[XAVI]
《¡Estos labios!》 Exclama mi subconsciente mientras la beso. Saben a caramelo, ese sabor que me imagine una canción y que solo fue eso... producto de mi imaginación. Sujeto su cintura con fuerza pegando su cuerpo al mío, y es ahora cuando me doy cuenta de que esta mujer me gusta de verdad... Tanto que me asusta.
Me dispongo a intensificar el beso, pero no sé como sucede que ella muerde mi labio bastante fuerte haciendo que deba detenerme y la suelte. —¡Eres un completo imbécil! — Me grita y como si sus palabras no fueran suficientes, me da una bofeteada que me deja claro que no está jugando. —¡Serás muy Xavi de la Fuente, pero yo soy la prometida de tu mejor amigo, entiéndelo! — Continua y sin darme una oportunidad para defenderme o explicarle algo, se marcha dejándome solo en esta playa.
La observo alejarse de mí mientras mi cuerpo se desploma y caigo sobre la arena de rodillas. —¿Qué he hecho? — Me pregunto a mí mismo. —¿Qué me está sucediendo? —
Me siento sobre la arena y me quedo mirando al océano pensando en lo que me está sucediendo. No puedo... no debo... esto ya ha ido demasiado lejos, he besado a la prometida de mi mejor amigo, y no solo eso; siento unas ganas irresistibles de volver a hacerlo. No puedo enamorarme de ella, no quiero sufrir, pero tampoco quiero arrepentirme de lo que no he hecho. —Xavi, decídete... pon tu mente en orden, no puedes estar así. ¿Qué te sucede con ella? — He perdido la noción del tiempo pensando en ella, en lo que me sucede, y en Facundo. No puedo ser tan hijo de puta y enamorarme de ella. —¡Basta! — Me grito a mí mismo y me pongo de pie.
Camino hacia mi habitación agotado mental y emocionalmente, y al entrar me acuesto sobre la cama y poco a poco me voy quedando dormido.
[...]
Algunos golpes en la puerta me hacen despertar de manera abrupta. Miro a mí alrededor y ya es de día. Bastante dormido camino hacia la puerta y abro. —¡¿Se puede saber porque aun no estás listo?! — Me grita mi mánager.
Miro el reloj bastante confundido y me doy cuenta de que son las 9:30AM —¡Joder! — Digo asustado al darme cuenta de que en 30 minutos es el showcase para la prensa y gente de la discográfica.
—Si... eso mismo, date prisa. Te espero. — Me dice Diana y sin prestarle atención tomo la ropa y me meto al baño.
Creo que hacía tiempo no me duchaba y me vestía tan de prisa como lo he hecho hoy. Me termino de peinar y salgo del baño. —Ya estoy listo—Le digo mientras me mira atentamente desde el sofá.
Ella se pone de pie y comienza a caminar hacia la puerta —¿Se puede saber qué rayos sucede? Sabes que esto es importante. — Habla bastante enfadada.
《Si le contara...》 —No quieres saber. — Me limito a responderle y cierro la puerta de la habitación.
—Eso me preocupa... Cuando dices eso, mayormente significa problemas serios. — Me dice al entrar al elevador.
—Es algo personal, no tienes por qué preocuparte tanto. — Respondo tímidamente.
Su mirada se fija en mí y siento que en cualquier momento me va a regañar. —¿Personal familia? O ¿personal mujer? — Me pregunta y vaya que me conoce.
《Creo que no le responderé.》
—Prefiero no responder esa pregunta. — Me limito a decir.
Si las miradas mataran, si... estaría muerto. —Xavi, concéntrate. No estás para verte involucrado en ningún enredo de faldas en este momento. Los sencillos salen en nada y la prensa tendrá todas las miradas sobre ti. — Me advierte.
—Vale, no te preocupes. No pasara nada, yo sé porque te lo digo. — Le explico sabiendo que a pesar de que realmente me gusta Sara, ella no me dará ni la más mínima oportunidad de tener nada con ella.
—Ay Xavi, no sé si creerte, pero espero que sea cierto... no es momento para escándalos. —
—Ya lo sé Diana... ya entendí el mensaje. — Digo frustrado mientras bajamos del elevador y comenzamos el camino hacia el salón donde se llevara a cabo el showcase.
Caminamos en silencio hasta la entrada —¡Que empiece el show! — Dice al abrir la puerta.
No sé si son los nervios de presentar las nuevas canciones, o los nervios de que la veré a ella, pero mi corazón late a mil por hora mientras todos los fotógrafos comienzan a cegarme con los flashes de sus cámaras. Cuando finalmente llego donde está el piano, me quedo de pie y sonrió a todos. —¡Buenos días, gracias por estar aquí! — Saludo mirando a mí alrededor.
Hago un paneo general de todos los presentes en el lugar, hasta que mis ojos se encuentran con los de ella. Es insoportablemente bella... No puedo dejar de mirarla, es como si fuese un imán, uno del que debería escapar, pero no puedo. Tengo la sensación de que a pesar de que se que todo esto está mal no tengo salida; mi corazón late más fuerte que nunca ante su presencia, y esto nunca me había sucedido antes. 《Xavi, creo que has encontrado a quien tanto buscabas.》 Me grita mi corazón, mientras que mi mente le responde que no puede... y no debe ser ella. No, no puedo enamorarme de ella, no importa que tan rápido latas corazón mío, eso es simplemente imposible.
[SARA]Si hay algo que debo admitir, es que sus dedos fundiéndose en el piano generan magia. Las nuevas canciones que está presentando son increíbles; su música en sí, lo es. Lo escucho cantar, y yo no puedo evitar pensar en la manera que me ha besado anoche. Esto es una total locura; aun no me creo que me haya besado. Sé que está acostumbrado a tener cualquier mujer que él quiera, pero yo no puedo ser una de esas, yo soy la prometida de su mejor amigo. Sigo escuchándolo y cada vez que pronuncia una de sus mágicas frases, un nudo se forma en mi estomago. No sé si es la manera que lo canta, o que, pero su mirada se clava en la mía.《¿Qué te sucede Sara?》 Me pregunta mi subconsciente. Instintivamente llevo mi manos a mi estomago como intentando que se vaya esta sensación, pero es peor cuando lo escucho cantar otra frase de esas que llegan hondo. La i
[XAVI]—¡No, por favor no sigas! — Me exclama cuando mis dedos rozan sus labios con la clara intención de volver a besarla. Me quedo con mi mano en el aire cuando ella se pone de pie. —Lo siento, debo irme. — Me dice y nuevamente huye de mí.La observo caminar como lo he hecho antes y siento que estamos repitiendo esta escena una y otra vez. A pesar de que siento que esto ya no tiene sentido, me pongo de pie yo también y camino, pero esta vez no voy detrás de ella. Entro al hotel y tomo el elevador hasta el piso donde están nuestras habitaciones. Al llegar, voy a su puerta y golpeo. Me quedo unos minutos esperando, pero nadie responde. Supongo que no habrá llegado y me niego a moverme de aquí.[...]No sé cuánto tiempo ha transcurrido hasta que la veo salir del elevador, y su cara al verme es de absoluta sorpresa. —¡¿Qué haces aquí
[XAVI]El silencio en esta habitación es insostenible, tan solo son el sonido de nuestras reparaciones y suspiros los que irrumpen y yo no me atrevo ni siquiera a verla a la cara. Siento el movimiento de su cuerpo y al finalmente llevar mi mirada a ella la veo levantarse de la cama. Recoge su ropa del suelo y me mira —Cuando salga de la ducha espero que ya te hayas ido. — Sentencia.—¿Qué? — Pregunto totalmente sorprendido.—Xavi, que te vayas, y si eres un hombre, no le vayas a decir a Facundo de esto. — Me advierte.Me siento en el borde de la cama y la miro con mis ojos abiertos de par en par. —¿Te has escuchado? — Le cuestiono.—Sí, no le digas a Facundo. Solo eso te pido. — Repite.—¿Qué ha sido esto? — Me atrevo a preguntar.—No tengo la más puta idea y no me voy a poner a investigarlo. Yo tengo m
[SARA]Dos semanas despuésSigo dando vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño. Me siento la peor mujer del mundo, he puesto mil excusas para no estar con Facundo en estas semanas, pero es que no puedo... Miro al techo, vuelvo a voltearme, y así sigo hasta que no soporto más y me pongo de pie y sin encender la luz e intentando hacer el menor ruido posible busco el pantalón corto y la camiseta blanca que deje sobre la silla y me salgo de la habitación. Me visto rápidamente, busco mis llaves, mi móvil, y salgo de la casa.Nunca le he sido infiel a ningún novio que tuve y justamente tuve que serlo con el hombre con el que me casare en menos de un mes. No sé si pueda dejar las cosas, así como se lo dije en Miami a Xavi. No sé si mi conciencia me dejara quedarme callada. Camino por las calles en esta madrugada de verano y voy rumbo a la playa, el único sitio donde creo q
[XAVI]Aquella noche después de nuestro encuentro en la playa, la lleve a su casa donde vive con mi mejor amigo y me despedí de ella. En ese mismo instante sentí que mi corazón se rompía en mil pedazos, sabía que no debía enamorarme de ella y lo hice como todo un imbécil. Hui como un cobarde al día siguiente no porque debiera viajar como se lo dije a ella, si no porque no podía estar en la misma ciudad que ella mientras no estuviera casada. Tenía pánico de lo que sería capaz de hacer si me quedaba…Mañana es su boda, y mi regreso a Málaga es solo porque le prometí a Facundo que estaría allí. Lo que él no se imagina es que desde el día que la vi en su casa quedé hechizado por ella. Lo sucedido en Miami, fue tan solo lo que me hizo comprender lo que realmente sucedía en mi interior y no un simple acto f&iac
[XAVI]No soy capaz de entrar a la iglesia aún. Se que debería de hacerlo, que debería de estar al lado de mi mejor amigo apoyándolo, pero lo único que puedo hacer es quedarme aquí afuera y esperarla. No he dormido en toda la noche a pesar de todo el alcohol que hemos consumido en nuestra reunión de amigos, tampoco he podido dormir durante todo el día de hoy. En mi pecho esta la sensación de que están a punto de quitarme algo importante de mi vida y sí, estoy perdiéndola.Han sido dos meses sintiendo está sensación de que ella y yo estábamos destinados a estar juntos. Ha sido un tiempo donde no me he podido quitar su mirada, su sonrisa, su voz de mi cabeza. Fue verla aquel día y caer rendido a sus pies, fue saber que era a ella a quien conocería y saber que el destino se había equivocado. Fue estar con ella en Miami y saber que me hab&iacu
[SARA]Conduce a toda prisa mientras que yo siento que acabo de cometer la locura más grande de toda mi vida. No puedo dejar de pensar en Facundo, en lo que le he hecho, sé que me debe de estar odiando y preguntándose qué rayos ha sucedido aquí.—Deja de pensar. — Me dice de la nada como adivinando mis pensamientos.—Es imposible. — Respondo angustiada.—¿Tu pasaporte esta en la casa? — Pregunta ignorando mis palabras.—Esta en el bolso de ropa que llevaría a la luna de miel. — Explico y otra vez esa sensación de angustia me invade.—No tenemos mucho tiempo, vamos por el bolso y te cambias de camino al aeropuerto. — Indica y no entiendo nada.—¿Qué? ¿Al aeropuerto? — Cuestiono confundida.—Sara, no nos podemos quedar aquí, al menos no por unas semanas. &mda
[XAVI]No es que la conozca tanto para saber cómo siente, pero es claro que está asustada y muy confundida acerca de las repercusiones de su decisión. Sé que debe de seguir preguntándose si ha tomado la decisión correcta o no, y yo solo soy capaz de tomar su mano entre la mía.—Todo estará bien, te lo prometo. — Le digo intentando que los pasajeros de los asientos de atrás nuestro no nos escuchen.Ella me mira fijamente —¿Cómo me puedes prometer una cosa así? —Pregunta y la angustia en su voz me cala hondo.Inclino mi cuerpo hacia ella y acaricio su rostro con devoción. —Es la locura de amor más grande que he cometido en mi vida. No hay manera de que esto salga mal, no hay manera que esto desaparezca. Sara, no sé qué es lo que has hecho conmigo, pero pasaste por mi vida sacudiendo todos mis sentimientos,