"Todos somos cobarde cuando está en riesgo el ser que más amamos"Estaba acostada en su cama, abrazando a sus pierna mientras las lágrimas corrían por sus mejillas. Así se la pasaba últimamente.No entendía cómo había sucedido todo, el porque de las cosas, sólo podía senir dolor.Si, dolor. Ese dolor que le causaba el saber que Zach había sufrido un accidente. Y que dicho accidente, lo tenía inconsciente en un estado de coma, en una cama de hospital.¿Qué pasaría si Zach no despertaba del coma? Sí se quedaba así para siempre. Y sí Zach, ¿no volvía? ¿Qué haría sí Zach no despertaba nunca? Todas esas dudas atacaban su mente una y otra vez.Eli nego con la cabeza al borde de las lágrimas. No, ¿Por qué siempre tenía que pensar en esa posibilidad? ¿Por qué no podía dejar de pensar lo peor? Si bien era cierto que no había estado presente cuando el médico salió a hablar con la familia, pues se había desmayado, según su mamá, el médico había dicho que sólo quedaba esperar a que Zach reaccionar
"La verdad no es más que la expresión dolorosa del corazón" Había pasado una semana desde aquel día en que había desafiado a su mamá y fue a ver a Zach. Su madre se había enojado mucho con ella y como consecuencia de eso, estaba castigada de por vida según ella, cosa que realmente Eli dudaba. No era que no estuviera castigada. Sin embargo, estaba segura de que, con el pasar del tiempo, a su madre se le pasaría el enojo y reconsideraría el mantenerla castigada por siempre. Por los momentos, podía continuar con una rutina, la cual le permitía secretamente ir a ver a Zach a escondidas de su madre. Por la mañana, solía ir a trabajar en una heladería cerca de su casa hasta la hora del almuerzo. Tomaba su almuerzo allí o en una de las cafeterías del instituto en el cual se había inscrito para un curso de secretariado, el cual cursaba todas las tardes. Todo eso, era mientras estaba de vacaciones en en el colegio. Pues una vez que las clases comenzaran, dejaría ta
"La verdad por muy dolorosa que sea siempre es el camino adecuado" La muchacha se había puesto palida y estaba respirando con dificultad sentada sobre un asiento de la sala de espera. Él estaba ahí, a los pies de la silla frente a ella, preocupado por verla en ese estado. Parecía como si fuera a sufrir algún tipo de ataque cardíaco o algo por el estilo. Y todo porque él, había hablado de más. Harry no tenía ni idea de que, su familia, le hubiese ocultado la verdad del estado de salud de Zachary. De haberlo sabido, jamás le habría dicho nada. - Eli...yo...lo siento, no tenía idea. - No puede ser cierto. - lloraba ella desconsolada - El médico dijo que sólo debíamos esperar a que reaccionara. - lo miro implorando con la mirada que eso último fuera cierto. Pero Harry agachó la cabeza, sin tener el valor para mentirle. - Y... yo... - tartamudeo Harry, sin saber que decirle, ni como hacerlo. Eli negó con la cabeza. - No. - dijo. Se negaba a creer que Zachary no despertaría jamá
"Cuando desees morir, piensa en la personas que una vez murieron sin sí quiera desearlo" Apenas amaneció Harry llevó a Eli a su casa donde todos estaban angustiados. La muchacha se había dormido en brazos de él, después de pasar la noche entera llorando. Ellos dos, nunca habían sido amigos, de hecho él sólo había sido el amigo de Zachary durante todos esos años, el novio de la chica. Entre ellos, solo había existido un trato cordial y educado pero, eso había Sido todo hasta ese momento que, el dolor por la perdida de su amigo, los estaba uniendo. Ver a la muchacha, la novia de su amigo, en el estado en que estaba le había partido el corazón. Así que, a pesar de estar cargando con su propio dolor, no pudo menos que estar a su lado, sobre todo por Zach. Él mejor que nadie sabía cuanto la había amado su amigo. Por lo que, no podía dejarla sola con su dolor. La chica, llegó prácticamente en un estado de inercia. No respondió a ninguna de las preguntas que su madre o hermano le hici
"La muerte no es salida a ninguna solución, es el final a todas las opciones" Los rayos del sol, se colaron por su ventana, despertandolo. No entendía quien podía haber corrido las cortinas de la ventana, quitándole la oscuridad a su habitación. Pero Harry, estaba decidido a ignorar ese hecho y se arropó hasta la cabeza sin sí quiera dignarse abrir los ojos ni prestarle agencion a quien quiera que fuera que estaba allí. - Vamos Duchene, despierta. - dijo una voz femenina que no reconocía al mismo tiempo que jalaban de su cobija. A regañadientes Harry abrió los ojos y se sentó sobre su cama, entrecerrando los ojos para mirar a quien quiera que había irrumpido en su descanso. Natasha, al verlo, tragó saliva sintiendo como su corazón se aceleraba. Se veía tan sexy recién levantado. Pero no, ella no había ido allí a observarlo sino a pedir su ayuda. Harry entorno sus hermosos ojos color verde al mirarla y darse cuenta de quien se trataba. Era la amiga de la novia de Zachary, la mis
"No siempre lo que deseas es lo que necesitas" Había decidido levantarse, darse un baño, arreglarse y salir con Harry. Era mejor eso, a salir en un estado vergonzoso. Y sin embargo, en cuanto llegaron a una pequeña sandwicheria y pidieron un par de hamburguesas para cenar, su estómago gruño. Aún a pesar de decir que no tenía hambre, en cuanto dio la primera mordida a la hamburguesa que Harry le compró, su estómago pareció indicarle que necesitaba comer, así que se la comió toda. Y Harry se sintió totalmente complacido con ello. Una vez que acabaron de cenar, caminaron por un parque cercano a la casa de Eli, mientras comían helados, de fresa para ella y nutella para él, e iban hablando de trivialidades. - Gracias. - le dijo ella de repente sin sí quiera mirarlo. - ¿Por qué? - quiso saber aún concentrado en su helado. Él no había hecho nada en especial, más que invitarla a comer y ya. - Por esto Harry. Por lo que haces por mi, a pesar de que no somos amigos precisamente. - No e
"La fuente de la vida y toda dadiva buena es Dios" Habían pasado dos semanas desde aquella vez que Eli fue en busca de Harry a su colegio, desde entonces se habían hecho grandes amigos. Pasaban las tardes juntos despúes de clases, solían ir por un helado y luego caminaban por un parque que estaba cerca de la casa de Eli. Se habían acostumbrado el uno al otro. Y juntos, parecían sobrellevar mejor el dolor y la ttristeza por el trágico accidente de Zachary. - Con que aqui estás. - dijo Julian acercándosele en el receso de clases. Eli alzo la vista del libro que leia para encontrarse con un sonriente Julian. - Hola Julian. Este se sento junto a ella en la grama de los jardines del colegio, sin ser invitado. - Hola Eli. Asi que decidiste volver, ¿eh? Ella asintio. - Me alegra. ¿Podemos hablar? - añadió serio. - Por supuesto peroo, antes de que digas nada Julian, - cerró el libro que leía - queria disculparme contigo, por como te trate la ultima vez. -¡Guao! Te lo estas tomando b
"Cuando crees que has encontrado todas las respuestas, la vida te sorprende cambiando todas las preguntas" Estaba sentada frente a la ventana de su habitación, observando la lluvia caer fuertemente a través de los cristales. Sin duda que el tiempo reflejaba muy bien su estado de ánimo lloroso y melancólico. Aún no entendía por qué la vida había sido tan cruel con ella y con Zach. Después de haber vivido un amor como el que tuvo con Zach, la vida le hacia perderlo para siempre. Sumergiendola en el mas oscuro y grande dolor que habia experimentado. Sabia muy bien que jamás encontraria en nadie mas lo que habia tenido con él. Y Zach, después de ser un joven lleno de energia y sueños por cumplir, la vida se le esfumo en un abrir y cerrar de ojos. Truncando todos sus planes y el futuro que podía haber tenido. Las lagrimas empezaron a caer al son de la lluvia. Era algo que no podia evitar cada vez que pensaba en Zach, en el accidente y todo lo que eso implicaba. Entonces su telefono ce