Cuando encontraron a esa mujer tirada en las afueras de la ciudad, con mucha sangre en su cuerpo, estos dos hombres tuvieron que llevársela, no iban a permitir que muriera así.
A pesar de ello, iban a implementar su plan, aunque tuviera que pasar mucho tiempo, pero todos sus esfuerzos estaban dando frutos. Ella iba a hacer su principal arma para destruir a los hombres lobos a través de mentiras y traiciones, y este juego estaba a punto de comenzar.
3 años después…
Cuando llegaron a Argentina, ella sabía que las cosas podrían cambiar, incluso junto al chico que estaba esperaba que le dijera que tuviera precaución en este sitio por el rumor de los hombres lobo en esta zona.
—Recuerda que vinimos a este lugar solo por negocios, igual espero que puedas mantener el perfil bajo—dijo el mientras Alba seguía mirando hacia el horizonte.
No estaba preocupada o ansiosa por nada más, cuando ni siquiera recordaba su pasado, ya que según Esteban la habían encontrado cuando estaba a punto de morir.
Esto le ocasionó una enfermedad tan grave que debía tomar sus píldoras a diario para evitar el dolor.
Al llegar a la parada, Alba quería recorrer la ciudad para conocerla un poco. Esteban quería que ella se quedara a su lado porque temía que volviera a encontrarse con las personas de su pasado.
—No te preocupes, en cambio, haz la reservación en el hotel—fueron las palabras de ella para despedirse de este hombre que cargaba con todas las maletas.
Alba, quería aprovechar este día para visitar un poco más la ciudad porque sabía que por la noche tenía que regresar junto a Esteban, quien es su novio desde hace unos meses.Ella se había dicho que tenía que darle una oportunidad en el amor, incluso si tenía una familia o alguien que la esperaba, jamás se preocuparon por buscarla ni mucho menos saber si estaba bien.
Esteban siempre estuvo ahí para ella, tanto en los buenos como malos momentos de su vida.
Poco a poco, fue descubriendo que la ciudad tenía muchos monumentos culturales, incluso buenos negocios de comida.
Alba caminó hacia uno, pero la gente de su alrededor estaba un poco impactada por el color de su cabello, era blanco, sin embargo, a pesar de que ella se lo pintaba a cada rato, siempre volvía a su color original.
No era porque tuviera baja autoestima, ya que su novio siempre le había dicho que era una belleza de otro mundo.
Cuando se sentó en un puesto de comida en medio de la calle, en el momento en que iba a pedir algo, ocurrió una fuerte discusión entre dos chicos que estaban peleándose.
Se levantó de la silla para ver lo que estaba ocurriendo, de pronto apareció otro hombre para detener la pelea, este la miró como si hubiera algo especial en ella.
Como si la conociera.
Alba no sabía quién podía ser, pero estaba segura de que se tenía que ir de allí cuanto antes porque lo menos que quería era llamar la atención de cualquier desconocido.
Cuando este hombre se metió en la discusión, lo había hecho para evitar más problemas, eran suficientes los que tenía encima.
Pero no imagino que la vería entre la multitud. Él la había reconocido, era su esposa, quien había sacrificado su vida para salvarlo de sus enemigos.
Luke hizo lo posible para detener la pelea, pero al final se cansó y fue tras ella.
No iba a perderla de nuevo.
Otra vez a su vida, volvieron las esperanzas de encontrar un motivo para seguir adelante.
Durante todo este tiempo no había podido superar su muerte, ni mucho menos encontrar el amor.
Cada año iba al lugar donde la vio por última vez para rendirle un homenaje a su pareja destinada.
Sin embargo, la ansiedad que sentía junto a la posibilidad de estar equivocado no le estaban ayudando en nada.
Alba no deseaba ser encontrada por ese hombre, ni mucho menos volver a experimentar ese sentimiento con él, porque comprendía que todo estaba muy mal.
Ahora que se daba cuenta de que fue una mala idea salir sola, pero había pasado tiempo encerrada en su viejo hogar, que ahora simplemente quería salir para saber cómo se sentía vivir en una ciudad tan grande.
Siguió caminando y trató de regular su respiración, pues estaba muy nerviosa en ese momento.
Ella miró por encima de su hombro y se sorprendió al ver al extraño hombre siguiéndola.
Entonces, se le ocurrió meterse en un centro comercial, pero antes de que hubiera cruzado la puerta, alguien la había agarrado con fuerza.
—¿Yue, eres tú?—le preguntó ansioso, necesitaba saber si era su esposa.
—Disculpa, creo que te confundiste, acabo de llegar a la ciudad… con mi novio—dijo ella, pero no podía evitar sentirse familiarizada con sus ojos. Eran hermosos y cautivadores.
Sin embargo, a pesar de que sentía una fuerte atracción por su cuerpo, también sentía que podría ser tan hermoso como letal.
Se alejó para continuar su camino, mientras que este hombre estaba muy nervioso.
Estaba seguro de que era su luna, la mujer que amaba, aunque al principio no sentía nada por ella, poco a poco se fue enamorando de ella.
Venían de mundos diferentes porque él era un hombre lobo alfa y su esposa era una simple humana corriente.
En aquel momento, la hermana de Luke se había opuesto a su matrimonio, haciéndole la vida imposible a esta mujer, ya que no la consideraba digna de su hermano.
No obstante, Luke no iba a ceder tan fácilmente, quería al menos tener una conversación con ella para comprender qué había sucedido en todo ese tiempo.
Aunque había asuntos esperándolo, que requerían su atención, no estaba dispuesto a perder esta segunda oportunidad.
Alba estaba muy nerviosa, incluso se sentía observada, aún no había asimilado cómo era que esa persona insistía tanto en creer que era su esposa muerta.
Día no podía negar que era atractivo, y tampoco pasar por alto los dos tatuajes que tenía en su brazo izquierdo, siendo uno de ellos una representación peculiar del infinito.
—¡Controla tus nervios, mantén la calma!—se dijo a ella misma mientras entraba a la feria de comida, su estómago había empezado a rugir.
Después de pagar y ordenar algo ligero, se sorprendió al encontrar el mismo hombre sentando al frente a ella.
¿Es una especie de acosador? ¡Oh santo Dios!
¿O quizás un asesino en serie de eso que salen en Discovery? ¡Demonios, eso te pasa por querer recorrer la ciudad!
Ella se quedó callada mientras comía, pero su mente no dejaba de hacerse todo tipo de suposiciones, al contrario de Luke, quien estudiaba todos sus movimientos, incluso sus gestos, le hacían recordar a la mujer que amaba.
—¿Sabías que es mala educación mirar a alguien así? —dijo Alba molesta.
—Lo lamento, pero no puedo dejar de observarte… eres igual a ella—respondió avergonzado.
En ese instante, Alba tomó una decisión, iba a responder a su duda de una vez por todas.
—Si tienes una foto de ella, me la puedes enseñar para que vea que no somos la misma persona.
Luke saco su móvil y abrió la sección de galería. Había una hermosa mujer de cabello blanco, le mostró la foto a Alba.
Ella misma se reconoció, estaba muy impactada al ver su reflejo; solo que el cabello era más largo.
Sin embargo, era imposible que todo esto fuera real.
Esteban le dijo que había tenido un accidente donde perdió a su familia, que había sido un milagro que ella sobreviviera.
Pero no tuvo otra alternativa, tenía que mentirle a este hombre para que dejara de buscarla, ella tenía que cumplir una misión.
Lo lamento, pero estás confundido, no somos la misma persona… Además, ni siquiera sé tu nombre.
—Me llamo Luke—fue la breve respuesta de él mientras su rostro se llenaba de decepción.
A diferencia de Alba, quien ahora sabia que era el líder de los hombres lobo que había jurado destruir.
Esta chica esperaba un tipo de respuesta demasiado diferente en estos momentos, sin embargo, tampoco se podía alejar de este hombre porque tenía mucha hambre en estos momentos.
Por eso le aplico la ley de hielo porque no estaba dispuesto a escuchar otra palabra de su boca, a pesar de que actuaba con una inocencia.
Aunque eso no la iba a detener.
¡Lástima que no he traído mi cuchillo!
A diferencia de Luke, quien esperaba que hiciera los mismos gestos que su exesposa, pero menos mal ahora que estaba al frente de ella tenía que contener sus nervios.
Quería averiguar todo de ella, incluso lo que paso en los últimos años que estuvieron separados.
En fin, este hombre lobo le quería decir miles de cosas, a pesar de que las palabras le iban a costar decir un poco, sin embargo, sabía que tenía ser fuerte frente a su rechazo.
—Si necesitas cualquier cosa, me puedes ir a buscar a este sitio—fueron las palabras de Luke, cuando le paso un papel pequeño, pero Alba lo rechazo enseguida.
A diferencia de los otros personajes, Esteban venía con una misión clara en estos momentos porque estaba dispuesto a destruir a los hombres lobos a cualquier costo porque no soportaba la idea de ellos siguieran vivos. A diferencia de toda su familia que murió asesinada por su culpa, un hecho que jamás se iba a perdonar en esta vida.No obstante, tenía una ventaja a su favor en este momento, algo que iba a usar a su favor porque iba a hacer su arma preferida. Poco después que cerro la puerta de su habitación, se sentó en medio de la habitación al lado de un desconocido. —Creí que no ibas a venir—le comento el otro hombre mientras que Esteban mantenía las manos cruzadas. —Ahora viene lo más interesante porque el juego está a punto de comenzar porque esta vez voy a cumplir mi plan—fue entonces cuando Esteban hizo una pausa para recordar el pasado luego de conocer a la mujer que iba a cambiar todo—igual si todo sale bien, espero que seas el padrino de mi boda. Quizás esas palabras, l
Al día siguiente, nuestra protagonista le aviso a Esteban que estaba lista para salir a comprar algunas cosas para el almuerzo, no obstante, igual le quería dar un aviso a este hombre para que todo estuviera bien entre ellos. Poco después, salió del hotel para darse cuenta de que estaba siendo desde lo lejos por Luke, una oportunidad que estaba dispuesto a aprovechar con ella menos mal ahora esperaba hablar con mucha más calma, incluso explicarle sus verdaderos motivos a diferencia de la primera vez que se conocieron. Por otro lado, Esteban sabía que Alba había escuchado su conversación anterior, por eso la había visto esta mañana para ver si le iba a comentar algo. Fue entonces cuando llamo a un número de teléfono desconocido para ordenar un poco de medicina que necesitaba esta mujer, sin embargo, teniendo esta vez una dosis más fuerte para que sus recuerdos no volvieran. Luego de eso, Luke se bajó del carro esperando el momento correcto para acercarse con Alba mientras que obser
En la tarde, estaba Esteban, ni siquiera tuvo tiempo de ir al hotel a pesar de que se quería encontrar con Alba, no obstante, tenía demasiadas ansias para reunirse con Luke otra vez a pesar de que se conocían. Eran enemigos jurados a la muerte porque en el pasado Esteban había estado enamorado de Alba, siendo que el único que estorbaba era Luke por eso estaba decidido a destruirlo dándole en el lugar menos esperado.Sin embargo, se dio cuenta de que este hombre lobo no se iba a reunir con él porque estaba en una reunión importante de la empresa, pero le dejo una nota importante para verse en otro sitio en medio de la noche para intentar llegar a la paz. —¿Acaso mi tiempo no vale para nada? Nada más voy a asistir porque quiero evitar problemas entre ustedes—dijo con tanto desprecio que no le importo saber donde iba se iba a realizar la reunión para tirarle ese papel a este empleado de la empresa. Luego de eso, Esteban se fue saliendo lleno de mal humor sospechando que los hombres l
Menos mal, en esos momentos apareció uno de los hombres de Luke, no obstante, este hombre lobo estaba herido. —Gracias por ayudarme, aún sigues siendo mi esposa—le comentaba este chico, a diferencia de Alba, que no entendía para nada lo que estaba hablando porque se suponía que esto era parte de un plan. Tanto ella como Esteban quería destruir a esas criaturas porque era imposible como ahora que pudieran sentir o amar por todo el daño que les hicieron. Luke entro al carro, solamente para darme cuenta de que esa mujer estaba incómoda a pesar de que iba a su lado, pero si regresaba a la mansión donde estaba su habitación seria una oportunidad perfecta para que recuperar su memoria. Nadie dijo nada en todo el camino, sino que ambos se quedaron callados mientras que ella apretaba los puños discretamente para que nadie la viera. —Señor, el médico acaba de llegar para que lo revise lo más rápido que pueda—fue el comentario que hizo el conductor. —Está bien.Entonces Alba vio a través
De manera apresurada, Esther estaba corriendo para ir donde estaba Seth, quien era su actual pareja porque parecía más amigos que derechos que otra cosa juntos. Sin embargo, quería llegar donde estaba ese chico para darle una gran noticia que iba a cambiar su vida para siempre. Entonces decidió subirse en el bus para llegar más rápido porque no quería que el tiempo se detuviera o sucediera algo mucho peor. Quizás estaba emocionada, a pesar de que estaba del mismo lado de los lobos para proteger a la ciudad sin tener la protección que deseaban. Porque estaba clara de que había tanto humanos como criaturas sobrenaturales que eran malas, no obstante, siendo una humana y amiga del guardián de este mundo, no podía hacer mucho. Aunque más de una vez, Seth le había dicho que tuviera cuidado donde se metía la nariz porque era curiosidad y terca, amiga de los lobos. Muchas cualidades que la podían convertir en la enemiga de su propia especie sin darse cuenta. Poco después, llego a su de
Tanto Luke como Seth, se hicieron amigos desde hace mucho tiempo, siendo por culpa de Yue en el pasado, sin embargo, antes de ser amigos se convirtieron en rivales de amor. Teniendo en cuenta de que Esther, estaba enamorada desde el primer momento de ese chico humano, aunque Anahí la manipulaba a su antojo, aparte de que le quería a su lado para llenarla de mentira a cambio de falsas promesas. —No me entra en la mente que Alba haya aceptado sin ninguna oposición quedarse en la mansión, quizás puede ser una trampa de los humanos—le comentaba Seth estando demasiado seguro de sus palabras. Sin embargo, ahora que estaba del mismo lado cuando unieron sus fuerzas en el momento que la esposa de Luke desapareció. —Sea engaño o no, eso lo dirá el tiempo, aunque ahora tengo muchos problemas con la manada porque a veces me resulta separar mis dos vidas—le comentaba ese hombre lobo, mientras que se tomaba un pequeño trago, estando afueras de la ciudad, mientras que observaba las olas del mar
A los pocos días…Luke estaba hablando con su hermana, mientras que iban camino a la empresa para planificar el trabajo en los próximos meses. —Querido, te deberías concentrar más en la manada también para dejar de pensar tanto en los humanos que no vale la pena—son las palabras de Anahí mientras que este hombre seguía revisando las estadísticas de la compañía—al menos me podrías responder porque me siento ignorada. Fue cuando este hombre lobo, tenía en su mente los días que estuvo con Alba porque extrañaba su compañía junto a sus besos, pero tenía que controlar la forma de que ella volviera a su lado porque al final de cuentas si era su esposa. —Nada ¿Qué estabas diciendo?—Solamente espero que puedas controlar a tus empleados humanos para que mantengan la raya de los hombres lobos porque sería otro escándalo que no podría soportar. Luke se quedó callado, sin comentarle nada porque entendía a lo que se estaba refiriendo. A medida que el carro estaba avanzando, ellos estaban en l
Pocas horas después, uno de los secretarios de Luke se había enterado de que Alba estaba aquí en el edificio trabajando en la parte de abajo. No dudo en contarle a Luke porque como parte de la manada le debía lealtad. Una vez que este hombre se enteró de eso, dejo lo que estaba haciendo para ir a la oficina del beta de los lobos. A diferencia de los otros, ni siquiera le importaban sus decisiones, sino que le informaba todos los movimientos, no obstante, también tenía mucho poder. Apenas Luke entro al ascensor teniendo mucha angustia en su cuerpo porque estaba demasiado cerca de recuperar a su esposa pronto. Cuando llego en el piso donde estaba ella, busco entre las demás personas para ver si la encontraba hasta que la vio. Luke cambio su estado de ánimo antes de que se cambiara de forma en frente de todos, respiro profundo luego de salir a buscarla. En cambio, Alba tenía mucha hambre porque aún no había salido ni siquiera para almorzar. —Pensé que te habías ido lejos porque n