que siempre lo traia amarrado en una cola de caballo. Desde que murieron sus padres la vida habia cambiado pero no tanto, ya que su hermano Gonzalo procuro que nunca le faltara nada; desde lo material hasta lo afectivo.
Sin más se arrojó a sus brazos y comenzó a llorar amargamente, no había llorado así desde que le habian entregado la urna, menos cuando se enteraron de la enfermedad.Ahí estaba él, Rodrigo ,él mejor amigo de su hermano con ropa de luto para darle las condolencias, y ella que hacía lanzarcele a sus brazos para llorar como una loca.A Rodrigo Sadé le causo asombro y una emoción un poco mal sana tenerla en sus brazos, era tan pequeña, tan frágil a su lado; que se imagino miles de situaciones tan poco probables en su mente, como agacharla y que se la mamara, o verla encima de él, desnuda, haciendo caras llenas de lujuria, se reprocho así mismo tener esos pensamientos en esos momentos.Hola pequeña-habló con dulzura, Rodrigo-no te preguntó como has estado, ya que es una pregunta estúpida en estos momentos-lo decía
Salio corriendo con todas las fuerzas que tenían sus piernas; no podía creer lo que había escuchado o peor aún no lo queria creer, para ella Rodrigo Sadé era como un hermano mayo al cuál admiraba y en una época de su niñez lo había visto como un princípe.Ahora en esos instantes esa imagen se había roto para siempre, él no era un princípe como se lo imaginaba, era un demonio que la quería llevar al infierno, ¿quién se creía ese hombre? , si bien ella en esos momentos de su vida no tenía la estabilidad económica de antes pero no era para que le propusiera esas cosas. ¿ser su amante? , ella no era una de esas mujerzuelas a las que Sadé estaba acostumbrado. Iba caminando por la gran avenida kulkulkan, solá con su pequeño bolso en la mano, donde llevaba lo último del mes, sus llaves y su celular, llam
Connie al día siguiente era un sábado, el verano daba su incio; muy pronto retomaría la universidad. Se levantó desayuno un pan tostado con café negro, estaba viendo su celular, veía las ofertas de medio tiempo, Buger King o alguna cadena de comida rápida, o quizá una tienda de conveniencia, estaba marcando sus opciones y enviando su curriculum, realmente no tenía experiencia laboral, nunca había trabajado. Cuando murieron sus padres, el que se hizo cargo de ella y los gastos del hogar fue Gonzalo; ahora se daba cuenta que era un mundo, pagar cuentas,comida, y muchas otras cosas más.Envió 10 Curriculums y se dispuso salir a correr un rato por la avenida junto a Sparky, la ventaja es que había previsto comprar dos bultos de comida de 20 kg para su pequeño terrier, mientras corría a su mente venian las imagenes del beso que le había dado Rodrigo Sad&eacut
Entró al edificio dónde se encontraban las oficinas de la naviera, era un lugar impresionante, cuando tenía 17 años iba a menudo para visitar a su hermano; despúes de que entrará a la universidad dejó de ir a ese lugar. Ahora el motivo era muy diferente,temblaba de pies a cabeza; pero recordó a su pequeño amigo,las cuentas sin pagar, que nadie le diera un trabajo en todo el estado, si lo que iba hacer era prostitución, sería la amante de un hombre,se vendería a él, podria regresar a estudiar y no tendria que vender sus cosas,ella y su pequeño Sparky estarían cómodos.Buenas tardes,me preguntó si el Ing.Rodrigo Sadé se encontrará disponible -habló la chica con un poco de temor- la recepcionista la reconoció de inmediato, la conocía,era la hermana del Lic. De la Vega. Le sonrió antes de hablarle y sinti&oa
Subió a su coche, tenía presente los labios y aroma de él en su ropa, no podía creer lo que comenzaba a suceder en su vida actual, manejo como una automata , tenía que cerciorarse que su pequeño Sparky se encontrará bien y pagar la cuenta, llegó a un alto y tomo de su cartera la tarjeta de crédito Black , la vió con asco y la volvió a meter en su bolso.Se estacióno para bajar con el veterinario, este salio e intercambiarón palabras, este último le permitió ver a su mascota unos mintuos, el pequeño se encontraba semi despierto y al verla movio un poco la colita.Hola, peque-dijo la chica-ya en cuanto te recuperes, nos iremos a casa ¿vale?- le decía mientras le acariciaba la pequeña cabeza al perrito.¿Entonces cuándo me podré llevar a Sparky,Doctor?- le preguntó a uno de los v