Capítulo 512
Juan iba vestido con un traje decente, austero, recto y meticuloso.

Entró y los demás lo rodeaban.

La sala estaba abarrotada de gente.

Además del consejo de administración, había varios accionistas presentes.

Todos estaban preocupados por el futuro rumbo del Grupo López.

Juan miró a todos y ocupó el asiento que siempre ocupaba.

Aquel asiento era el segundo de honor, y nadie se atrevía a tocarlo.

Era que estaban en ese asiento y nadie podía dejar de pensar en él.

Las facciones de Juan eran profundas y frías, con una sonrisa indiferente y desapegada, su aura era tranquila y serena, inalcanzable.

Polo y su línea de visión en el lado opuesto, la oscura marea de contracorriente entre las dos personas ya no se puede ocultar.

Atrás terreno ya había comenzado a competir, ¿quién seguiría siendo hipócritamente educado en este momento?

Un ejecutivo mayor no pudo evitar toser.

—¡Abogado, date prisa y anuncia el testamento!

El abogado se congeló y miró a Polo, luego se puso de pie.

—Señores, soy el
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo