Narra Taylor:

Después del incidente con aquel hombre, no me sentía con ganas de nada. Así que decidí ir hacia mi casa a averiguar qué había pasado con mis solicitudes donde para mi sorpresa tenía dos entrevistas en cada una de las empresas que quería. En la empresa Whithe Sam S.A.S tenía entrevista mañana a las diez; mientras que en la empresa Edison S.A.S tenía entrevista pasado mañana a las dos de la tarde. 

Decidí ir a acostarme para esperar el nuevo día. Al siguiente dia, decidi colocarme un pantalon formal negro con una camisa blanca y recogerme el cabello para ir a mi primera entrevista. Cuando llegué a la empresa Whithe Sam S.A.S quedé sorprendida; ya que era bastante amplia su fachada se basaba en varias ventanas largas y angostas que cubrían cada superficie con un color azul rey. Al entrar, se notaba que era un sitio bastante conocido por sus comodidades, causandome intriga. Decidí acercarme a la recepcionista con el fin de averiguar dónde y con quién iba a ser mi entrevista, al recibir la información me dirigí hacia la sala de juntas donde se encontraban más mujeres para el puesto, como me imagine.

Tuve que esperar media hora para ser llamada por el gran jefe, quien se llamaba Cristian Whithe siendo un joven de 24 años aproximadamente, alto, con un cuerpo atleta se notaba que iba al gimnasio, su cabello era gris con unos ojos negros oscuros. Entre a la oficina y me presente, donde fui recibida amablemente.

— Así que señorita ¿Rendon? , ¿por que esta interesada en este puesto? — Pregunto mientras me miraba coquetamente. 

— Estoy terminando mi tecnologo en administración de empresas, este trabajo sería espectacular para mi, además que cumplo con las características expedidas — Respondí con total seguridad.

Así siguió la entrevista, hasta que el señor Whithe inició a hacerme insinuasiones coquetas, buscaba la forma de evitarlo y seguir con mi propósito inicial, el trabajo. Sin embargo, no se logró porque se acercó de una forma muy intimidante ocasionando que nuestras miradas quedaran fijas y sintiendo su respiración sobre mi. Tuve que alejar a la fuerza a través de un empujón porque quería trabajar, no ser la amante de mi jefe o al menos no de uno que no me interese. 

Di por perdida la oportunidad de ese trabajo, así que decidí esperar a mañana. Al otro día, decidí colocarme un vestido blanco formal con unos tacones que combinaban, dejando suelto mi cabello y maquillaje natural. Tenía la cita a las dos de la tarde, pero prefería ir con tiempo. Cuando llegué a la empresa Edison S.A.S me di cuenta que era un leve más pequeña que la anterior, pero tenía una fachada muy linda basando los colores de sus paredes entre blanco y dorado. Tenía en la entrada una foto muy linda, me imagino que era de la familia completa lo cual quedé sorprendida al fijarme en un joven en especial, era el chico que había chocado en el parque.

— Ojala, el no sea mi jefe o estoy perdida — Susurré mientras me dirigía hacia la recepcionista.

Narra Armando: 

Estoy cansado de recibir entrevistas y que ninguna cumpla con mis expectativas, esto de buscar secretaría era un trabajo muy agotador. Menos mal, me quedaban dos entrevistas y me iba hacia mi casa o a buscar una fantasía sexual con ayuda de Maria. Cuando lei los currículos quedaba la señorita “Taylor Rendon” y la señorita “Angela Thur”, asi que decidi hacer pasar a la primera.

Estaba mirando hacia la pared desde mi silla con mi posición de jefe serio esperando que abrieran la puerta, para voltearme y mirar a los ojos a una de mis posibles secretarias. Cuando entraron y la vi quede impactado porque era la misma joven que me había encontrado en el parque, el mundo no podía ser tan pequeño.

— ¿Señorita Rendon? — Pregunte sorprendido, intentando mantener una cara seria ante ella.

— Si sr, disculpe por el inconveniente de aquel dia — Susurro mientras bajaba la mirada, se veía tan tierna. 

— No se preocupe por aquello, siéntese a lo que vinimos — Ordene evitando aquel tema que me traía recuerdos.

Entreviste a las dos personas y les pedí el favor de esperarme afuera porque debía decidir entre ellas dos para el puesto. Taylor aunque era una joven sin experiencia, me había gustado su carisma y actitud para el trabajo. Sin embargo, Angela contaba con toda la experiencia necesaria pero su mirada coqueta no dejaba de advertirme que me demoraba más en contratarla que en despedirla al igual que a la anterior. 

Asi que decidi hacerlas pasar a las dos, les comuniqué mi decisión final y decidí que Taylor Rendon iba a trabajar conmigo como mi secretaria a partir del lunes, además de eso no niego internamente que quería conocerla un poco más y tal vez que fuera parte de mis fantasías sexuales, porque algo más serio me prometí a mi mismo que no iba a tener con nadie, así fuera el amor de mi vida. 

Decidí dirigirme esta vez hacia un club nocturno sentía impotencia y ganas de despejar mi mente, esta vez observando ya que amaba esos bailes eróticos que realizan las jóvenes, amaba colocarles billetes alrededor de su cadera o sobre sus senos y pedirles que se fueran desvistiendo poco a poco, amaba que ninguna mujer me rechazara y sabía que nunca iba a suceder porque mujer que le pegara el ojo, mujer que era mía definitivamente. 

Esa fue una de mis mejores noches porque tuve una sumisa perfecta para mí, aunque había sido solo con la intención de observar no pude quedarme con las ganas de más al visualizar a una de las bailarinas de cabello mono con ojos verdes y pecas. Sentía que debía hacerla mía donde al inicio me colocó barreras porque se notaba que era novata o eso parecía, porque cuando estuvimos en la cama juntos me di cuenta de la gran experiencia que podía tener esta mujer. Aunque, no lo niego se había venido a mi cabeza la imagen de mi nueva secretaria, ¿como seria ella en la cama? ¿sería sumisa o dominante? ¿se dejaría llevar fácilmente a la cama o sería un reto para mi? Sería algo que iba a averiguar muy pronto.