En los momentos posteriores al impacto, el caos reinaba en la cabina del avión accidentado. Los pasajeros heridos y conmocionados buscaban desesperadamente una salida, mientras los equipos de emergencia trabajaban con premura para llegar al lugar del accidente. Los sonidos de las sirenas de los vehículos de rescate se sumaban al ruido ensordecedor de la destrucción.

Elena, Ronin y todos se apoyaron mutuamente en medio del caos, utilizando su conexión y solidaridad para mantener la calma. A pesar de la confusión y la desolación, su presencia proporcionaba un sentido de apoyo emocional en medio del desastre.

Las luces de emergencia parpadeantes arrojaban una luz tenue y sombría sobre la escena. Los equipos de rescate llegaron rápidamente, tratando de evaluar la situación y ayudar a los sobrevivientes. La tripulación y los pasajeros heridos eran atendidos con premura, mientras el humo y el olor a quemado llenaban el aire.

El tiempo parecía distorsionarse mientras los sobrevivientes er