Alicia.
No sé en qué momento me quedé dormida pero un fuerte grito me despierta, creo que es una discusióno, debo de regresar a mi casa, me levanto y volteo a todos lados, creo que estoy perdida.
*Liz alguna idea.
*Camina hacia la izquierda.
Hago lo que Liz me dice sigo caminando a la izquierda y sigo escuchando las voces, llegó a un claro y miro al muchacho Víctor y a otra persona, salgo al claro tal vez ellos me puedan ayudar, ahuque estan discutiendo, uno de ellos me mira y me muestra los dientes.
-Has traído a un humano, eres un maldito traidor, nos está escuchando.
Víctor voltea y su cara es de puro panico, pierde el color en el rostro yo me quedo inmóvil.
-Bueno si tú no te encargas de ella Víctor lo haré yo.
El otro sujeto empieza a caminar hacia mí y de pronto miro como su cuerpo cambia y se hace un gran lobo café, ¡qué carajos está pasando! siento como todo mi cuerpo tiembla y escucho la voz de Liz en mi cabeza, me grita fuertemente.
*Alicia corre.
Simple y sencillamente hago caso, mi cuerpo reacciona por puro miedo empiezo a caminar hacia atrás, miro como Víctor también se transforma y ataca al otro lobo café, esto es demasiado para mí no sé qué hacer.
*Alicia muévete ya, sal de aquí, es demasiado peligroso para nosotras.
Dejo que mi instinto tome el control, doy la vuelta y empiezo a correr, voy lo más rápido que puedo pero me tropiezo y caigo intento levantarme pero al apoyar un pie, doy un grito de dolor, volteo y miro que está rojo creo que me he lastimado el tobillo alzó la mirada y veo el gran lobo negro correr hacia mí, me intento levantar y siento su pezón en la espalda, al caer al suelo me golpeó la cabeza, me siento mareada y veo todo negro.
Victor.
La discusión con Rafael sigue aumentando de tono, en cualquier momento vamos a perder la postura y nos vamos a atacar, el mira por detrás de mí y grita que hay un humano aquí, volteo y siento como el pulso se me detienen es Alicia.
Rafael se mueve demasiado rápido se transforma y corre hacia ella, no voy a permitir que le haga daño dejo que Jacob toma el control me trasformó y atacó a Rafael, lo derribó y lo dominó después de un par de mordidas lo azotó contra un árbol, gruño he intento mirar lo más intimidante que puedo.
*Yo me encargaré de ella, tú lárgate de aquí.
Doy la vuelta al escuchar que Alicia pega un quejido, me acerco hacia ella corriendo, intenta pararse y vuelve a caer, Jacob es demasiado brusco y la de arriba, se deja de mover creo que está inconsciente, vuelvo a tomar mi forma humana y la toma en mis brazos, tiene sangre en su cabeza.
-Alicia despierta.
La muevo un poco siento la presencia de alguien más volteo y es Rafael sigue aquí se acerca a nosotros, pegó a Alicia a mi cuerpo.
-No te atrevas a dar un paso más Rafael, no dejaré que le hagas nada a mi luna.
Al decir eso se detiene da un bufido de frustración, se da la vuelta y se va, yo tomo Alicia entre mis brazos y la llevó a la casa de la manada, al llegar no me importa que me vean desnudo, no es la primera vez que pasa, doy ordenes por el enlace mental de la manada.
*Necesito un médico en mi habitación lo más antes posible.
Subo a mi cuarto y la depósito en la cama, busco unos chores y me los colocó, no quiero que despierte y me ve así, quitó el gorro que trae puesto y puedo ver su cabello es bastante corto y ahí sangre saliendo de su frente, escucha como tocan la puerta.
-¿Quién es?
-Es el doctor hermanito.
-Adelante.
Entra el médico y detrás de él viene mi hermana Lisa es demasiado curiosa ya que sigues siendo un cachorro, se acerca a la cama junto con el doctor intenta acercarse y le gruñó.
-Disculpe Alfa pero si no me acerco no puedo curarla.
Suspiro y asiento con la cabeza se acerca y empieza a examinarla, cura la herida de su frente y mi hermana se acerca.
-¿Qué pasó?
-Rafael decidí reunirme con el para hablar pero se salió de control, no sé como Alicia llegó al bosque, no persibi su aroma, fui descuidado y la puse en peligro.
Miro como el médico la cura, Lisa toca mi brazo y me sonrei,
-Descuida hermanito estará bien, es muy bonita a pesar de que lleva tanta ropa puesta parece un chico.
-Lo sé.
El médico se incorporó de la cama puedo ver el pequeño parche que tiene Alicia en la frente.
-¿Cómo está doctor?
-Solo un golpe en la cabeza creo que perdió el conocimiento y ahorita solo está dormida tenemos que esperar que despierte en la mañana para saber si hay un daño neuronal o alguna otra herida que no podamos ver.
-Entiendo gracias.
-Cuando usted quiera Alfa, si necesita de mí solo llámame, con su permiso me retiro.
Miro a Lisa demasiado cerca de Alicia.
-Lisa aléjate de ella.
-Victor no seas tan celoso solo tengo curiosidad de ver a mi cuñada.
-La vas a despertar.
-Está bien me iré te dejaré solo con tu luna, no te vayas aprovechar de ella eh.
Doy un suspiro y niego con la cabeza, después de que Lisa se va me acerco a Alicia me recuesto cerca de ella y miro su rostro calmado, esto es estar en el cielo.
Alicia. Me remuevo entre mis cobijas están muy calientitas, esta mañana tengo frío y me duele la cabeza, tuve un sueño muy extraño sobre hombres lobo y lo más raro que en el sueño estaba Víctor. *Que extraño tuvimos un sueño húmedo con un hombre. Ese comentario de Liz me da gracia. *Alicia levántate tienes cosas que aser. *Es demasiado temprano, permite dormir. *O vamos Alicia levántate a poco no te has dado cuenta que no estás en tu cama linda. *¡Que! Al escuchar eso abro mis ojos y efectivamente no es mi cuarto, estoy en una cama enorme y todo a mi alrededor es muy sofisticado, hay dos ventanales, 2 puertas a la izquierda, a la derecha de la cama un tocador y un par de sillones. -Pero qué carajos. *Liz por favor dime que solo fue un sueño. *Lamento decírtelo pero no fue un sueño, todo fue verdad. *No no no no esto no ya estoy totalmente loca y esto no está pasando. Estoy empezan
Alicia. Estoy sentada en un sillón de esta gran casa y está un médico examinandome el tobillo. -Te duele esto. Me toca el tobillo y pego un fuerte grito. -Creo que sí. Escucho como Víctor le grita. -Tenga cuidado no la lastimé más. -Lo siento Alfa. Porque lo siguen llamando Alfa según yo eso es un código binario o algo así, será su sobrenombre. -Al parecer jovencita te has torcido el tobillo y por tu pequeña caída empeoró un poco te pondré un vendaje y te daré algo para el dolor. Asiento con la cabeza, no me gusta hablar con extraños, puedo escuchar como más gente llega a la sala, una chica como de mi edad acompañada de un señor y una señora que me miran y sonríen, el hombre le hace una seña a Víctor y él se acerca, he intento concentrarme en su plática. -Qué vas a hacer con ella. -No lo sé padre, ya me miró transformarme. -Entonces no la puedes dejar ir con vida. -Padre n
Alicia. No he tenido el valor de enfrentar a Vanessa y decirle lo que mire de ella engañándome, Liz no ha vuelto hablar conmigo creo que sigue muy enojada o a la mejor por fin ya se fue de mi mente, mi tobillo ha sanado por completo. Ya es muy noche y escucho ruidos en la parte de abajo de la tienda me levanto y bajo con miedo de que alguien se haya metido al encender la luz miro Vanessa con una maleta y está tomando el dinero de la caja registradora. -¿Vanessa qué estás haciendo? Ella me mira y pone una cara de tristesa. -Hay Alicia esperaba que no te despertarás, no quería que vieras esto. -Pero Vanesa ocupas dinero te lo puedo dar. -No es eso verás, es que debo de. Escucho la puerta de la tienda abrirse y entra Valentino. -Ya tienes todo listo Vanessa tenemos que irnos. Miro a Vanessa y ella se voltea a otro lado. -¿Que adónde vas Vane. -Hay Alicia solo tenías que averiguarlo tú despué
Alicia. Los rayos del sol me pegan en el rostro, me remuevo entre las cobijas. *Si no supiera que es crudo diría que me estoy muriendo. *Anoche vaya que se te pasó la mano. *Ya volviste creí que te habías ido a fastidiar a alguien más. *Eso quisiera pero estoy atrapada en tu mente. *Liz ¿cómo llegamos aquí? *No tengo idea estaba igual de intoxicada que tú. Me siento en la cama, intento pararme cuando un sabor amargo sube a mi boca salgo corriendo al baño y empieza a vomitar. -Esto es lo peor de la borrachera. Escucho la puerta del cuarto abrirse, me levanto y jalo la palanca me enjuagó la boca y me dirijo a la puerta con ilusión. -Vanessa. Miro a Víctor parado en la puerta. -Eh, qué haces en mi..... Me detengo y siento otra vez la necesidad de vomitar entró de nuevo al baño y sigo vomitando, él se acerque y me sostiene para que no me caigan en el inodoro. -Alicia n
Alicia. Bajo junto con Víctor a ver cómo quedó la tienda, está todo patas arriba, suspiro de cansancio. No puedo creer que esto lo haya hecho yo. -Bueno Alicia este es mi número. Me extiende un pedazo de papel y lo tomo. -Si necesitas algo lo que sea solo llámame por favor, si quieres hablar o tienes algun problema. Le doy una de mis mejores sonrisas falsas que tengo. -Gracias Víctor. Después de que se va empiezo a recoger todo, creo que Victor intentó levantar un poco mi desastre anoche. *Es un buen chico Alicia deberías de darle una oportunidad. *Liz me gustan las mujeres. *No, nunca le has dado la oportunidad a un hombre. Me quedo callada y aprieto mis manos para contestarle enojada. *Liz tú sabes el motivo. *Lo siento Alicia no quería hacer que recordarás eso. *Liz cállate por favor. Doblo todas las camisetas, levanto los percheros y voy detrás del mostra
Alicia. El bartender voltea y me fulmina con la mirada yo le pongo una sonrisa incomoda. - Alicia no sé cuánto dinero le habrás dado al portero pero sal de aquí, eres menor de edad y no te puedo servir alcohol. Me inclino sobre la barra y hago la mejor carita de perro regañado qué puedo. -Vamos Hugo no quiero alcohol solo quiero hablar, no sé si te has enterado de que Vanesa se fue. Bajo la mirada y miro mis manos en el mostrador el dan un suspiro. -Alicia sé que se fue, cómo estás. -Cómo me miró. -La verdad te miras de la chingada. -Pues me siento peor. Se frotar la nuca y se saca unas llaves de su chaleco. -Ten. -Qué es esto. -Son las llaves de mi apartamento, sal por la parte de atrás sube por las escaleras y espérame, ahí podremos hablar en un momento empezar mi hora de descanso. -Gracias. Las tomo y bajo de la silla me dirijo a la salida, en el callejón veo la
Victor. Los días han pasado y no he podido ir a ver a mi luna, tenemos demasiados problemas con Rafael, eso de ser un Alfa ya maduro y estar sin una luna es demasiado peligroso para nosotros nuestro lobo empieza a tomar el control más seguido y se hacen salvajes, nuestra luna es como un equilibrio no solo para nosotros sino para la manada, espero que la mía un día me acepte, no me quiero convertirme en un peligro para la manada y además quiero estar cerca de Alicia su aroma y su tacto me trae una gran paz y tranquilidad. Estoy en la oficina viendo por la ventana la luna *Alfa. Escucho por el enlace mental que me llaman. *Si. *La señorita Alicia ha salido. *A dónde fue. * A un bar. *Está bebiendo. *No señor está saliendo por la parte trasera del bar. *Vigila la y mantenme informado si algo raro pasa. *Si Alfa. Después de eso no escucho nada hasta que me vuelven a llamar.
Victor. Después de oír a Alicia conduzco de nuevo a la mansión de la manada, al llegar me voy a mi habitación y mira por las ventanas veo el bosque. Cómo puede ser posible que los padres de Alicia la hayan echado de casa solo por ser diferente, nunca he comprendido bien a los humanos son demasiado extraños, siempre con problemas se complican demasiado. No saben que la vida es corta y hay que disfrutarla, es como una obra de teatro tarde o temprano se cerrará el telón así que hay que bailar, cantar y vivir intensamente para cuando el telón se cierre ahiga una ovación de pie ante ti. *Hay qué romántico y cursi te estás poniendo Víctor. *Jacob y tú siempre tan salvaje y brusco. *Claro soy un lobo que esperabas. *Buen punto. Oye Jacob alguna idea para conquistar a nuestra luna. *Cuáles son sus gustos. *No sé muy bien. Creo que le gustan las cosas dulces y el arte. *Das vergüenza. *Los asuntos con Raf