Daniel.Es la quinta vez que toco a la puerta de la casa de Ada, la muy canalla no se ha atrevido a salir para abrir. ¿Es que acaso cree que soy de hierro o qué? Cómo siga aquí parado con bolsas en las manos y sin luz, lo único que voy a ganar es que algún ladrón pase y me deje hasta descalzo. Para como están las cosas hoy en día en el país, hay que tener mucho más cuidado de lo usual, muchos han quedado en las calles debido a los recortes de personal que hicieron las empresas y tiendas y eso ha logrado que suba la delincuencia casi que en un 80%.Trago grueso cuando una moto pasa por detrás de mí con lentitud, por mera suerte son personas que no ven bien por donde van y no los malvivientes que suelen adueñarse de lo que no les corresponde por la fuerza.—Disculpe, ¿Quien es? —Escucho la voz de Ada, entre abre un poco la puerta y no lo dudo ni un segundo para entrar y cerrar con seguro.—¡¿Por qué tardaste tanto?! Por poco y se van con mi billetera ¿no has visto las noticias o qué? H
Ezkar:—Solo quiero dormir un rato y ver la televisión. —Rose se da media vuelta en la cama, dejando que la vea mejor sin esa molesta sábana que la cubre y mordiendo el labio inferior.—¿Por qué no te quedas por hoy? No entiendo, ya todos en tú casa deben de estar dormidos, aparte no hay luz... Sabes que tus padres no dejarían que actives el generador de energía solo para que pasen tiempo de calidad como familia. —Hace silencio y de pronto se ríe. —Sonó horrible, mejor ve a tú casa, creo que iré a ver a mi tía Sara... Con todo eso de la pandemia quedó un poco, ya sabes... Fuera de sí, le caerá bien que la acompañe.Observa un punto en aquel gran ventanal por donde solo entra la luz de la luna. Haber comprado este departamento en una de las zonas más altas y costosas de la ciudad sirve de mucho, porque se puede ver todo a la perfección.—Creo que tú misma te diste cuenta de algo ¿Cierto? —Rose asiente.—Lo mismo que tú, al parecer. —Dice sonriendo aún sin mirarme. Ella y yo, de alguna
Daniel:No sé porqué, pero en el momento en que Ezkar puso un pie dentro de la casa como que una mala vibra se instaló. Un escalofríos recorrió mi espina dorsal y su mirada tétrica, con la cual parece querer asesinarme no me dan muy buena espina,—Hey, —saludo. Pasa por un lado de mí, abraza a su madre y besa la frente de la misma. estrecha las manos con su padre, luego le da un puntapié a Ada y por último se hace el que repara en mi presencia y finge una sonrisa.—Daniel, amigo, tanto tiempo sin verte. —Comenta tan fuerte que creo que pudo haber sido escuchado por los vecinos de la cuadra siguiente.El padre, Erior mira de mí hacía su hijo repetidas veces, tratando de analizar con exactitud que ha logrado que es lo que realmente molesta al primogénito de la familia.Por otro lado, la madre, Mia sonríe abrazándonos y con ello, uniendo nuestros cuerpos con efusividad.—Que bien que llegarás, estaba pensando que se tendría que pasar tú turno para que Ada volviera a contar esa historia d
—Son cosas que le pasan a las personas infieles y traicioneras, nada de lo que debas temer amigo mío. —Frota mi hombro, el desgraciado lo ha hecho a propósito. Él y medio mundo sabe lo que sucedió con mi ex prometido porque es algo que los medios se encargaron de difundir de manera perfecta, pero él que Ezkar la usará para atacarme de esta forma fue mucho peor que haberlo visto en primeras planas. Fue como una declaración de guerra en vivo y directo. —Creo, que... Fue intenso. — Dice la mamá, —le toca a Daniel ¿Crees poder superar esa historia? —Traga con dificultad, está aterrada y espera que lo que tenga para contar sea más calmado que eso, espero no serlo porque Ezkar me debe una. Coloco una mano sobre el hombro de mi compañero. —Siempre he deseado contar esto... Es para las personas que suelen dormir solas... —Sonrío y Ezkar abre los ojos de par en par, es un cobarde de primera, desde siempre he sabido que detesta dormir con la luz apagada porque piensa que a mitad de la noch
Daniel:En mi vida había dormido tan incómodo como lo he estado intentando hacer durante toda esta noche en casa de Ada. En primera, porque Ezkar me ha tirado al suelo de una patada como venganza por haber tenido que venir a su hogar y quedarme, aunque era lógico que él no deseaba eso para nada. En segundo lugar, porque hay un bendito árbol del lado de afuera que con la luz de la luna toma formas espantosas que se ven desde donde estoy.Doy media vuelta y me cubro lo mejor que puedo con la sábana, pero entonces, escucho un sonido extraño y siento algo que se me clava en la costilla.—Aush. —Chillo, quito lo que cubre mi cabeza solo para ver que Ezkar está a nada de volverse una parte de mí cuerpo. —Vete a la cama, viejo. —Él cuál adulto que es, refunfuñando vuelve a la comodidad de su cama, pero en cuanto vuelvo a escuchar el mismo sonido salido de algún lado de la casa, lo vuelvo a tener casi que formando parte de una de mis costillas. —Listo, iré a ver qué es lo que está haciendo es
Daniel:—Has caído como un insecto en la tela de la araña... —La expresión de Red me ha dejado un poco fuera de lugar, la imagen de la chica con ojeras que se muestra en la pantalla es un tanto incomoda de ver, pues estoy acostumbrado a ver una mujer de buen aspecto y sonrisa encantadora, que siempre ha logrado cautivar a todos y cada uno de los hombres que se ha propuesto en la vida.—Déjame, no tengo culpa de que la cuarentena me mostrará cosas de ella que llegaron a gustarme de varias maneras. —Red se cruza de brazos. La mascarilla que tiene en el rostro no hace más que molestar, tanto a ella como a mí.A ella, porque no puede hablar con claridad. Y a mí, porque siento que me falta el aire de tan solo verla.—¿Tienes planeado invitarla o solo vas a esperar que vaya por su cuenta? —Se refiere a la primera fiesta que vamos a celebrar por haber pasado la cuarentena y seguir con vida, en pie y laborando.—La verdad, no lo sé, —suspiro, —estoy checando la lista de las personas que aún q
Daniel:De tan solo llegar a casa una mala vibra sube desde la punta de los dedos de mis pies hasta mi cabeza.¿Sucede algo señor? El chofer pregunta, pero niego de inmediato. Deben de ser imaginaciones mías por creer que tengo que fingir toda la velada que estoy de acuerdo con cada decisión que tome mi madre de hoy en adelante.Puede marcharse, Agrego al bajar del auto y tocar el timbre para que mi progenitora abra la puerta. Paso al menos 5 minutos parado en la espera de que alguna de las mucamas se tome el atrevimiento de abrir y nada, luego de volver a tocar insistente opto por golpear la puerta con fuerza. Detesto esperar y mucho más en mi propio hogar.Escucho que algo suena como si se hubiera quebrado dentro y es justo ahí, cuando busco con qué entrar por la fuerza. A mamá nunca le ha gustado que tenga llaves propias porque dice que para eso tenemos servicio al cual le pagamos para que haga su trabajo como es debido, pero creo que estoy empezando a lamentar el hecho de que viví
Ada:"Sea usted cordialmente invitada a nuestra primera fiesta de inicio, luego de la pandemia"Con ese eslogan del final llaman mucho la atención. Vuelvo a leer el mensaje una vez más para saber si de verdad me la enviaron a mí o se les fugó uno de esos textos que no pudieron detener a tiempo.—Oye, Zara. —La mencionada hace lo posible por no tirarse de cabeza de la cama. Hoy la he venido a visitar, porque ya está mejor pero aún no puede salir, más por miedo a contagiarse con cualquier otro virus debido a que quedó demasiado débil su sistema inmune por la cantidad de medicina que debió consumir. —Mira esto, ¿Crees que sea para mí?Golpea mi tapabocas con su dedo índice y agarra el aparato entre sus manos. Veo de refilón como Zeth pasa casi corriendo desde el baño hasta la habitación de al lado.—¡Te dije que te llevarás un paño! —Grita la madre de los gemelos. —¿No te da pena con Ada? Con esas canicas guindando, que horror.No puedo evitar reírme de la ocurrencia de la señora, ella