Mundo de ficçãoIniciar sessão
Capítulos relacionados
La flama del amor
Dariana pensaba que ese chico ruso solo la buscaba para molestarla — ¿Creés que no tengo el criterio como para elegir una amistad? ¿quién te piensas que soy? no soy una idiota— Entonces demuéstralo, no te parece demasiada perfección en ese tipo, algo esconde estoy seguro— Estás alucinando, Damiano, Teodor es un chico muy dulce, no tiene nada que esconder, deja de estar viendo monos con tranchetes, será mejor que ya vuelva con él, tú te pones muy extraño— vamos a un lugar primero, quiero decirte algo — el ruso se llevó de la mano a la joven Ferreira, ella quería negarse, cuando ellos se juntaban nada salía bien— ¿A dónde me llevas? no se te ocurra secuestrarme, ruso— ¿Para que quiero a una chica rebelde y malhumorada? quisieras — el joven ruso llevo a un salón a Dary— ¿Qué hacemos aquí? si nos atrapan nos pueden expulsar y ahora sí papá me deshereda, te digo que yo contigo nada más no— Ven aquí, quiero decirte que yo no soy tu enemigo, no es mi intención lastimarte o hacerte da
Una noche de ensueño y magnífica
La noche todavía era larga, las chicas bailaban y disfrutaban de la compañía de los apuestos rusos, muchas estudiantes las veían con envidia, eran Dary, Aithana y Casy, quienes tenían toda la atención de esos guapos chicos y a ellas no les daban ni la hora, sobre todo Damiano que era demasiado huraño De pronto en la fría noche pero divertida, Ivanko llevó a Casy a sentarse a una de las gradas, ahí los dos reían, se veían geniales con sus disfraces de vampiros, hasta que el joven ruso se puso serio— Casy, sé que has pasado por mucho en muy poco tiempo, pero también sé que eres una chica más fuerte de lo que parece, eres bondadosa y muy hermosa, no es un secreto que me gustas muchísimo, que solo quiero verte feliz, y aunque me gusta mucho ser tu amigo, yo... quisiera ser de tí algo más¿Cassandra Mancini, te gustaría ser mi novia? prometo que seré el mejor novio del mundo, el que más te cuida y el que más te quiere, ¿qué dices?— Yo... — Casy estaba sin palabras, la declaración le hab
Un día de confidencias
Al día siguiente, la desvelada y las bebidas hicieron que las chicas durmieran hasta tarde, la tres tenían resaca y no se sentían muy bien ya que no estaban acostumbradas a beberDespués de tomar una ducha y vestirse cómodas, fueron a la cocina a beber agua, tenían hambre pero el dolor de cabeza era igual de intenso— Creo que voy a morir de resaca, no vuelvo a tomar un vaso de ponche más en toda mi vida — Aithana se tiró en el sofá con las manos masajeandose la cabezaJusto en ese momento el timbre se escuchaba sonar, fue Casy la que abrió, para su sorpresa eran los vecinos— Buenas tardes dormilonas, les hemos traído remedios para la resaca, con esto se sentirá mucho mejor Las chicas de inmediato se apresuraron a ver qué era, ya no soportaban más— ¿Qué trajeron? ¡nos estamos muriendo! píldoras, sales, mmm lo que sea yo me lo tomo — dijo DarianaLos jóvenes les dieron las pastillas para el dolor de cabeza y los sal de uvas que ellos ya habían tomado desde media mañana para sentirse
La caballerosidad de los rusos
Las chicas después de haber tenido un excelente domingo, volvieron a la universidad, estuvieron concentradas en las clases toda la mañana hasta que fueron a almorzar a la cafeteríaRoxana Price, había logrado entrar en la prestigiosa escuela a base de sus buenas notas e historia de vida, ella quería poder recuperar el amor de Teodor, pero sabia que no la tenía nada fácil, pues él le guardaba rencor por haberlo dejado sin una razón aparente — Aithana, ¿que es lo que vas a comer hoy? — Alexander preguntó a su chica— Alexander, no vas a pretender comprarme el almuerzo, yo tengo dinero suficiente para comprarlo, además tu padre no va a enviarte el doble de tu mesada solo porque tienes novia, ¿cierto? así que deja de insistir— Bueno... pues ayer hablé con mi padre después de dejarlas en el departamento, le conté que tengo una novia muy hermosa, que es una persona muy especial para mí, entonces él dijo, sé un buen novio y deja el apellido Katrienko en alto y me depositó el doble de lo qu
El rechazo de Teodor
Todos se quedaron en silencio esperando la respuesta del Teodor, una bella chica lo estaba buscando, ella tenía los ojos llorosos, se podía ver qué no la estaba pasando bienLa voz del joven Torreneli los sacó a todos de sus pensamientos, cada uno estaba haciendo conjeturas— Ya te he dicho que no quiero hablar contigo, deja de perseguirme, lo nuestro ya fué, de hecho aquí está la chica que me gusta, se llama Dariana FerreiraDary escupió su jugo, ese chico que demonios pensaba— Teodor, no me utilices para huir de la chica, deberías hablar con ella, parece ser importante lo que tiene para decirte, de otra manera no se expondría a que la humilles delante de todos nosotros, ¿dónde quedó la educación y la amabilidad que según tienes? — No sabes lo que esa chica que parece que no rompe un plato hizo conmigo, no voy a cambiar de opinión, no tengo nada que decirle, y no quiero nada con ella, la única mujer que me gusta, eres tú DarianaA Damiano no le hacía nada de gracia que el principe
Un conmovedor amor
Todos los chicos se quedaron en silencio por un momento, a Roxana le bajaban las lágrimas sin parar, lo que había vivido no era nada sencillo de superar, pero estaba ahí, había superado su enfermedad o por lo menos estaba en el proceso, ella quería el perdón del joven Torreneli, con el había sido muy felizRoxana estaba mirando fijamente a su ex novio, el parecía estar perdido en sus pensamientos, ella se veía verdaderamente arrepentida, y contra eso él era vulnerable, por qué la verdad era, que pese a lo mucho que le gustaba Dariana, nunca había dejado de querer a su bella noviaEl chico avanzó lentamente hacia Roxi, cuando llegó hasta ella la abrazó, ella se deshizo en llanto y palabras que curaban el corazón herido del joven— Teodor... lo siento, siempre te he querido, no quería que sufrieras esta enfermedad conmigo, no quería atarte a mi, yo... creí que iba a morir— Calla, no seas tonta, no tienes que pedirme perdón por algo que no podías controlar, no puedo imaginarte sufriendo
La llamada de Danilo Ferreira
En la lejana Oxford, Drago ya se había enterado que Su bella Aithana se había ennoviado con el ruso Alexander, no la culpaba por hacerlo, entendía y a la vez estaba tranquilo de que tuviera quien la cuidara de ella— Drago, ¿qué te sucede? hoy estás más callado de lo normal, ¿no te gustó el sexo? — La sensual chica de curvas perfectas con la que el heredero Ferreira estaba en la cama, lo había notado distraído incluso mientras tenían relacionesDrago estaba experimentando una etapa nueva, se había convertido en hombre con esa ardiente estudiante de leyes, ambos se gustaban, ella era bellísima y él uno de los jóvenes más atractivos de la universidad— No es nada, no me hagas caso, me iré ya, tengo tareas que hacer — Drago recogió su ropa mientras que iba al baño a tirar por el retrete el condón que había utilizado, no le gustaba quedarse más tiempo del que se necesitaba— Quédate un poco más, mi compañera de cuarto regresará tarde está noche, no me gusta que seas tan frío conmigo, me h
Drago es firme con sus decisiones
En Oxford, Drago y Andrés estaban terminando sus clases del día, ellos intercambiaban comentarios, debían hacer unos análisis para la materia de finanzas, ellos practicaban el mundo de los negocios como si fuera real en esa materia, incluso el profesor les pedía ir vestidos formales, todas debían vestir de traje y corbataLos primos caminaban hacia la salida, lo único que querían era comer, descansar una hora y ponerse manos a la obra, pero fue justo en ese momento que Clare Ferrer se acercó a Drago— Hola bebé, pero que apuesto te ves hoy con ese traje, estás perfecto para que me acompañes a una comida familiar, mi padre acaba de llegar de viaje y quiere conocerte— Lo siento Claire, estamos muy cansados, estamos hambrientos y tenemos un proyecto que hacer— Pero Drago, ya le dije que te llevaría, no puedes dejarme plantada, eso sería muy grosero de tu parte — la chica quería enredar y comprometer al joven Ferreira a tener una relación de novios— Clare, mi respuesta sigue siendo no,
Último capítulo