Nathan
Envuelvo una toalla en mi cadera y me miro al espejo viendo algunos chupetones en mi pecho, cuello y el la V de mi abdomen bajo, giro un poco y observo marca de uñas en mi espalda, suspiro, Ximena me ha dejado marcado en todo los sentidos.
Nunca pensé que terminaría enamorado de alguien, siempre creí que pasaría mi vida de cama en cama pero como dice Javier cuando toca, toca y pues a mi me pego fuerte porque también tendré un hijo o hija pero aún así tengo miedo a no ser un buen padre.
Mi único ejemplo a seguir fue Javier, mi padre a pesar de ser un hombre trabajador, se pasaba de tragos y golpeaba a mi madre la cual nunca denuncio por ser una mujer codependiente.
Es malo cuando una mujer maltratada se vuelve codependiente y se enamora de su maltratador. Mi madre estaba tan enamorada que cuando mi padre falleció ella entro en el vició de las d
Ximena—Malditas hormonas, —murmuro mirando la ropa que Nathan trajo para el bebé—No quiero llorar pero las hormonas no me están ayudado, —añado colocando mi mano sobre la de Nathan quien sonríe y deja un casto beso en mis labios.—Tranquila, —susurra— ¿Que tal si vemos una película mientras comemos algo? —Pregunta después de un rato en silencio.—Me parece perfecta la idea, —respondo levantándome del sofá.—Le dire a Gabriela que prepare unos burritos, —anuncia pero lo detengo y el me mira confundido.—Le acabo de dar el día libre, —comento y este asiente—Tú encárgate de la película y yo hago los burritos, —añado pero este niega.—Mejor los dos hacemos los burritos y luego buscamos la película juntos, —asiento y es
XimenaCuando estamos en la habitación Nathan me deja en el suelo y yo lo miro con los brazos cruzados, este levanta una de sus cejas.— ¿Qué pasa? —Me pregunta para luego bajar sus pantalones deportivos y quedarse en bóxer.—Sabes muy bien lo que pasa, me prometiste que no harías ejercicio, —le digo soltando un suspiro.—Cariño, solo utilice la caminadora, prometo que no tomare ninguna de las pesas hasta que esto cure por completo, —me dice tomando mi mano y dejando un beso en mis nudillos, suspiro.—Está bien, —murmuro y este sonríe mostrando sus perfectos dientes blancos.—Ahora a tomar un baño, —me dice tomando los borde de la camisa que llevo para sacarla y dejarme solo en braga frente a él. Me atrapa entre sus brazos y yo aprovecho para envolver mis piernas en su cadera, Nathan camina conmig
XimenaLe entrego un vaso con agua a Nathan quien se ha mantenido en silencio observando a la pequeña niña a la cual le entrego un poco de jugo y le brindo una cálida sonrisa la cual ella me devuelve sin importar que le falta un diente, cosa que le da una vista muy tierna.Nathan está sumergido en sus pensamientos por lo que me siento a su lado y acaricio su espalda, sé que es difícil para el poder aceptar todo esto y más cuando llega una niña de donde nadie tiene idea diciendo que es su hermana.— ¿Que hago Ximena? —Pregunta en un susurro mientras me mira a los ojos, pienso en lo que diré, miro a la pequeña la cual está muy lejos de nuestra conversación. Observo su ropa sucia al igual que su rostro.—Ahora mismo creo que debemos darle un baño, ropa y comida luego si quieres podemos hacerle una prueba de ADN y si todo es pos
NathanGimo al sentir como algo o alguien mejor digo, chupa la punta de mi pene, abro los ojos y levanto la colcha que cubre a la persona que me hace un oral.—Buenos días cariño, —murmura pasando su lengua por sus labios y cuando estoy por responder mete de golpe la mitad de mi polla en su boca sacándome un ronco gemido. Llevo mi mano a su cabello para marcar un ritmo y alzo mis caderas sintiéndome tan bien con este maravilloso despertar.—Joder, —siseo cuando siento ese cosquilleo en mi vientre bajo que me avisa que estoy por correrme—Para, —pido en un jadeo pero ella no se detiene, suelto un gemido al correrme en su boca mientras que respiro irregularmente, Ximena sigue lamiendo mi polla prolongado más tiempo mi orgasmo luego siento como deja beso por mi abdomen hasta llegar a mi boca donde atrapo su nunca y tomo fuerte sus labios sintiendo el sabor de mi semen en su boca&
XimenaMe remuevo en la cama buscando el calor de Nathan pero despierto al no sentirlo, despacio abro mis ojos y miro su lado vacío. Me siento en esta y luego me levanto para recoger la camisa del boxeador la cual me colocó, camino hasta el baño, cepillo mis dientes.Cuando salgo por la puerta de la habitación entra Nathan cargando una charola, me da una sonrisa y coloca todo sobre la cama.—Buenos días, —me dice acercándose a mí para dejar un casto beso sobre mis labios.—Buenos días, —murmuro con una sonrisa para acercarme a la charola que trajo.—Me encargue de preparar el desayuno, —anuncia y observo lo que preparo: chocolate con leche y pan tostado con huevo revueltos.—Rico, —susurro mirándolo de arriba hacia abajo, esta vestido con uno Jean y un abrigo de cuello negro mientras que sus pies lo lleva descalzo.&
Ximena—Debes evitar hacer fuerza, —me dice la doctora después de que salen los resultados del bebé, miro a Nathan el cual tiene su rostro serio y en ningún momento me mira.—Yo me encargare de que no haga fuerza, —responde este por mí.—Bien. —Es lo último que dice la doctora. Salimos del consultorio y Nathan camina a varios pasos alejados de mí, suspiro y decido quedarme callada hasta que lleguemos a la casa.Cuando estamos en el estacionamiento Nathan me abre la puerta del copiloto, entro y el cierra la puerta para luego ir al lado del piloto, me coloco el cinturón de seguridad y Nathan pone el auto en marcha.(...)Duramos unos 38 minutos para llegar a la casa, Nathan desde que llego se encerró en el gimnasio y yo decidí subir a la habitación a recostarme un rato mientras que Fabiola está en su habitació
XimenaTermino de atar mi cabello en una cola para luego tomar la laptop y acostarme en la cama para abrir el Skype en la laptop y llamar a Nathan quien ya tiene cuatro días fuera de casa y ayer fue su primera pela por lo tanto hoy tiene el día libre para recuperarse de los golpes.Espero unos segundos en lo que Nathan toma la llamada luego aparece su rostro en la pantalla.—Hola amor, —suelto con una sonrisa la cual se borra al ver algunos moretones en su cara y una pequeña bendita en una de sus cejas— ¿Estás bien? —Pregunto preocupada.—Estoy bien cariño, —responde—Deberías ver al otro, —añade dándome una sonrisa— ¿Qué tal todo en casa? —Pregunta.—Todo bien, —respondo observando más a fondo su rostro logrando notar sus ojeras—Amor ¿Seguro estás bien?
NathanEntro al gimnasio y busco con la mirada a Alberto el cual está en una esquina hablando con Javier, me acerco a ellos y el primero me fulmina con la mirada.—Llegas tarde, —me dice serio.—Asuntos que atender, —respondo con una sonrisa de lado— ¿Comenzamos? —Cuestiono.—A la caminadora, —ordena como siempre, ruedos los ojos y tomo mi reproductor, coloco mis audífonos y voy a la máquina para comenzar mi rutina desde que llegue a Centroamérica.En unos días es mi segunda pelea y es contra la cobra, no sé quién es pero dicen que es una bestia en el ring, así que debo tener cuidado sino quiero terminar hecho mierda contra el suelo.(...)— ¡Más fuerte! —Grita Alberto sosteniendo el saco de box. Doy dos puñetazos más fuerte provocando que él se tambalee&mda