«Tú eres quien me hace llorar, pero solo tú me puedes consolar.»
[Malú]
--
GEORGINA
—¿BISTT? —pregunté deseando con todas mis fuerzas haber escuchado mal el nombre de la empresa con que LeMode se asociaba, y también la empresa en que trabajaría en México.
—¿Hay algún problema? —preguntó Águeda que también perdía la sonrisa.
—No —respondí, pero debí sostenerme de los brazos de la silla en que pretendía sentarme.
—Mujer, estás pálida —señaló Lino, que me abanicaba con un puño de folders.
—No es nada —aseguré—. No desayuné esta mañana, seguro se me bajó la presi&oa
«Yo nací para ti, es por eso que te vine a pedir... Cásate conmigo»[Reyli]--BRAULIODespués de al fin decir que aún me amaba, Gina pidió casi suplicante que trabajáramos y no volvió a dirigirme la mirada.«¿En serio todo se terminó sin más?, ¿de verdad nada podemos hacer para recuperarnos? Si la amo y me ama... ¿Quéla detiene?»Me pregunté mientras la veía revisar montón de papeles y hacer algunas anotaciones en una hoja.Yo no trabajaba, no podía apartar la mirada de ella; yo me llenaba de ella mientras ella permanecía inmersa en un mundo que le apasionaba, según pude ver.De pronto dejó los papeles sobre la mesa y, estirando sus brazos al cie
«Soy el hombre que está aquí, a tu lado, siempre aquí, que sueña poder mirar siempre el mismo amanecer que tú miras»[Leonel García]--—Mamá, cuando yo sea grande quiero ser médico como papá —dijo el pequeño de cabellos oscuros, arrancándole una risa a Georgina y la cordura a Braulio que, desde la sala, miraba con hostigamiento a su amada esposa en la cocina.—Amor —habló Gina—, tu papá no es médico. Aunque pudiste tener un papá médico no pasó, porque tu papá era muy insistente —dijo burlándose de la cara de pocos amigos que su marido hacía.—Entonces, si no es médico ¿por qué ayer traía esa bata y su tetoscopio? —preguntó el peque&
"El tiempo lo cura todo y un clavo saca otro clavo"[Melendi]--MARCOSYo, que la vi alejar con todas sus fuerzas a ese hombre que la amaba, al que amaba, pero que no quería tener cerca para no hacerlo sufrir, temí que, en la lejanía, le diera por intentar no preocuparme con las cosas que le ocurrían.Yo, que viví con ella tantos momentos dolorosos y tantos momentos hermosos, la conocía demasiado bien como para no darme cuenta que, aunque me amaba, ella jamás dejó de amar a Braulio. Por eso temía su regreso, porque yo sabía que su corazón era más de él que mío.Siempre pensé que si él aparecía yo debía desaparecer, y había decidido que, aunque no fuera fácil, lo har&iacut
Braulio Luna juró no enamorarse de nadie, pues el amor no era algo en que quisiera confiar. Pero cuando se dio cuenta de sí, ya estaba colado por Georgina.Georgina Vega tenía tantos problemas que no tenía tiempo para el amor, y cuando Braulio aparece en su vida buscando tener su atención, ella se decide a ignorarlo por completo, pues, además, Braulio era justo el chico de quien no debe enamorarse.Sin embargo, aunque ambos se negaron, los dos cayeron en ese absurdo juego, para descubrir que en el amor, como en la vida, las cosas siempre pueden ir peor. El amor que odiaban, y al que temían, era mucho peor de lo que imaginaban.Pero en la vida no todo es drama y tragedia. Si uno no se rinde puede obtener también cosas buenas. Pero... ¿será que Braulio quiera pelear por Georgina?, ¿será que Georgina quiera luchar por Braulio?.Solo leyendo y cantando lo descubrir
«Lanzaste la moneda, fuera cara o fuera cruz ganabas como quiera»["Un disparo al corazón" Ricky Martin]-BraulioLo único bueno de ser el heredero de la corporación de modas en que trabajaba mi padre, eran las incontables fiestas en que la pasaba rodeado de bellezas dispuestas a lo que fuera para tener una oportunidad en la empresa.Ellas se acostaban conmigo como si yo fuese capaz de hacer algo más por ellas que no fuera darles placer de una noche.«Ilusas»Ni porque escuchaban tantos rumores sobre mí se hacían una idea de lo que estaba esperando de ellas y lo poco que ofrecía a cambio.O tal vez lo sabían. Tal vez todo el mundo sabía que yo era un completo idiota que nació bendecido con riqueza económica, y que solo podía ofrecerles amor de una noche y uno que
«Aunque te conozco poco, ya te quiero mucho»[Río Roma]--Braulio—Si te demanda por acoso no voy a intervenir —sentenció mi hermana que, de nuevo, decoraba su oficina con las flores que yo le había enviado a Georgina. Ella siempre las rechazaba diciendo que estaban dedicadas a la persona incorrecta, incluso el mensajero había comenzado a llevar los ramos directamente a la oficina de Elizabeth—. Tienes que parar esto, soy casada hijo de Dios, y no quiero malentendidos —dijo Elizabeth que ya no tumbaba mis pies de su escritorio.Hacía semanas que procuraba mantenerme con los pies en el piso, para así pensar con más claridad. Pero no funcionaba.—Liz, ella ni siquiera me mira —informé apesadumbrado algo que ella sabía, pero que necesitaba desahogar, y Elizabeth era mi confid
«Lo puedo imaginar pero no sé cómo se siente»[Jesse & Joy]--GeorginaDesde que lo escuché insultarme —sin razón alguna— en mi primer día de trabajo en la presidencia de su empresa, me decidí a ignorarlo. Él parecía una persona problemática, y problemas eran lo que a mí me sobraban. No lo necesitaba y no lo quería, pero él me quería a mí.Intenté ignorarlo, pero no me fue posible. Él era de las cosas que no se pueden ignorar, de las que, aún a kilómetros de distancia, llaman la atención. Braulio poseía una poderosa luz que atraía a horribles alimañas y almas sedientas de cualquier cosa que no sea oscuridad, yo era de las segundas. Y creí que él jamás se fijaría en mí, pues de las primeras
«Digo que te amo, que no puedo estar sin ti porque te extraño»[Marco Di Mauro ft. Maite Perroni]--—¿Qué estás haciendo? —preguntó el hombre que despertaba al movimiento en su cama.Braulio abrió los ojos para encontrarse con la espalda desnuda de Georgina, que estiraba sus brazos al cielo, permitiéndole apreciar muchos de sus huesos marcando sus pocos músculos y su delicada y suave piel.Sonrió al recordad que, apenas unas horas atrás, la mujer de su vida se había convertido en su mujer.—Debo ir a casa a cambiarme para ir a trabajar —dijo Gina después de bostezar y devolver los brazos a sus costados.Entonces, pasándose la camisa de Braulio por el cuerpo, se puso de pie.Viendo a amada dispuesta a irse, Braul