Axel se había marchado hacía cosa de media hora y ya lo echaba de menos . Echaba de menos sus manos en mi cuerpo, echaba de menos sus labios tan suaves y carnosos, echaba de menos su pelo rebelde haciendome cosquillas en el rostro, echaba de menos tirar de su piercing con mis dientes, echaba de menos recorrer todos y cada uno de sus tatuajes, echaba de menos su fragancia , echaba de menos su forma de mirarme , echaba de menos su forma de hablarme, echaba de menos sus "te amo"...
- ¡ Isaak ! - dije mientras lo buscaba por todo el apartamento , no estaba en su habitación , tampoco en la mía , ni en la de Jonas , así que supuse que estaba en la cocina y acerté - ey...¿ te apetece café ?
- claro, un segundo - la verdad es que no me estrañaba verlo sin camiseta , ya se estaba convirtiendo en una costumbre , una , que pensaba disfrutar - ¡ listo! - apenas se había puesto una camiseta blanca y ya lucía genial ¡ que envidia !
~☆~
Caminabamos lentamente en dirección a
Habían transcurrido 2 horas desde que Isaak y yo habíamos regresado de la cafetería.Él había quedado con Tyler y hacía rato que se habían marchado, mientras que yo en cambio me encontraba en el sofá del apartamento a la espera de que apareciera Axel.No sabía como diablos se podía echar tanto de menos a alguien. Cada hora , cada minuto y casa segundo de mi día se iban pensando en él , en sus caricias , en sus besos , en sus abrazos...y mientras estaba ensimismada en mis pensamientos me percaté de un sonido del que antes no ; llaves , pero fue tan solo ver aquel brazo recubierto de tatuajes que tanto adoraba , para saltar del sillón , cerrar la puerta de un portazo y besarlo. Pude ver como tiraba las llaves al suelo para agarrarme las piernas y colocármelas en sus caderas mientras que me empujaba contra la puerta. Sus dedos se agarraban fuertemente a mi cadera , ocasionándome una oleada de calor inimaginable , notaba como la excitación nos envolvía, ...solo quería más y más ..
Los dedos de Axel recorrían cada centímetro de mi piel , dejándome como rastro un suave y agradable hormigueo en ella . Mi cabeza se encontraba en su pecho desnudo escuchando todos y cada uno de sus latidos , fuertes e irregulares , latidos , que se habían convertido en mi melodía perfecta, mientras que acariciaba el tatuaje de su torso ; mi preferido ; el de Jason.Echaba de menos tanto a Jason.Echaba de menos sus pequeños pero fuertes abrazos.Echaba de menos sus chistes a altas horas de la noche , en las que todos nos acababan riñendo por hacer tanto escándalo.Echaba de menos dormir a su vera, mientras me contaba esas historias surrealistas en las que princesas se rescataban así mismas , dragones que no escupían fuego o monstruos de las cavernas queridos. Todos con una misma temática ; la diferencia.Echaba de menos sus bromas , aquellas en las que todo quedaba pringado o roto , en las solo él se reía . Eso era lo que más echaba de menos ; el sonid
...no merezco vivir, el dolor se está instalando en mi cuerpo y no puedo librarme de él. Me encuentro en un pozo oscuro y profundo del que no puedo salir. Siento como si todo fuera culpa mía, como si el mundo se volviera en mi contra, y ya no puedo más. No quiero seguir viviendo en este mundo, ni tampoco puedo. Lo siento, pequeña. No puedo seguir en este mundo, recuerda que te quiero más que a mi vida...Con las lágrimas anegándome la visión, tocaba el rostro sin vida de Jason, que se encontraba en medio de un descomunal charco de sangre...—Jason, despierta, por favor —susurraba con el dolor que tenía en el alma.Se me había abierto una herida enorme en mi corazón y no había forma de cerrarla.—Sé que solo estás dormido, despierta... ¡PAPÁ, MAMÁ!...—Amor, despierta... —mis ojos anegados en lágrimas no me dejaban observar aquel rostro que tanto amaba—. Ya estoy aquí... —los braz
Todo se mezclaba en mi mente mientras una aguja se entretenía dibujando en mi piel todos aquellos sentimientos en una simple palabra. Una palabra, un mundo. Miré a Axel que me agarraba la mano con cuidado, a la vez que pude ver como unas lágrimas amenazaban con salir a nadar. Unas lágrimas que lo resumían cada momento, cada hora, cada minuto y segundo a mi lado. Resumían cada beso, cada abrazo , cada noche enredada en él, cada "preciosa", cada carcajada sin sentido, cada lágrima, cada sensación, cada "te amo". Simplemente lo resumía todo.—Listo, ¿te gusta? —me preguntó Adam, un amigo de Axel, que se ofreció a hacérmelo él—. ¿Qué tal? —me levanté con cuidado al espejo que se encontraba junto a Axel y me acerqué.—Me encanta —susurramos tanto Axel como yo, me giré a verlo y limpiar todas aquellas lágrimas que se habían ido sin su permiso—. Te amo —le susurré en sus labios—, y siempre lo haré...
Nuestras respiraciones irregulares eran los único que se escuchaba en aquella habitación. Lo único, que se escuchaba después de que Axel me hubiese hecho lentamente el amor.—Norah... —sus dedos se movían suavemente por mi brazo, a la vez que los latidos de su corazón me brindaban una bonita melodía.—Dime...—Te amo con locura —sonreí. Me incliné lentamente hasta que su labios se encontraban a escasos centímetros de los míos, me acerqué y chupé su labio inferior.—Norah... —gimió.—Yo también te amo, Axel —sonreí con dulzura.—Oye amor, me gustaría que conocieras a Madison —sentenció, mi cara debía de ser un jodido cuadro, ya que en mi mirada halló la comprensión, asco.— Norah, no es lo que piensas, créeme. —Axel, os vi enrollándose aquella fiesta... —dije dándome cuenta de que mi voz había bajado de volumen considerableme
 —¿La novia? —dije incrédula.—Sí... —dijo intentando aguantarse la risa. No era gracioso.—Axel, yo quiero mucho a Jonas, pero tú solo míralo, ¡pero si es un niño!—De 22 años —como siguiera aguantándose la risa se le iban a salir los ojos de las órbitas—. Amor, me gustaría que me acompañaras a la fiesta de Logan...—¿Otra fiesta? Axel...—Por favor —me interrumpió—, quiero presentarte formalmente a mis amigos y todo eso...—Hasta medianoche...—Hasta medianoche se dijo —y de repente se empezó a reír solo sin parar. No entendía nada—. ¿Sabes que pasó a medianoche?—Cenicienta perdió su zapato —dije coquet
—¿Axel te dijo eso? —dije atónita.—Norah, no creo que llegues a imaginar cuán enamorado está Axel de ti, es algo surrealista. Puede tener una día de puta mierda, que tú sólo con una simple sonrisa se lo arreglas, puede estar fatal, que con un simple "te amo", haces que vuelva a sonreír como un niño pequeño, haces que se vuelva loco con una mínima caricia y que también lo haga cuando carece de ella. Norah, si le dieran a escoger un lugar en el mundo, diría sin pensar, amanecer a tu lado cada mañana del resto de su vida... Eres la única persona que tienes el poder de hacerlo el hombre más feliz o el más desdichado —sonreí, mientras que una lágrima resbalaba por mi mejilla.—No llores Norah, tienes a tú lado
 —Pude hablar con Madison —le dije mientras observaba como se quitaba la camiseta y me dejaba ver su hermoso torso desnudo—. Me resolvió alguna que otra duda que rondaba por mi cabeza... —fue suficiente esas simples palabras para que Axel dejara de hacer todo lo que estaba haciendo y me prestará atención.—¿Dudas ? ¿Sobre nuestra relación? —dijo alarmado, podía ver como su respiración se aceleraba, y su pecho subía y bajaba sin parar.—No te preocupes, Axel, no eran dudas sobre nosotros —suspiró aliviado mientras se acercaba a mi rápidamente y me empujaba contra la pared, para más tarde atacar mi cuello, dejando un rostro de besos salvajes en él. —¿Estás... segura, O'Conner? —sus labios empezaban a besar la parte inferior de mi clavícula y ya no podía pensar en otra cosa que en los labios que me recorrían, las manos que me tocaban y esa voz ronca que amaba—. Porque nadie te va a hacerte sentir como yo —sus manos se col