Dulce seguia con su vida, hace pocos dias Camelia se comunico con ella, agradeciendole por haberla ayudado y cuidado en todo este tiempo, ahora ella iba a buscar su felicidad y seria completa, Elias no se quedo atras cuando supo que su amada se iria lejos, con mucha pena dejo a Dulce, pero se apresuro a seguir a su destino amoroso y esperaba no desilucionarse—Recientemente ¿Como te has sentido Dulce?—Mejor doctora, gracias por preguntar—Ahora si hablaras o quieres seguir haciendo conversaciones casuales hasta sentirte comoda conmigo —Estoy lista para dejar salir todo lo que llevo dentro—Me parece perfecto, vamos a empezar La consulta se tardó más de lo normal, Dulce saco todo el dolor que llevaba dentro, no reprimió nada, en esta etapa entendió que sí no sanaba su heridas del pasado no podía seguir y por ende no podía dar el mejor cuidado a su pequeña Scarlett, ella necesita una madre fuerte que lleve heridas, pero cicatrizadas para poder dar lo mejor de si misma —Ahora ¿Como t
Dulce se levantó sin despertar a Caleb, se metió al baño, necesitaba relajar un poco el cuerpo Caleb no fue duro, pero la atormento toda la noche sin darle un respiro, suspiro, salió del baño encontrando a Caleb sentado en la cama con solo una toalla diminuta encima, sonrió ante la mirada atónita de Dulce levantándose para avergonzarla más, esos gestos no podia olvidarlo nunca—¿Pensabas abandonarme? me siento usado, Dulce, estamos divorciados aun me utilizas cuando deseas, no te creia así —Utilizada fui yo, tú solo vienes y vas como la marea y piensas que tengo que estar a tu disposición para cuando gustes venir a mi, estás equivocado conmigo Caleb, yo no soy de tu propiedad, no soy un juguete —Lo se, jamás serás de nadie y menos mía, pero te diré algo importante, yo si soy tuyo para siempre, pronto terminará todo y al fin podré estar contigo y con el en..... Scarlett sin tener que separarlas de mi lado, las quiero conmigo siempre—¿Estás seguro que te esperaremos? De ti, yo no est
Después que Caleb se fue, paso mucho tiempo antes de que supiera de que Dulce pudiera saber de el, nunca descuido su deber de padre, tampoco fue un canalla, le dejo todo como cuando se divorciaron, ahora es Dulce la que se siente perdida sin su obsesivo acoso, lo extraña a morir, siente su ausentia, su cuerpo no puede engañarla, sabe que lo necesita, se acalora solo con verlo en la televisión, recuerda y rememora cada uno de sus calientes encuentros, si no fuera por su hija hace mucho hubiera ido tras el, pero sabe que la culpa es suya, ella lo alejo ya hora debe vivir con la consecuencia de sus actos, mas que todo ahora el ya esta con alguien, ya paso la pagina, solo ella por terca se estanco—Veo que te sigue faltando sexo, niña—Buen dia señora Gardenia ¿Como amanecio?—Rejuvenecida, empece con una noche de placer con todos mis juguetes sin imaginar que mi vecino me estaba viendo y luego se unio al juego, asi que estoy cansada pero feliz, te hace falta una sarandeada mija, te veria
Dulce regreso a casa muy tarde, borracha y llorando, entró despacio para no despertar a nadie y menos a su hija, no estaba en condiciones para cuidarla, camino lento a su habitación, quedando frente a la ventana, el frío viento choca contra su rostro devolviéndole algo de sobriedad, suspira si. muchas gana y comienza a desvestirse sin saber que alguien la vigila Caleb tragaba duro del otro lado de la cámara, tenía acceso a todo el dormitorio de su Venus, su cuerpo empezó a calentarse con solo observar quitarse el abrigo, nunca pensó ver derrumbarse a una mujer muy fuerte que no nunca se doblegaba Dulce lloraba desolada, tapándose la boca con fuerza, no necesitaba que nadie la escuchará, lloro amargamente en el suelo de la habitación hasta cansarse, después de un momento que pareció eterno para Caleb, Dulce se levantó limpio su rostro y se dirigió al baño, su piel palida tomó un leve tono rosado por el agua caliente, lo que paso después Caleb no lo espero Dulce comenzó a llama
Dulce camino por la playa descalza, llorando, no queria llegar a la casa, se sentia tan culpable por su hija, la terquedad que tenia, su orgullo la habian alejado de formar una familia, siguio llorando amargamente, gritando tod su dolor, se preguntaba ¿Sera que en esta vida no tengo derecho a ser feliz? despues reia con ironía, ella mismo no se lo permitia, en vez de luchar al lado del hombre que demostro amarla, el hombre que puso todo a su pies aunque se equivoco y trato de remediarlo, ella simplemente se fue, lo dejo cuando mas lo necesitaba y el jamas se lo reprocho¿Aun asi seguia haciendo la digna y poniendo de pretexto la "seguridad" de su hija? ¡Vaya mentira!Los primeros rayos de sol cayeron en su rostro, varias botellas de licor a su alrededor le decian que hoy su cabeza doleria como nunca y solo ella seria la culpable, suspiro y se sento abrazandose, el viento frio la hizo temblar, miro el basto mar y se levanto limpiando la ultima lagrima que derramaria por Caleb, de ahora
Había pasado tanto tiempo desde que lo vio, al parecer la última vez se sorprendió tanto, que deliberadamente escogió no encontrarse cuando visitaba a Scarlett, los dias parecían meses, los meses años, sentía un vacío tan grande que a veces lloraba en silencio, solo esperaba terminar este proyecto y poder regresar, esperando que no sea tarde para hacerlo —Biscocho, falta poco para celebrar el primer año de la bebé ¿Que vamos a hacer? está celebración no puede pasar desapercibida —No soy "bizcocho" señora Gardenia, soy Dulce —Para empalagar es lo mismo Dulce bufo, sin poder decir más—Estoy planeando una pequeña reunión para las tres —Lo escucho y veo, más no lo creo, porque solo las tres ¿No piensas invitar a Caleb?—No quiero importunarlo o más bien no quiero que traiga a esa mujer de nuevo a mí casa, se que es de su familia señora Gardenia, pero no la tolero —Entiendo, no te preocupes, seremos las tres entonces, haré ni mejor salsa borracha y pollo al jerez y......—Señora Gar
La fiesta de tres se armo sin mucho alarde, sabia que Marcela y su hijo no podian venir, Dulce alegraba a la bebe que salio tan fria como su padre, mientras Gardenia se divertia tomando foto y haciendo videos de todo lo que la nena hacia, Caleb no se perdio ni un solo momento de la celebracion, paso la tarde mirandolas por las camarasDulce lucia algo cansada y triste, el sabia la razon y no podia hacer nada, faltaba poco para que todo acabe y no era momento para sentimentalismos, se odio mil veces, pero mas odio de donde provenia, su hija y su esposa no estarian en esta posicion, las amaba y no podia ponerlas en peligro —¿Que lo tiene tan pensativo señor Caleb?—Lo mismo de siempre Linda, nada nuevo en que pensar—Si usted me lo permite puedo ayudarlo a quitarse un poco el estres —Claro ¿Sabes jugar golf, tennis o basquet? —No señor, lo siento—Esta bien ¿Sabes jugar ajedrez, domino o manjok?—No señor, tampoco puedo ayudarlo con esos juegos, pense ayudarlo de una manera diferent
Una ducha caliente bajo la tensión de su cuerpo, pero el dolor en su pecho nada podía quitarla, lloro amargamente con una copa de vino en su mano un cigarrillo en la otra y musica triste que reprodujo de su teléfono, este día estaba destinado a ser feliz y solo resultó un desastre emocional para Dulce, sin imaginar que el hombre que causaba su sufrimiento estaba viendola del otro lado del mundo, Caleb lloraba mientras Dulce lloraba tapándose la boca para no ser escuchado, se le oprimía el pecho verla así, ¡maldita sea está situación! que lo mantiene alejado de ella, dos personas en distintas partes del mundo, compartían el mismo dolor al no poder estar juntas —Cada día estás peor pudin —!Dulce! ¡Dulce! Buen día señora Gardenia, algún día usted lo recordara —Ya te dije que para dar diabetes cualquier golosina es buena —Como usted diga ¿se levantó Scarlett? —Si, ya comió, se cago la limpié y volvió a dormir Dulce estaba resignada a este punto, no había nadie mejor que l