MauricioEse hombre que encontraron en los maizales es el mismo tipo que intento abusar de Gabriela la misma noche del asesinato de sus padres. Por un lado esto ha servido para despejar las dudas que ella tiene acerca de mi tío Demetrio, ya que prácticamente lo estaba culpando de todo lo malo, por el simple hecho de tener los ojos parecidos, cuando en realidad el verdadero culpable no se encuentra entre nosotros, pero eso no es lo importante. Ahora la preocupación está en torno hacia la tía Rosiris, quien no la pasara nada bien ya que ella es la autora oficial de la muerte de esa persona, aunque haya sido en defensa hacia su sobrina.Si este caso lo llegara a tomar la policía, se iniciaría una investigación donde quedaríamos involucrados todos los que rodeamos a Gabriela. Eso con el fin de esclarecer porque Domino esta tan obsesionado con ella y porque ha cometido tantas barbaridades.— ¿Cómo era físicamente ese hombre padre? — Pregunta secando las lágrimas de su rostro.El padre Beli
GabrielaSus besos me llevan a ese universo, donde puedo contar las estrellas, ver las galaxias y los luceros en un abrir y cerrar de ojos. Mi Iron Man es el hombre más amoroso del mundo, me tiene encantada con el brillo de sus ojos y esa manera de mirarme, desarma cada centímetro de mi piel que esta noche lo desea más que nunca.Cerramos la puerta de esta habitación y en medio de nuestros besos, bajo mis manos hasta su cintura para agarrar el suéter que lleva puesto, subiéndoselo por todo su pecho hasta quitárselo y volver a sus labios con mucha ansiedad. El me aprieta contra su cuerpo para ir caminando lentamente con dirección a la cama, sin pausar besos y abrazos pero lo detengo.—No me digas que cambiaste de parecer después de elevarme —Cuestiona mirándome fijamente y niego.—Nunca te haría eso. Solo que quisiera experimentar algo que ha pasado por mi mente desde hace unos días —Le explico mordiendo mi labio inferior, para luego sujetarlo de su mano y traerlo a la silla que está,
MauricioRegresar a la ciudad de Miami sin ninguna pista era algo que Gabriela y yo no nos esperábamos, por lo menos queríamos encontrar algo que nos guiara o que por lo menos se acercara a dar con el paradero de Domino, pero por lo visto el hombre es más ágil de lo que pensamos. A sabido hacer las cosas también, que no existe alguien que conozca su rostro, y la única persona que alcanzo a verlo hoy no se encuentra con nosotros.Afortunadamente Alberto está haciendo investigaciones por su cuenta, esta mañana cuando hablamos por teléfono y le conté todo lo que el padre Belisario nos dijo, lo note un poco extraño y esta de lógica, quisimos hacer un viaje por nuestra propia cuenta sin pensar en todos los peligros que eso podría ocasionar. Sin embargo me recomendó que nos regresáramos ya mismo, tal parece que ha encontrado algo que no es nada agradable. Pero eso no es lo peor mi familia se enteró de los acontecimientos y el tío Demetrio quiere contratar guardaespaldas para que anden detrá
GabrielaQue me ha pasado exactamente no lo sé, pero mi cuerpo en estos momentos me está jugando una mala pasada. Es como si un virus de esos que afectan el sistema inmunológico, hubiera entrado a mi organismo para bajarme todas las defensas de un solo golpe dejándome completamente sin fuerzas. Intento despertarme debido al fuerte olor alcohol que se encuentra en mi nariz abriendo los ojos muy despacio.Quito con mis manos el algodón mientras escucho la voz de Carla diciendo que ya desperté — ¿Qué me paso? —Pregunto en medio de esta confusión que tiene mi cabeza, como es posible que por segunda vez no recuerde como pase de la sala a la cama en este mismo apartamento, ni que tuviera amnesia.—Te desmayaste —Responde Mauricio estando de pie a un lado de la cama para luego acomodarse cerca de mí, colocando mi cabeza en su hombro izquierdo.—Desmayarme —Cuestiono confundida sin entender porque me ha ocurrido todo esto.—Debimos almorzar antes de emprender el viaje de regreso a la ciudad…
MauricioRegresar al centro de salud Buenos Aires después de un fin de semana bastante ajetreado se me hace difícil. Sobre todo después de las amenazas que continúan llegando por el correo electrónico de Gabriela, tal parece que Domino no quiere darse por vencido y por eso intenta intimidarla a costa de lo que sea. Mi padre me ha aconsejado que acepte los guarda espaldas que el tío Demetrio propuso, pero yo no lo considero conveniente eso daría muchas sospechas y la prensa se empezaría a preguntar porque el hijo de Marcos Lescuyer anda con guardaespaldas hasta en la sopa.Afortunadamente hoy es Martes y Gabriela no tiene que asistir al centro de salud, lo que más quiero es que se pasen estas dos semanas rápido, para por fin entregarle la de alta y el próximo mes casarnos por medio de una ceremonia familiar. Ahora lo único que me preocupa es su estado de salud, anoche se levantó dos veces al baño y por el sonido que escuche estoy casi seguro de que estaba vomitando aunque ella me lo ha
GabrielaQue dolor —Hablo bajito levantando mi cabeza de esta mesa, estirando mi cuerpo ya que me quede dormida después de la hora del almuerzo y lo más probable es que me haya dado una torticolis debido a la mala posición.Recojo el plato he inmediatamente me levanto, para llevarlo a la cocina y en la menor brevedad posible secarlo, para luego guardarlo —Porque tendré tanto sueño —Me hablo a mí misma saliendo de la cocina con dirección a la recamara para continuar durmiendo pero tal parece que no se va a poder, porque en ese mismo instante tocan el timbre de la puerta, cosa que me parece bastante extraña ya que Mauricio dio órdenes explicitas de que nadie podía subir, al menos de que alguien de este apartamento lo autorizara y hasta el momento ese teléfono no ha sonado.Con mucho cuidado me acerco a la puerta asomándome por el agujero de esta para ver quién es el que toca y el alma me regresa al cuerpo, porque se trata de la señora Roxana con Camila.—Buenas tardes Gaby, como estas —
MauricioTernarla en mis brazos es lo único que anhelo mientras veo que se aproxima la hora de mi salida. Camino de un lado para otro en este pequeño consultorio, intentando que se pase la media hora que hace falta, para salir corriendo hacia mi apartamento. La he llamado durante los pequeños momentos que he tenido de receso y no me ha contestado el celular, no me quiero ni imaginar que algo malo le haya sucedido o que continúe con esos malestares que le sentí en la madrugada.«Mauricio cálmate» me habla mi subconsciente he intento relajarme volviendo a la silla de mi escritorio para terminar de organizar todo el historial clínico, que he tenido en este día. Coloco una carpeta de tras de la otra, hasta hacer el paquete completo guardándolo en la gaveta número 3, donde particular mente suelo meter a las pacientes nuevas. Luego me levanto de la silla quitándome la bata para colocarla en el perchero, pero recuerdo que Gabriela me dijo que le llevara todas las batas que tengo en el consu
GabrielaLa compañía que tuve en la tarde de hoy, fue tan agradable la señora Roxana con Camila hicieron que olvidara por unas horas lo que está ocurriendo en mi vida. Me hicieron sentir también como si me conocieran desde siempre, dándome sus consejos y de cómo llevar un buen matrimonio. Pero entre tantas palabras se metió la conversación de los preparativos de la boda y no me quedo más de otra que decirles, que hasta el momento no habíamos organizado nada, pero que teníamos pensado hacer algo familiar y con nuestros amigos más allegados, ya que no consideramos prudente hacer una boda por todo lo alto donde esté incluida la prensa, por cuestiones de seguridad.Sin embargo se brindaron para ayudarme con todos los preparativos de los novios, incluyendo los zapatos, vestidos y accesorios. Prácticamente no las pasamos dialogando el color de la boda, la comida y los diseños de las tarjetas, tanto así que Camila llamo a una casa de eventos para que le enviaran por vía whatsapp los salones