Capitulo 2

Para mi familia, el deber es más importante incluso que la misma familia, yo llegue de Italia hace un año, aunque las personas creen que llegamos hace nada mas dos meses, es lo que mi padre quiere que crean, vinimos huyendo de las autoridades, porque hay muchos de ellos que quieren atrapar a Iván Santori. Un tipo espeluznante, y peligroso, al que yo mismo le temo a pesar de ser su hijo. Hasta ahora, me he, mantenido alejado de los deberes de la familia, pero eso se terminó, se me ha asignado mi primera tarea, que es acercarme a la niña nerd de la escuela y averiguar como adueñarme de ka empresa de sus padres, llevo dos meses ignorándola y ahora me piden esto, es bastante complicado para mí.  Pero ya me acerque a ella en ka mañana, y me invente una fiesta para atraerla hasta mí y como todo el cordero que es. Aquí esta, vestida que tal parece que va a una excursión y no a una fiesta.

 - ¿qué miras con tanta atención? - le pregunté parándome a su lado

  - lo ostentosa que es tu casa - respondió para mi sorpresa, normalmente las chicas se quedan en silencio cuando hablo

  - no creo que la tuya sea menos, de hecho creo que la de todos en esa escuela debe ser así - hice un gesto con la mano que abarcaba toda la casa

  - te sorprendería, no vivo en una casa pequeña, pero tampoco es tan grande como la tuya - me miro fijo, por primera vez repare en que sus ojos son verdes, pero de un verde tan claro que impresiona, tarde un instante en salir del letargo que me provocaron sus ojos.

 - ¿de qué quieres hablar conmigo?

  - esa amiga tuya no se guarda nada para ella - le pedí expresamente que no le dijera nada

  - no la culpes, no quería venir así que me lo dijo para que viniera - este trabajo va a ser sencillo, si vino solamente a escuchar lo que le quiero decir. Es que le gusto bastante.

 - así que te interesa lo que tengo que decir!

  - claro que me interesa, si te tomaste el tiempo de invitarme a una fiesta. Cosa que nadie hace, debe ser muy importante lo que me quieres decir - sonreí, ella se me quedo mirando fijo, es una niña tonta y transparente, sé que le gusto mucho

  - no entiendo por qué no te invitan a las fiestas

  - antes lo hacían, pero se dieron cuenta de que soy una persona aburrida, así que ahora todos me ignoran - explico ella con mucha naturalidad. 

  - yo no creo que seas una persona aburrida, ni voy a permitir que nadie te ignore - su mirada viajo de mí hacia la piscina donde estaban algunos de los chicos de la escuela

  - hasta esta mañana tú también me ignorabas Luca, solamente que ahora quieres algo de mí - sigue sorprendiéndome, aunque vino hasta aquí, simplemente para escucharme, no ha perdido el foco

  - tienes razón, y lo siento por eso Melina. Pero lo voy a arreglar, puedo jurarte que no va a suceder más. 

  - ¿hasta cuando? - pregunto regresando su vista a mí, no entendí a lo que se refería -¿hasta qué ya no me necesites y me regreses a mi esquina? - negué y me volví a reír

  - te prometo que no será así - no tengo intenciones de cumplir esa promesa, pero ella no es capaz de saberlo - he visto cosas en ti, que me van a impedir hacerlo - me acerque más, es momento de hacer mi jugada, ella se quedó paralizada. Acerque mi cara a la suya.

 - ¿puedo besarte? - le pregunte, ella no decía nada, pero tampoco se alejaba así que lo tome como una respuesta afirmativa. La besé, y me sorprendió como me gusto el sabor de su boca, no me esperaba sentir las intensas corrientes que emanaron de su cuerpo, ni que de repente no quisiera soltarla, lo único que me hizo hacerlo fue los chiflidos de todos los niños ricos que estaban en mi casa, me tomo un momento centrarme en lo que estaba pasando. Me aparté de ella, llevo sus dedos hasta su boca y acaricio sus labios, ese gesto tan simple me dio deseos de besarla de nuevo.

 - creo Qué debo irme - me dijo ella, yo aún estoy confuso así que no sé que decir

  - déjame llevarte - conseguí decir al fin 

  - estás desesperado por qué me vaya - dijo, yo negué. Pero la verdad en este momento si lo estoy, no pensé sentirme como lo hice cuando la bese. He besado a muchas mujeres, pero besarla a ella es diferente. Tiene algo así como una energía especial, o no sé si será que es tan inexperta que me hace sentirme extraño

  - no quiero que te vayas, acabas de llegar. Pero veo que te sientes incómoda - me excuse

  - en algo tienes razón, me siento incómoda con tanta gente a mi alrededor. 

  - lo siento por besarte, no debí hacerlo - me disculpé y fue lo más genuino que dije en toda la noche, hay algo que me hace sentir que esto es un error

  - no tienes que disculparte, aunque entiendo que te tienes que sentir arrepentido, ahora todos te vieron besando a la nerd - me reí

  - no me siento arrepentido - y en contra de mis propios intereses, la volví a besar para que viera que no estaba arrepentido. A diferencia de lo que creí en un principio, la sensación que sentí en el primer beso no disminuyo, volví a sentir exactamente lo mismo que la primera vez.

 - wao, es obvio que no lo estas - dijo cuando me aleje de ella - estás siendo bastante efusivo al respecto - sí, es que no quiero que te queden dudas de ello, soy una persona muy decidida - volvió a acariciar su labio y yo desvíe mi vista - ¿te llevo? - volví a preguntar, pero ella negó

  - eres el anfitrión, no puedes irte y dejar a tus invitados - mire a nuestro alrededor

  - no creo que nadie note mi ausencia - le dije

  - no importa, puedes estar tranquilo, yo tomo un taxi

  - ok - le dije y arrebate el teléfono de su mano, guarde mi número en sus contactos - antes de subirte en el auto, hazle una foto a su matrícula, y al chofer. Me la envías en seguida - ella asintió, no creo que sea sumisa, sino que está muy sorprendida por mi exceso de interés. Me quedé parado mientras ella se iba, tome mi teléfono y llame a Lucio, mi amigo y también miembro de la familia.

 - sigue a la chica que acaba de salir - le pedí nada más que contestó, él es un amigo muy leal, pero también muy poco comunicativo, me colgó el teléfono sin ni siquiera responder, pero sé que va a hacer lo que le pedí. 

Deje a los chicos en la fiesta y subí a la oficina de mi padre, lo encontré sentado tras de su escritorio, con un vaso en la mano ojeando unos papeles.

 - vi a la chica Crawford en el jardín - así saludó

  - así es, voy a cumplir con lo que me pediste, así que recuerda también tu promesa.

 - yo no olvido mis promesas Luca, si me ayudas a conseguir la información que necesito para apoderarme de una parte de su empresa, te voy a dar la autonomía que quieres, y te ayudaré a averiguar quien mató a tu madre - que hipócrita de su parte prometer algo como eso. Pero cumpliría mi tarea con el simple propósito de ver que va a inventar.

Ya tengo a Melina Crawford en mi mano ahora a entrar en su casa y buscar lo que necesito para cumplir con mi tarea.