En la mansión Topaz...

Naomi estaba sentada en el estudio con una chaqueta sobre el hombro. Solo tenía una lámpara encendida. La lámpara proyectaba un halo de luz a su alrededor y dándole una belleza etérea.

Ella estaba trabajando en su diseño sobre un pedazo de papel. El cielo seguía oscuro mientras una fuerte lluvia azotaba las ventanas. El sonido era fuerte, pero no parecía afectarla.

En ese momento, sonó el teléfono del piso de abajo y Naomi volvió en sí. Dejó el bolígrafo y salió del estudio. Encendió la luz del pasillo y bajó las escaleras.

No sabía quién llamaría a estas horas de la noche, pero tenía la sensación de que era su padre.

Cuando llegó al teléfono, contestó con una sonrisa en su rostro: "Papá...".

Sin embargo, la persona del otro lado dijo algo, y su sonrisa se congeló.

En el hospital…

Cuando Naomi y su cuidadora, la Señora Irving, llegaron, había dos personas afuera de la sala de emergencias. Cuando la Señora Irving vio el rostro de la mujer entre las dos p