Es como estar en una película de terror oh más bien en una pesadilla, la falta de oxígeno hacia que mi corazón palpitara más de lo que ya lo está haciendo mis pulmones me arden tanto que gimeria eh gritaría de dolor.
Empapado por la tormenta que esta, caminaba dando pasos torpes y cortos sin despegar la mirada de ella.
Sus ojos brillaban tanto en la oscuridad de este edificio abandonado, su pecho subía y bajaba una y otra vez, su cuerpo temblaba mucho, mechones de su largo cabello caían de su cara, no hacía falta en ver la expresión que tenía en su cara se perfectamente lo aterrada que esta al a ver hecho eso.
estoy en shock, pero no tanto como mis amigos que miran de la misma forma en la que la miré a ella esa vez... esa vez en el que supe que nuestras vidas no serían como antes, es vez en que ella sabía perfectamente que lo que hizo estaba mal pero no quería ocultarme lo más.
Antes de colocarme frente de ella cae de rodillas al suelo eh se cubre la cara con sus manos ignorando todo me hinco frente a ella tomo sus manos para poder ver esa mirada suya que me atrapo, sus manos tiemblan entre las mías veo en su mirada alivio y a la vez tristeza y dolor.
-Tranquila... -limpio con mi pulgar una lagrima que paseaba por sus mejillas- tranquila...
¿Por qué esta así? ¿Por qué siento que algo mucho peor se avecina y no podre hacer nada al respecto? ¿Por qué?
No quiero verla a si... no quiero verla nunca más así porque me duele me duele y mucho me duele ver a la persona que amo de esta forma me duele tanto.
EL ASALTANTE FUE ASALTADOMiraba de un lado para otro observando con mucha atención cada detalle de los edificios de esta ciudad, las calles se encontraban transitadas por muchos carros y personas que unas iban al trabajo otros a la escuela y unos solo salían para distraerse, balanceando mi pie hacia adelante y atrás miraba a las personas recargando mi cabeza de lado en mi rodilla anhelando que hoy fuera un día tranquilo sin preocupaciones, sin mucho que hacer.Hace mucho que no tengo un descanso en vez en cuando me gustaría tener uno o dos días de vacaciones por lo mucho, acaso los ángeles no tenemos ese derecho –suspiro- luego se me pasa por la cabeza que nos explotan mucho el cielo.-Conque aquí estas &nd
PRIMER DIA, NUEVOS AMIGOSMe muevo de un lado para otro evitando que los rayos del sol me den en la cara y me despierte, algo peludo se desliza por mi nariz molestándome que lo alejo con una mano, me cubro con mis alas de los rayos del sol para dormir un poco más, solo quiero eso dormir un poco más es lo único que pido.Estoy a punto de regresar al mundo de, los sueños cuando alguien toca la puerta de mi cuarto impidiéndomelo.-Alison estas despierta...No por favor quiero dormir...-Hum...-Mike me comento que te cuesta mucho despertarte... ya es tarde para que vay
NOCHE DE ANGELESEl ardor en mi garganta, lo seca que esta hace que abra los ojos despertando de un rico eh exquisito sueño, me incorporo en la cama y tallándome los ojos miro de un lado para otro la habitación, intento decir algo, pero me detengo cuando mi garganta aparece un leve ardor.Aun con el sueño presente en mi me las ingenio para levantarme, salir de mi cuarto bajar las escaleras y llegar hasta la cocina por un vaso de agua, en el momento en el que el líquido baja por mi garganta este deja de doler haciendo que me relaje por completo.-Ah... nada mejor que un gran vaso de agua –digo dejando el vaso en la barda.Estaba por servirme de nuevo que una fuerte brisa choca p
MI AMOR-Dame solo una, una razón para darte mi pudin de chocolate –dice apuntándome con una cuchara.-Una ok, tu llevas más tiempo en este lugar y yo bueno no tanto así que tú ya has comido muchas pero muchas veces el pudin y para mi es mi primera vez comiéndolo, además era el último en la cafetería por esa razón me lo debes de dar.Daniel se me queda viendo entrecerrando los ojos aun apuntándome con la cuchara, pensando si darme su pudin o no, nos encontrábamos en unas de las bancas con mesa en la escuela, Ángela junto con Samuel fueron por unas bebidas y Rían aún se encontraba en exámenes hoy le tocaban tres así que está ya en su &uacut
INVITADO SORPRESAEra ya fin de semana y los exámenes al fin terminaron que hoy sábado me encontraba acostada en una fuerte rama del único árbol en esta casa, mis brazos y piernas colgaban que me parezco a un gato disfrutando de la sombra de este árbol y el sonido del viento al mover sus hojas.El chapuzón de las ranas en el estanque y los peces hacen que el sueño se extienda más y más.Rían no se encontraba en casa había salido muy temprano hoy que no ha regresado y eso que ya es tarde, cambio de posición en la rama para dormir mejor.Todo lo que restaba de las semanas de exámenes no vi a Daniel y ninguno de los chicos por los
SENTIMIENTOSAcostada mirando el techo café claro que se tiene las sombras de las cortinas a mi lado derecho moviéndose por la brisa que entra a la habitación, llevo acostada aquí desde las once de la mañana me eh querido levantar, pero cada que lo intento caigo de nuevo a la cama toda cansada como si mis fuerzas hubieran desaparecido.-Quiero ¡salir de esta cama! –espeto haciendo que Daniel alce la mirada de la revista que está leyendo con una ceja alzada.-Ni se te ocurra, aun tienes fiebre Alison tienes que estar en cama hasta que disminuya por lo menos.Bufo- esto es molesto –hago una mueca- amo la cama, pero ¡quiero estirarme por lo menos un poco!<
UN DIA DE PELOS, NO DE PEDOSCon pasos lentos y sujetándome de, la pared camino hacia mi objetivo que es la sala, ya me cansé de estar en cama en todo el día, ayer lo estuve desde que amaneció hasta que anocheció, necesito alejarme de la cama un poco por lo menos que descanse de mi la pobrecita cama.Daniel no se encontraba en la casa ya que hoy era día de escuela y el no quería faltar por que se toma muy enserio su vida como si fuera de aquí pero bueno.Estoy a nada de llegar al sofá cuando piso mal y caigo al suelo, no puedo mover mis piernas si pudiera hubiera sacado mis alas y elevarme un poco del suelo para llegar al sofá, pero no, tampoco puedo porque no tengo energía contrabajos y puedo
ALMA ESCURRIDIZA-No puedo más –se tira en el césped Ángela- si doy una vuelta más a la cancha mi vida terminara.Tomo una de las botellas que nos compró Daniel y se la doy, rápido me la quita de las manos y empieza a tomar de la botella como si no hubiera un mañana, abro la mía y tomo agua con mucha tranquilidad. El maestro nos hizo dar 100 vueltas por la cancha Ángela y yo íbamos por la vuelta 30 y ya no podía más, yo por otro lado no me sentía cansada ni agotada por no dejarla atrás aquí estoy con ella a su lado como toma grandes bocanadas de aire muy cansada, sus piernas le tiemblan algo gracioso la verdad.-Es mejor que nos vayamos a la sombra Ángela, estar bajo el sol puede hacerte daño –aconsejo.-Quiero... pero no me puedo mover –me estira s