MAXIMUS (ENZO). Ella me mira y siento el dolor de Asly; el brillo de sus ojos se apaga. — Te amo— susurro con voz entrecortada, mis ojos se llenan de lagrimas mientras la abrazo con fuerza.De repente, escupe sangre. — Lucharás por... Aurora — pronuncia esas palabras antes de cerrar los ojos y dejar caer sus manos inerte a su lado.Mi corazón se rompe. Desesperado, le imploro a la diosa luna, que no me la arrevate, que me lleve en su lugar, cambie mi vida por la suya. Ella es joven y merece tener un futuro lleno de alegria.— por favor, diosa luna, te lo ruego, no quiero vivir sin ella— suplico en voz baja.Aferrandome a su cuerpo sin vida, siento miedo de enfrentar mi vida sin ella. — Mírame, abre tus ojos, te lo pido— grito y toco su mejilla que está fría. La opresión en mi pecho se intencifica con cada latido doloroso.En medio de mi desesperación, Eitan se arrodilla a nuestro lado e intenta separarla de mis brazos. — Ana bebé— pronuncia y el lo intenta de nuevo, pero yo me res
Los días siguientes fueron lo mismo, solo podía sentir dolor en mi alma, mi luna ya no estaba a mi lado. Me costaba dormir, el agotamiento, no permitía salir de mi cama. ¿Cómo puedo olvidarme de ella? Esto me impide vivir. Este día era igual a los anteriores, nada más permanecía en mi cama mirando el techo y en la noche mirando como la luz de la luna se filtra atravesamos de las cortinas color azul. Las voces y gruñidos se escuchan en mi puerta, nada más giré mi cuerpo en la cama para mirar la puerta corrediza que dan al balcón. — Enzo abre la puerta.— se escucha la voz de mi padre. — No vete, quiero estar solo.— demando. — Habré la Maldita puerta o la tiraré.— gruñe mi madre. — Por favor, no puedes seguir así, Aurora te necesita.— susurra mi padre. ¡Joder! Mi pequeña, bichito, me necesita, agudizó mi oído y escucho su llanto, eso me parte el corazón o lo queda de él, cierro mis ojos y cada recuerdo de ella llega como un tornado. — Abre.— llora Melisa. Mi padre al no recibir
Hola queridos lectores, aquí llegamos al fin del primer libro, espero que el libro les haya gustado tanto como a mi. También espara informales que en algunos días estaré subiendo el segundo libro, donde se hablara de segundas oportunidades, por eso no subiré epílogo. Gracias a Dios, a mi familia y a ustedes que estuvieron dándome ánimos para seguir escribiendo. En este libro aprendí a amar y a odiar a la misma persona. Dedicado a todos aquellos que creyeron en mi y sobretodo a mi Ana que nos deja un gran vacío en nuestros corazones. Los quiere su autor:Xiomara L.C
ANAHola, soy Ana, la menor de 15 hermanas. Mi vida se puede resumir que soy una mujer loba, El nombre de mi manada es luna azul. Soy la futura alfa, pues mis hermanas no quisieron hacerse cargo, aunque soy la más joven. Tengo el pelo rojo y los ojos azules. Mi padre dijo que en nuestra familia todos los miembros que son alfa supremo son de ojos de color azul, al igual que mi padre y mis 14 hermanas y sus hijos tienen los ojos azules incluyéndome a mí. Estoy con mi padre, el alfa Eitan, reunidos con las demás manadas, por el hecho de que llego una carta del alfa milenario, así que nos reuniremos con los alfas de las manadas, pues su hijo tomara el cargo.Al finalizar la reunión, fui a la casa principal con mi padre. Por cierto, mi padre no convive con nosotras en la misma casa, por el hecho de que mi padre dice que no puede manejar demasiadas hormonas, aunque mi padre y mi madre se aman demasiado, pues lo demuestran en todo tiempo. — ¿Por qué aparecieron?— dije mirando a mi padre
EnzoHola, soy Enzo cumplo cinco mil años en cinco días, seré el alfa real milenario, buscando a mi pareja hace dos mil años, soy hijo único. Porque Erik y Sofía le pidieron un hijo a la diosa luna y eso les dio un único hijo.Soy alto mido 1.90, mis ojos son verde, como mi padre, mi lobo es negro.Aquí estamos desnudos el despacho de mi padre con Izan mi beta y Joel mi delta.—Esto no puede seguir así —dice mi padre con vos de alfa milenario-—ustedes son los que se encargaran de la manada milenaria, tú— exige mi padre y me señala—te estás equivocando, no estás escuchando lo que dice tu delta— dice en voz baja y deja caer cabeza entre sus manos, dice en voz baja—que será de mi manada en manos de estos inconscientes.—Joel, si tu alfa no te escucha no hay equilibrio entre ustedes.—El alfa es poder, liderazgo — hace una pausa.—El beta es la mano derecha y toma el riesgo de seguir a su alfa.—Y tu el delta, es el que escucha y son capaces de hacer acuerdos, donde unos respetan a otro
Ana— Estoy aquí para llevarlos a la manada del rey milenario. Por favor, formen grupos de veinte. Cada bruja se encargará de trasladarlos a través del portal— Al pasar el portal, llegamos a un hermoso castillo donde el beta Gael nos vuelve a agrupar y nos da una regla.— Por respeto a la familia real milenaria, nadie puede utilizar su audición lobuna — todos comienzan a hablar en voz baja. Un carraspeo nos hace prestar atención de nuevo.— Ni siquiera el príncipe tiene permitido usarla. Además, el alfa milenario, los guardias y yo los protegeremos— nos hace señas para que lo sigamos.— Padre— tomo su mano.— Adelante— nos señala el beta Gael. Al pasar las puertas, entramos a una sala hermosa. Las paredes son de color crema y los muebles son negros, azul oscuro y gris.— Bienvenidos alfas y familias — nos saluda una mujer hermosa de ojos grises y piel blanca. Parece tener unos 26 años.— Luna— el beta Gael hace una reverencia y todos lo seguimos.— Nada de Luna, me llamo Sofía — nos so
EnzoSalgo de mi habitación y de repente percibo un delicioso aroma a fresas. Maslo se inquieta y exclama emocionado: — Mate — Sigo el aroma y veo a una loba de cabello rojo y pecas en la cara. Me acerco lentamente y chocamos, cayendo de espaldas con ella encima de mí.— Mía— dice Maslo intentando tomar el control, mientras la observo con sus hermosas pecas.— Tuya— responde ella separándose un poco, pero acercándose más a mí. — Mmm... ¿me puedes soltar?— — Tenemos que levantarnos, estamos en medio del pasillo— dice un poco apenada. No quiero que se aleje, así que me levanto, le doy la mano y la llevo a mi habitación. La jalo hacia mí y la llevo hasta mi cama. Sostengo su cintura, acerco mi rostro a su cuello y le doy pequeños besos que despiertan la pasión en mi cuerpo.— Mía— murmuro mientras la muerdo un poco. Ella suspira e intenta alejarse, pero la estrecho más contra mi cuerpo.* Nuestra* dice Maslo. Me acomodo en la cama con ella en mis piernas, rozando nuestras partes íntimas
Ana— Sí, así es, Alfa. Mis hermanas son mayores, pero ninguna quiso el puesto de Alfa— él mira y sonríe.— Bienvenida a la familia, algo más no se puede hacer público— dice.— Por qué padre, es la futura Luna Milenaria— dice Enzo enojado.— Es por su bien — dice el Alfa Erick mientras me mira. Yo asiento con la cabeza.— Sofía, llévala a nuestra recámara, ya sabes qué hacer — Sofía me toma de la mano y salimos de la habitación de Enzo. Me guía por otro pasillo largo y al final encontramos unas puertas. Ella las abre. Es una habitación hermosa con una cama doble cubierta por un manto.— Ana— me suelta de la mano y me hace señas para que me siente en un sofá blanco. Me siento y ella va hacia una puerta blanca que resulta ser un vestidor. Busca y saca un hermoso vestido azul.— Toma una ducha, la necesitas — me pongo roja y recuerdo lo que pasó con Enzo, y sonrío.— Es normal si su lazo los atrae— dice restándole importancia.— Nunca he estado de esta forma con nadie— digo con vergüenza.