El día paso deprisa para todos quienes descansaban en sus respectivos hogares, todo saldría maravillosamente, estaban seguros.
En un elegante café de la ciudad Draco y Sebastián se reunían nuevamente, las luces de la ciudad se reflejaban en los cristales del lugar, la noche había caído sobre ellos.
- Conseguiste algo de lo que te pedí? - preguntaba el cruel rubios.
- Tuve que hacer demasiadas llamadas y lamento informarle que la información no está completa, el nombre del culpable no aparece en ningún registro oficial, fue lo mejor que pude conseguir, parece ser que alguien bastante poderoso está involucrado en esto y se encargó de desaparecer su rastro - dijo Sebastián mientras le entregaba un folder con información que Draco comenzó a leer.
Los minutos transcurrieron y el cruel rubios tenía sus fríos y celestes ojos clavados en l
La fiesta de Navidad había resultado el éxito que se esperaba que fuera, los rostros de los pequeños reflejaban la enorme felicidad que sentían, todos dormían plácidamente aferrados a los juguetes que soñaban algún día poder tener, la madre Isabel hablaba con Joseph y Freya Gastrell.- No tiene nada de qué preocuparse ahora, Sagrado Corazón se hará cargo de cubrir las necesidades de este orfanato, los pequeños no volverán a sufrir carencias y tendrán acceso a una buena educación - decía complacido Joseph a la madre superiora.- Y yo personalmente vendré cada semana a revisar que nada falte, me he encariñado tanto con los niños que no puedo permitir que alguien más se haga cargo de esta tarea - dijo Freya con suavidad, realmente las inocentes caritas y ternura de los infantes la habían llenado de una calidez que hac&ia
Andrómeda acababa de comprender, su amado piel canela odiaba a Edward y Draco porque, inconscientemente, los veía como rivales por el amor de su madre, al ser ellos hijos de Joseph Gastrell, el hombre al que nunca logro olvidar la mujer que fue su madre, sentía un profundo dolor en su pecho, aunque ni el antiguo patriarca, ni sus hijos, eran culpables del desequilibrio mental que sufría la madre de su amado, le dolía profundamente todo lo que el ojos zafiro había tenido que sufrir, realmente era estúpido que las "honorables" familias decidieran el futuro para sus descendientes arreglando matrimonios tan solo para conseguir "beneficios y poder", no juzgaba, ni pretendía hacerlo, a la pobre mujer que hizo sufrir a su piel canela, no podía saber si en la historia relatada por el padre y abuelo de Altair habían sido totalmente sinceros con él, solo estaba segura de que una madre, por amor, jamás har&iacu
Dos lujosos autos llegaban a la lujosa Mansión Dankworth, de ellos, descendieron Andrómeda y Altair junto al pequeño Jayden, así como Thomas, Jacob y Sophie, Nereida ya los esperaba y los condujo dentro del recinto, una elegante, pero sumamente escandalosa mujer, se abalanzó sobre la cobriza, quien la abrazo de vuelta con una sonrisa.- Andy, tanto tiempo desde que nos visitaste! No tuve oportunidad de acercarme en tu presentación y fiesta de compromiso, mírate, ¡estás bellísima! - decía la sumamente escandalosa mujer.- mamá! Deja que Andy respire un poco - dijo Nereida arrebatando a la cobriza de los brazos de su madre.- oh lo siento Sashi, pero hace tiempo que no veía a Andy que me emocioné - dijo la mujer tocándose tímidamente la mejilla y prestando atención en los acompañantes de la piel nívea.- mucho gusto, mi nombre
La cena era realmente un poema al paladar, todos degustaban los exquisitos filetes y ensaladas que estaban a su entera disposición para finalmente comenzar a degustar los postres, Edward y Kayden peleaban por un pastel de crema con fresas y el escándalo ya reinaba en el comedor, como era costumbre, el animoso grupo gritaba y jugueteaba, Jacob se sobaba las sienes, si bien, no era la primera vez que lidiaba con el escandaloso grupo, siempre era tedioso cuidar de los hiperactivos jovencitos, Thomas no perdía detalle de la hermosa cobriza y se burlaba entre dientes de ver al rubios manchado de pastel hasta los codos, Amelie reía mientras trataba de limpiar los restos del postre de la ropa de su amado y al mismo tiempo trataba de evitar que el joven golpeara a Kayden, Anna se retorcía de la risa burlándose de su novio al verlo en las mismas condiciones de Edward, André se sentía con migraña de oír semejante escá
- Te has vuelto loco? ¡Cómo te atreves a golpearla! - reclamaba Anna furiosa.- Para empezar, ¿que demonios haces en el apartado femenino Sallow? - preguntaba Nereida indignada por el trato del moreno a su pariente.Los hombres estaban furiosos también por la intrusión del ojos zafiro al sitio donde se hallaban desnudas sus mujeres.- te encuentras bien? - preguntaba Sophie mientras abrazaba a la furiosa Amelie, de nuevo se sentía reducida y humillada por su condición de mujer.- escucha bien Amelie porque será la última vez que lo repita, no te atrevas a ofender a Andrómeda - dijo Altair con frialdad.- ESTOY HARTA! ¡¿PORQUE TENGO QUE OBEDECER CADA ESTUPIDA ORDEN TUYA O DEL ABUELO?! ¡CON QUE MALDITO DERECHO ME REDUCEN A NADA! ¡YO SERIA MIL VECES MEJOR PATRIARCA QUE TÚ MALDITO VANIDOSO, IRRESPONSABLE, EGOÍSTA! - gritaba la delicada joven con
Una suave lluvia se dejaba caer en la ciudad, el cielo gris sin un atisbo de cálidos rayos de sol terminaba de retratar el triste cuadro, la mansión Relish mostraba un desfile de personas de alta sociedad quienes llegaban a dejar sus respetos a Andrómeda y Zara, la hermosa cobriza lucia tal cual era su estado de ánimo...devastada.Apenas si había probado alimento, no logro conciliar el sueño los dos días siguientes después de recibir la noticia y se había encerrado en la recamara de Aubrey negándose a salir, sus amigos intentaron de mil maneras acercarse a ella, pero se negó, Altair apenas había logrado verla unas horas al día, la pobre chica no había dejado de llorar, tan solo se acallaban los terribles y desgarradores llantos y alaridos, cuando, vencida por el cansancio, se quedaba dormida con la respiración entrecortada, Sebastián se había hecho cargo pers
¡Hermana, mira esto! ¡Santa Claus me ha traído el auto de carreras que pedí! ¡Y a ti también te trajo un regalo!La hermosa piel nívea despertaba...aquel sueño nacido de sus memorias logro arrebatar pequeñas lágrimas de sus bellos ojos.Una semana transcurrió desde los funerales Relish, el departamento de Altair lucia una hermosa decoración navideña, el árbol ricamente adornado con esferas y luces multicolor hacía de la estancia familiar un espectáculo digno de verse, Andrómeda no se sentía con ánimo de celebrar la noche buena, pero con el pensamiento de su deber en seguir adelante, sonreía genuinamente, Jayden había estado con ella la mayoría del tiempo, el pequeño calmaba el gran dolor de la cobriza, sin embargo, decidida a no dejarse llevar por su depresión, se enfocó en su ahora hijo y s
El mes de enero llegó cargado con mil ocupaciones, Altair y Andrómeda permanecían la mayor parte del tiempo juntos, el apuesto moreno se esforzaba en llenarla de halagos, paseos y amor, deseaba lograr que el brillo de la vida regresará a los hermosos ojos de su amada, que desde la muerte de Aubrey reflejaban su profunda tristeza, aunque la bella cobriza sonreía y seguía con su vida aquellos que la amaban y conocían sabían que no se encontraba bien, la hermosa jovencita había perdido la vivacidad y alegría que la caracterizaban, dejo de ser el gallardo príncipe para sumergirse por las noches cuando creía que nadie podía verla en el papel de la princesa que necesitaba despertar de una pesadilla, se enfocaba en ser fuerte por Jayden y Altair, pero en el fondo se sentía débil, triste, y devastada, sentía que no lograría soportar un golpe de la vida más...su coraz