Donatello se sintió conmovido de su miserable pasado, Karoline era una buena chica no merecía todo lo que había pasado, ahora entendía porque su madre había preferido formar una ilusión antes de hacerla sufrir con la verdad sobre su padre.—¿Te gustaría ir a un parque de diversiones? —Quería que olvidara un poco el dolor que estaba pasando al sentirse rechazada por su padre.—Siii, de pequeña siempre quise ir, pero nunca pude hacerlo. —Karo suspiró al recordarlo.—Entonces de una vez vamos.Karoline iba feliz, él la observaba con atención era como si fuera pequeña, se veía demasiado emocionada por ir al parque de diversiones, al llegar se quedó parada por un momento observando todo aquello, le parecía un mundo de fantasía y luces al cual hasta ahora había sido invitada para entrar.—Anda vamos, nos subiremos a todos los juegos mecánicos que desees, verás que vamos a divertirnos.Karo le contestó con una sonrisa, eso a Donatello le agradó, verla así de feliz llenaba su corazón, quizás
Donatello estuvo completamente de acuerdo en eso, esa mujer tenía mucho que responder por su nefasto comportamiento, se dirigió hacia la casa donde se estaba hospedando Antonella que ya había dejado el hotel donde se había estado quedando, al llegar a la casa, Donatello y Karoline se acercaron a la puerta, él llamó varias veces, la propia Antonella atendió.—Don, has venido a verme, pasa. —Una enorme sonrisa apareció en su rostro.La cara de Antonella cambió completamente al ver que Karoline estaba al lado de él, cuando abrió la puerta no la había notado, se le borró la sonrisa en el acto, ¿Qué demonios hacía esa mosca muerta en su casa?Donatello entró en la casa llevando de la mano a su esposa, lo que hizo que Antonella enfureciera.—¿Qué es lo que quieren? —Casi gritó al decirlo, mientras cruzaba sus brazos.No podía disimular su molestia al ver a esa mujer tan cerca del hombre que amaba.—¿Por qué has estado siguiéndome? No entiendo como te atreviste a llevar a mi padre con mi m
La abuela se sentía feliz con la noticia del embarazo, cuando salieron del consultorio volvió a abrazar a Karo efusivamente, no podía creer que por fin tendría ese bisnieto que tanto le había pedido a su nieto, aunque era muy triste la situación en la que se estaba dando.—Me has hecho muy feliz hija, esperaremos a que Donatello despierte para dar la noticia de tu embarazo o hasta que ya no podamos ocultarlo.—Está bien, abuela, eso haremos.—Para mí eres una más de mis nietas.Mientras lo decía, la abuela esbozaba una tierna sonrisa, Karoline se dio cuenta de que era sincera.Los días pasaban, y Donatello seguía igual, algunos de sus familiares regresaron a Italia, solo se quedaron a su cuidado la abuela y Karo, quienes ya estaban desesperadas porque no despertaba, Antonella rondaba la habitación del hospital, pero no había podido estar, siempre estaban Karoline o la abuela, nunca lo dejaban solo.Habían pasado dos meses desde el accidente, ese día la abuela mando a Karo a la casa pa
Le preguntó Donatello suponiendo por su estado que se encontraba embarazada, cuando le hizo la pregunta esbozo una sonrisa de burla, Karoline se puso furiosa al ver el gesto que tenía al preguntárselo.—Eso es algo que no es de su incumbencia, señor Carusso. —No pensaba decirle que él era el padre, en primer lugar no le creería, en segundo no se iba a arriesgar a que Antonella se enterara y quisiera deshacerse de su hijo, esa mujer estaba loca, ya lo tenía más que visto.Un recuerdo vino a su mente en ese momento, era ella en un bar, la recordó con un sexy vestido rojo que la hacía lucir muy atractiva.—Creo que esas noches en el bar luciendo tan atrevida te han dejado un buen recuerdo. —Karo se sorprendió al escuchar lo que dijo, era una muestra de que había recordado algo, pero también se sintió ofendida por sus palabras.Ya no pudo soportar más, de pronto soltó un fuerte golpe directo a la cara de Donatello, él se quedó sorprendido, no creyó que esa mujer se atreviera a tanto, apre
Cuando salió del trabajo, Donatello estaba afuera recargado sobre su coche, al verla sacó de su auto un hermoso ramo de flores, Karoline lo recibió y agradeció muy fríamente, después de subir al auto se dirigieron hacia el hospital a visitar a su madre, a ella le extrañó que la llevara, después recordó que era parte del plan que había armado Francesco. La madre de Karo se puso muy feliz al verlos, se aburría terriblemente en ese lugar, todo el día acostada sin hacer nada, solo podía ver la televisión y ya estaba fastidiada. —Qué bien que vienen a verme. —Perdón mamá, he tenido mucho trabajo, por eso no puedo venir tan seguido como yo quisiera. —No te preocupes, hija, lo entiendo, no hagas caso de los achaques de esta vieja. Estuvieron un rato con ella, Donatello le había llevado también un hermoso ramo de flores, ella estaba encantada, Karo las colocó en un enorme jarrón frente a la cama, así podría verlas para que se alegrara. La chica le dio de comer, él observaba atento su man
Donatello regresó a su casa muy molesto, al llegar la sintió muy fría, además de que lo invadió una extraña sensación de soledad, recordó que eso no era algo que solía pasarle, se dio un rápido baño, deseaba descansar, al acostarse se quedó rápidamente dormido, esa noche sonó que se estaba comprometiendo con Karoline en un bar, se despertó agitado, ¿Era tan solo un simple sueño o en realidad eso era lo que había pasado?Se arregló para ir al trabajo, sentía mucha pesadez, como si no hubiera descansado, cuando llegó a la oficina vio que Karo ya estaba en su lugar de trabajo, en ese momento se dio cuenta de que la tendría que ver, en parte eso le agradó, se reprendió mentalmente, se recordó enseguida que el amor de su vida era Antonella y no ella, trataba de repetírselo constantemente, sobre todo cuando esa chica estaba cerca.Las mujeres con vida privada tan promiscua como lo era ella no eran de su tipo, aunque no podía negar que la chica era en realidad muy atractiva.Ella estaba tan
Donatello se había quedado profundamente dormido, después de un rato, empezó a tener sueños muy reveladores, en ellos se encontraba con Andrea en alguna especie de bar, ella se veía hermosa y sexy, estaba parada frente a él, de pronto notó que la chica le pedía que se casara con ella, se sintió asombrado ante ese recuerdo.Un par de horas después se despertó de repente completamente exaltado, volteó a ver hacia un lado, ahora recordaba, entonces eso era lo que había pasado.Volvió a quedarse profundamente dormido, por la mañana se despertó con un terrible dolor de cabeza por la resaca después de todo lo que había tomado, se llamó la atención a sí mismo, no podía estar tomando de aquella manera, no recordaba nada de lo que había soñado, todos los recuerdos parecían haberse ido de nuevo, se levantó para tomarse una pastilla para el dolor y bañarse.Tenía la sensación de que había olvidado algo importante, pero por más que se esforzaba no lograba recordarlo, caminó a la oficina, decidió
—¿A mí no va a saludarme Nona?Donatello se sentía mal de que su abuela pareciera querer mucho más a Karoline que a él, siempre se alegraba cuando la veía, a ella la saludaba efusivamente y a él no, estaba empezando a ponerse un poco celoso de ella, a Antonella a veces no le daba ni el saludo.—Claro que sí te saludo hijo, lo que pasa que me alegra, muchísimo ver que vienes con Karo a mi casa, es una excelente chica, aquí siempre será bien recibida, para mí ella es parte de esta familia.Antonella llamó a la esposa del primo de Donatello, está la invito a la comida familiar de ese día, ´él se sorprendió al verla en el lugar, no la había invitado.—Don, mi amor, vine a acompañarte, debiste avisarme con tiempo de esta reunión, así me hubiera arreglado de acuerdo a la ocasión.El italiano sonrío forzadamente, si no la había invitado es porque no quería que fuera porque llevaría a Karoline, que era la favorita de la abuela, y estar ahí con las dos presentes era muy estresante.Antonella,