Renata está intentando encontrar por donde sea a Thiago, en el instante que lo haya, es como si su corazón volviera a tener todos los pálpitos, que tal parece habían huido. —¡Thiago! —ella exclama, él voltea a verla—. No sabía que las cosas se tenían que acomodar a tu conveniencia, fuiste tú el que me hiciste daño y ahora estas ofendido— Renata habla solo para los dos.—¿Acaso cómo debo reaccionar según tú? Porque como eres tú de celoso ya no sé si respirar sola o te necesito a ti. —Renata dice eso tan fuerte que muchos se percatan, continuando hay con su atención puesta. —De una buena manera, pero sobre todo manteniéndote leal conmigo, esa es la única forma en la que podría cambiar contigo; pero tal parece que cada día se te desaparece más. —Thiago se queda analizando a los que están.—¿Qué pasa? —Renata agarra del brazo a Thiago, presiente que va actuar impulsivamente.—¿Se les ofrece algo? Definitivamente hay una manada de sinvergüenzas, que se ganan todo de la manera más fácil,
Thiago debe aprovechar la oportunidad y adelantarse a Luciano, puede que las cosas le funcionen y eso solo lo sabrá en el instante que actúe.—Que efusiva te convertiste, por mí que jamás las cosas cambien así estaremos en luna de miel toda la vida, puedo preguntarte algo es demasiado importante para mí. —Thiago está fingiendo con las expresiones de su rostro.—Como negarme si eres lo primero para mí, sí en mis manos está te juro que todo será concedido. —Ella se ríe, sin imaginar lo que le puede esperar. —Quiero ser papá. —Thiago comparte con ella un nuevo plan, el cual antes no estaba dispuesto a proyectarlo en su vida.—No entiendo me estás proponiendo que dejes mis metas atrás, todo para convertirnos en papás. Thiago esa posibilidad la veía muy lejos para mí, lamento confesar que no cambió de opinión —ella habla siendo bastante radical. —Por si no lo recuerdas es una de las partes que debes cumplir. —Thiago exhibe de nuevo su arrogancia.—Definitivamente me confundí contigo, est
Renata mueve su pie, Thiago levanta su computadora con ganas de evadirla, pero no puede del todo sus labios que están temblando lo envían directamente donde ella.—¿No sé qué fue lo que hice mal? para que, a nuestra vida, le hace falte algo de adrenalina, comprendes mi amor que el matrimonio lo exige. —Renata va directamente a sentarse sobre el escritorio.Renata cierra la laptop en la que evidentemente no está haciendo nada Thiago, sonríe coquetamente hasta terminar por abrir sus piernas. —Muchas veces te he hecho esta pregunta, sin embargo, tal parece que siempre es necesario repetirla ¿Me engañas con algún hombre? —Bárbara terminó por dejar a Thiago tan inseguro, que las ganas de mandar todo para el carajo le entraron.—No comprendo, si sabes que estoy locamente enamorada de ti ¿Por qué insistes? Hace un momento estabas tan cariñoso y ahora parece que solo me quieres despreciar —ella habla muy decepcionada. —Los comentarios nunca se agotan Renata, de hecho, en todos estás incluid
Renata solo analiza que ella es una humana, pero no tiene que tropezar de esa manera hasta terminar todo, por el bien de los dos no pueden separarse, ya que siempre se recordarán. —Es mentira lo que me dices, no te puedes quedar sin amor para mi… Thiago las personas nunca van a cambiar solamente cuando pasan unas horas, estás demasiado confundido y por mí podríamos dejar un día sin vernos, quizás ni lo aguantemos. —Vamos a platicar Renata, pero precisamente debe ser en el lugar donde hace mucho debimos haber ido, —Renata se da cuenta que la oficina está quedando desocupada, lo que quiere decir que nadie los podrá interrumpir.—Siempre tienes que ser tú el que elige, si tanto te interesa deshacerte de mí tendrás que hacer lo que yo digo. —Ella se pone bastante seria. —Tú me estás mandando mi amor. —Thiago se queda en silencio al notar que se acaba de equivocar. —Sí, acaso acabé de pisotear tu ego, porque tendrás que acostumbrarte a eso; ya no tendrás la misma esposa estúpida de sie
Barbará entra a la recámara de Gael, buscando una distracción para tener, no obstante, lo nota tan angustiado que simplemente la desconfianza empieza a llegar en ella. Gael tiene en sus manos una carpeta, la cual tiene el sello de la empresa de petróleos, algo que termina por bajarle hasta la presión a Bárbara.—¿Qué te pasa? Yo estoy disponible por si me necesitas, debe ser algo bastante grave precisamente tu aspecto lo hace ver así. —Bárbara va llegando hasta donde él está, Gael estira sus manos y riega todos los papeles.—Siento tanto si tienes que aguantarte mi grosería, porque estoy desesperado, soy bastante inútil para hacer las cosas, hasta alcanzó a sentir que el hábil es Thiago. —Gael está fatigado, por el poco aire que alcanza a respirar.—No tengo de otra Gael, aunque no creo que las cosas sean tan graves para que tengas ese rostro de angustia, todos los vemos exactamente iguales a los dos, deja de ser paranoico y mejor vamos a la cama, me desespera verla tan acomodada. —E
Thiago se queda en silencio, él no sabe si será un apoyo para su hermano, quizás sus sospechas no están muy desviadas y dar una lección para absolutamente nada servirá, ya que las consecuencias se les vendrán y todas al mismo tiempo. —Nos vemos en la empresa, necesito que llegues tú nos metiste en este maldito problema, es tu deber pensar en cómo sacarnos —Thiago le dice a su hermano, Renata escucha y se esconde detrás de la puerta para escuchar. —Lamento bajarte de esa nube en la que te subes, no pude evitar caer en las tentaciones de gastar gran parte sin medirme, pero todo lo mereces por quitarme a Renata mi felicidad… Todo es algo normal para el negociante que puede salir de lo que sea, demuestra que por algo eres el mejor de todos. —Gael está tirando lejos todo lo que ha cuidado Thiago, asimilando que ya no sirve. —Deja las excusas Gael, yo no soy el único que voy a perder, recuerda que este es nuestro patrimonio —Thiago busca todas las maneras para hacerlo entrar en razón.
Thiago está llenando unas cajas las cuales parecen siempre tener un espacio grande, él prefiere hacer todo solo, despegarse de su casa en nada le ayudará si está presente su esposa.Thiago revuelca sus cosas y cuando, llega precisamente a lo de sus padres, su mente se llena de recuerdos esos que lo hacen sentir peor, él se acuerda que su madre siempre le tuvo prohibido abrir un cofre.Los nervios lo están acabando, pero ya no hay nada que lo detenga a saber mucho más de la verdad. Thiago destapa la caja, él busca y hay demasiadas cartas donde sus padres se expresaban amor, en el fondo hay una bolsa con cinta a su alrededor, con un letrero en el centro donde dice “peligroso” Él sintiendo sobre sus manos miles de calambres lo destapa, antes de ver su contenido solo acepta que Gael no sería capaz de hacer una trampa, puesto que precisamente él daba todo por sus padres.Acaba de doler su pecho, por más de que hurga sus ojos no asimila lo que está viendo, su panorama acaba de modificarse
Dos meses después.Renata lleva horas metida en el baño, la angustia de Thiago es impresionante, así que él no duda en preguntarle que pasa. —Mi amor ábreme, estás demasiado mal para quedarte sola, no me vayas a negar las cosas porque exactamente note como tu rostro estaba pálido. —Thiago tiene unas inmensas ganas de derribar la puerta, su corazón no deja de palpitar.—Thiago estoy bien de hecho es un problema como según como tú lo veas, por mi parte yo nunca me voy a arrepentir, ve y te sientas en la cama yo ya te llegó. —Renata junta sus manos rogando para que todo fluya. Ella camina, insertándole más misterio a todo, Thiago tiene su cabeza agachada, no obstante, sus oídos están levantados para escuchar, algo que tal parece puede transformarle toda su felicidad. —¿Estás enferma Renata? —No lo estoy, simplemente porque estoy embarazada, precisamente esto es lo que confirma lo mucho que nos estamos amando. —Ella le entrega la prueba dónde exactamente dice positivo, él está pasmado