Matthew — Esta bien, entonces salgamos. — accedió Cloe y yo suspire aliviado, quería disculparme y aclarar todo el pasado de una vez, recuperarla. Ella se sacudió mi mano y luego puso unas almohadas alrededor de la cama para que Michael no pudiera caer y salimos. — Dime lo que tengas que decir. — pidió ella, cuando ya nos habíamos alejado unos cuantos pasos de la habitación de Michael. — ¿Qué te parece si vamos a la biblioteca a hablar? — pregunte, no quería que el personal de la casa pudiera interrumpirnos. — Ok. — acepto ella y caminamos hasta allá.— Cloe quería decirte que ya se que no ocurrió nada entre Noah y tu, que solo fuiste la victima de todo y de verdad lo siento. — dije al fin, cuando entramos a la biblioteca y ella simplemente frunció el ceño ligeramente antes de mirarme con esos preciosos ojos azules, llenos de claridad.— Es bueno que al fin sepas como fueron las cosas, si no hay nada más, me voy. — Habló ella con total tranquilidad, como s
Cloe— Perdóname Cloe, no sabes cuanto lamento todo lo que te paso, de verdad me arrepiento de haber sido tan idiota, lamento tanto el no haber creído en ti, que no te dejara explicarte y haberte echado de mi vida así y me esta destrozando saber todo lo que tuviste que pasar con nuestro hijo por mis estúpidas decisiones y se que no tengo perdón por como me comporte, por como te trate y las cosas que te dije, puedo justificarme al decir que estaba cegado por la ira y el dolor al encontrarte así, que aunque es verdad, no se justifica en nada lo que hice, porque yo tenia que dejar que me explicaras, yo tenia que creer en ti y en nadie más, porque tu eras mi mujer, el amor de mi vida y te merecías al menos eso, pero fui demasiado tonto y no lo hice, ahora solo me queda suplicarte perdón y no espero que me lo des, porque yo se que no lo merezco, pero al menos mereces que yo lo pida, perdóname mi amor. — Suplicó Matthew con su voz tan rota, hecho un mar de lagrimas, con esos hermosos oj
Matthew Tenia muy claro que intentar enamorar a Cloe de nuevo, buscar que quiera regresar conmigo, no era nada justo para ella, porque ya había sufrido demasiado por mi culpa y tal vez si yo fuera una mejor persona, simplemente la dejaría ir, pero yo no lo era, la amaba demasiado y quiera estar con ella y con mi hijo, como siempre debió ser, no estoy dispuesto a dejar ir este amor, ni a verla con otro hombre, cuando se que ella aún me ama. …— Quería saber si puedes cuidar a Michael mañana, iré a una entrevista de trabajo. — dijo Cloe mientras almorzábamos, desde hace dos días que hablamos ella había tratado de mantener un contacto mínimo conmigo y a veces ya yo no sabia que hacer para acercarme aunque sea un poco. — Si puedo, pero ¿Por qué no trabajas en mi empresa? — le pregunte, prefería que ella trabajara directamente para mi, porque así podría mantenerla más segura, aun no tenemos nada sobre el paradero de ese hombre y eso me preocupa.— No gracias, quiero encontra
Cloe— Cualquier cosa que necesites solo llámame por favor, lo que sea. — le dije a Matthew ya casi me tenia que ir a la entrevista, pero sentía un poco de miedo de dejarlo solo con Michael, no porque el no fuera bueno con nuestro hijo, porque el era realmente excelente, había aprendido como cuidar de Michael muy rápido y todo lo hacia muy bien, incluso muchas de ellas mejor que yo, solo que Michael a veces se ponía bastante difícil y eso le costaba un poco a Matthew.— Esta bien, no te preocupes, lo cuidare bien. — Aseguró el, con una hermosa sonrisa, esa que me derretía el corazón.— Esta bien, si no he llegado a la hora de su almuerzo, le das la comida y en la nevera le deje fruta picada para comer en un rato, ¿no se me olvida nada más verdad? — pregunte más para mi misma que para el, era raro dejar a Michael con otra persona que no fuera Brooke, aunque este era su padre y no había nadie más que lo quisiera y se preocupara tanto como yo, excepto el, pero todavía nuestr
Ian Salvatore Iba muy apurado porque mi auto se había quedado accidentado de camino a la empresa y tenia una videoconferencia importante pautada, por lo que cuando apenas llegue entre de prisa a la empresa de camino hacia el ascensor, hasta que tropecé con ella, la hermosa y mal educada chica de grandes ojos azules, esto me había quitado más tiempo del esperado y ella se había atrevido a quitarme más al exigirme una disculpa, que tontería, quien se tenia que disculpar era ella, por entorpecerle el paso al dueño de la empresa, además si ella trabajaba aquí yo era su jefe, no se podía comportar de esa manera tan imprudente frente a mí.Lo peor de todo, era que esa maldita chica se atrevió a insultarme y dejarme parado ahí, como si nada, estaba furioso y no haberla podido detener a tiempo despues de recibir su insulto, me molesto aun más, así que camine hacia la recepción para ver quien era y si trabajaba aquí la despediría, quizás así aprenda a respetar a su jefe.— ¿Quién es la c
Matthew Que Cloe me dejara finalmente a solas con Michael me tenia muy feliz, porque esto me demostraba que ella confiaba totalmente en mi para el cuidado de nuestro hijo y además el se había portado realmente bien. Ha jugado conmigo estas horas y no ha llorado ni una sola vez, ni siquiera cuando Cloe se fue y esto era una buena señal, demostraba que poco a poco el se estaba adaptando a estar conmigo. — Vamos levante y da unos pasos. — lo inste mientras lo ponía sostenerse de una de las barandas del parque de juegos, pero el solo se mantuvo por un momento de pie, antes de sentarse de nuevo.— Michael dime papá — le pedí, ya que no había logrado mi cometido de que caminara, lo intentaría con que me llamara papá, pero el simplemente me ignoro. — ¿Dónde esta mi bebe? — preguntó Cloe mientras se acercaba a nosotros con una sonrisa y Michael voltio a donde provenía la voz de su madre muy sonriente.— Mamá — llamó el y Cloe al llegar a nuestro lado lo cargo y le dio un be
Cloe— Adiós mi pequeño bebe. — dije antes de darle un beso a Michael para entregárselo a Matthew. — Si necesitas algo o tienes alguna pregunta me llamas. — Esta bien, no te preocupes, Michael estará muy bien bajo mi cuidado. — dijo el con una sonrisa, pero yo seguía un poco nerviosa por hacer esto, aunque todo había salido bien antes cuando lo deje con el, solo habían sido por un poco más de tres horas, esta vez serían ocho, era demasiado. — Esta bien, recuerda llamarme si ocurre algo. — Lo haré, suerte en tu nuevo trabajo. — espetó Matthew con una sonrisa encantadora, yo aun no podía creer que el prácticamente estaba dejando su trabajo para cuidar de Michael cuando lo suyo era de mucha más importancia que este trabajo que yo estaba obteniendo, pero estaba muy agradecida que hiciera esto por mi, yo no quería perder la oportunidad de ser contratada en esta empresa por no contar con una niñera todavía. — Gracias, bueno adiós. — me despedí y sin poderlo evitar
Ian Ver la cara de Cloe al saber que yo era su jefe había valido completamente la pena y estaba feliz de haberla puesto a firmar ese contrato especial, ella no podría renunciar al menos por tres meses y eso estaba bien, porque aunque pensé que la terminaría despidiendo rápido, ahora creía que esto iba a ser muy divertido y estaba empezando a creer que esos tres meses se quedarían cortos. — No lo pienso hacer. — Aseguró ella sin dudarlo. — Señorita le recuerdo que yo soy su jefe y va a estar trabajando para mi por un tiempo, así que creo que lo mejor es que llevemos una relación de trabajo cordial y para hacer esto necesito que usted se disculpe. — insistí, sabiendo que no podríamos llevar ninguna relación cordial aunque se disculpara, porque yo no me había tomado tantas molestias para dejarla ir tan rápido, pero quería hacer que ella se disculpara, así podría empezar a bajarle los humos, para irle haciendo entender quien es la persona que manda. — No es como que yo qui