Estábamos en el campo de mis tíos, no es un campo enorme, pero tampoco se lo puede llamar pequeño.Hacía bastante calor, era media mañana.Mi marido estaba un poco alejado, tomando mate con mi tío, yo estaba recostada en una reposera, junto a Sandy, mi prima.Luca, el marido de mi prima, jugaba en la piscina con sus dos pequeñas Mya y Kate.-Tia, vení a jugar.Me llamó Mya.-En un ratito voy.Le contesté.Se acerca Marcelo, mi marido.-Anto, me llamó Bianca, me confirmó que la entrega de diploma de Jano es mañana, por lo que nos tendríamos que ir hoy.Me hizo gracia.No sé para qué quiere que vaya.Yo no iba a estar presente, Bianca le había prohibido a Marcelo que yo lo acompañe a cualquier evento de Jano.Tenía que esperar dentro del auto, eso lo hice una vez, o quedarme en casa, mientras que ellos comparten el momento de su niño.Esa situación se repetía en los cumpleaños de Jano y también en los eventos deportivos.Compartían la tutela de Jano, pero eso no era algo que Bianca resp
Por Antonella-Estuve charlando con Teresa.Dice mi tía, llamando mi atención.Teresa es una prima de ella.También fue prima de mi madre.Sigo comiendo en silencio.-La invité a que pase unos días con nosotros, viene con su marido, también con Pía y su pareja.Ahora sí, mis manos temblaban.Tuve que disimular.La mirada de Sandy en mi rostro, me decía mil cosas.En ese momento, le contesté algo a Kate.-Nunca fueron muy compinches con Pía.Mi tía se refiere a nosotras dos, a Sandy y a mí.-Es verdad.Lo concedo yo.La revolución que siento por dentro, es mucha.Nadie sabe, solo Sandy, de esa revolución que tengo en mi corazón.Trato de disimular todo lo que siento.Tampoco tiene sentido que alguien se entere, es algo que pasó, que está en el pasado y que no puede volver.Una inmensa melancolía se apoderó de mí.-¿Estás reconsiderando acompañarme?Me pregunta mi marido.-No, ya te dije que no voy.Al final, por una razón u otra, siempre estoy sola.Al lado de Marcelo también me sien
Por AntonellaEstábamos todos en ronda, yo tenía puestos los anteojos espejados y Fabrizio también.Nadie sabía a quién estábamos mirando.Noto que está demasiado serio y que casi no habla.-¿Te quedás al final?Me pregunta Marcelo.-Ya te dije que sí.-Arreglá con alguién para que te lleve, yo no tengo tiempo de volver.-Vuelvo con Sandy.Todos están escuchando nuestra conversación.-Sos caprichosa.-Cortala, porque considero que el caprichoso sos vos.-Tengo que ir a la entrega de diploma de mi hijo.-Me parece perfecto que vayas, es lo que corresponde.-Entonces vení.-Vos querés que yo vaya a casa.-La cena es solo para los padres y hermanos.-Entonces andá.-Pero vos no venís.-Marcelo, ya hablamos ese tema, es solo para los padres, vas vos y tu ex esposa, yo no estoy invitada, querés que vaya para no viajar solo, lo lamento, prefiero quedarme, llevate mi auto, solo te digo que al evento, vas en tu propio auto, esa mujer usa un perfume espantoso y ordinario, no quiero que se suba
Por AntonellaÉramos muy jóvenes cuando salíamos, pero él siempre fue un mujeriego empedernido.Me doy cuenta que nunca dejé de amarlo, luego de esos encuentros en que me convertí en su amante, algo muy fuerte se formó dentro de mí, pero él eligió que nos dejemos de ver y quedarse con cierto nivel económico y con ella…Como me gustaría que solo conmigo pueda apagar su apetito sexual.Que tenga ganas de mí.El silencio de mi habitación acompaña a mi tristeza.Siento mucha impotencia.Muero por Fabrizio, tal vez Marcelo nunca supo o nunca quiso conquistarme, llenarme, adorarme…Yo solo busco amor, un amor completo, de esos por los que muchas mujeres suspiran cuando ven las telenovelas en donde trabajo.Jugué con fuego y me quemé.Jugué, sabiendo, desde un principio que iba a perder, porque con Fabrizio perdía siempre.Con él me quemaba de tanto amor.En un principio de mi matrimonio puse todo de mí, pretendí que Fabrizio no me importaba, es que estaba casado y era padre.Yo misma no lo
Por Antonella.Pasaron varios días, el evento de Jano ya pasó, pero mi marido no volvió al campo, supongo que debe estar con Bianca, en cuanto vuelva, le voy a poner un punto final a mi matrimonio.No voy a estar casada solo por no estar sola.Ya no tengo ni siquiera ansiedad de saber que pasa en su vida.Mi vida sentimental es un desastre.Me dediqué a disfrutar de mis sobrinas.Muchas veces sentía que la mirada de Fabrizio me quemaba, pero él nunca se alejaba de Pía.-¿Vamos a cenar, esta noche?Propone Luca.-Salgan ustedes cuatro, así son dos parejas.Dice Teresa.-No dejaríamos a Anto sola, ella viene con nosotros.Decreta Sandy.Nadie acotó nada, pero la forma de mi tía, de querer que yo estuviera incómoda continuamente, me está cansando, siempre fue así, busca que yo compita con Sandy o ella conmigo.Fuimos en dos autos, por un lado Pía con su novio y por otro lado, Sandy, Luca y yo.Llegamos a un restaurante bastante exclusivo, hicimos casi 45 minutos por ruta.Al llegar al
Por AntonellaEstaba preparando mi desayuno, cuando lo veo entrar a la cocina.-¿A qué estás jugando?¿Por qué seguís acá?Dice de repente.-¿Perdón? Es la casa de mi tía y vengo siempre.-Hacés todo por llegar a mis sentidos.-Estás equivocado.-No volviste con tu marido ¿Lo hiciste por mí?-No sos el ombligo del mundo, me quedé porque estoy mal con mi marido…me separo en cuanto vuelva a la ciudad.-¿Y por qué me lo decís?-¿Me estás cargando?-Andate, por favor, no quiero estar cerca tuyo.-Entonces alejate vos.Le dije de malos modos.No me quería cerca y pensaba que me quedaba por él.¿Pensaba que lo quería seducir?No sabe que lo puedo volver loco con mis coqueteos y sin embargo, piensa que ya lo estoy haciendo.Está equivocado.Me mantuve con un perfil bajo, traté de no llamar su atención, porque estaba con mi prima y con mis tíos, que son sus suegros.Se acabó, ahora sí voy a tratar de llamar su atención y después voy a ser fría.Así se comporta él.Primero seduce y luego se cub
Por AntonellaSalgo de mi habitación dejando la puerta entreabierta, para que Fabrizio pueda salir más tranquilo, prestando atención a los pequeños ruidos y a las pisadas.-¡Cómo tardaste en bajar!Dice Teresa.-Es que me estaba duchando y el agua estaba divina.Sandy me mira, queriendo adivinar si lo que digo es cierto.-Tía ¿Vamos a caminar?Me pregunta la pequeña Mya.-Si, mi princesita.-Te acompaño, Anto.Dice Sandy.Le sonrío, no voy a poder guardar mi secreto por mucho tiempo más.Aparece Fabrizio y apenas dijo un hola.-¿En dónde estabas?Escucho como le reclama Pía.-Estaba caminando por el campo, es inmenso.-Me hubieras dicho e iba con vos.Dice su novia.Sandy sonríe porque yo estoy sonriendo.-Ahora se llama caminar.Dice mi prima.-Sí mamá, estamos caminando.Contesta inocentemente Kate.Pronto las niñas se soltaron de mis manos y corrieron delante nuestro.-¿Qué pasó?Pregunta Sandy, sin perder tiempo.-Se metió en mi habitación...le dije que estaba loco, pero…terminamo
Por AntonellaCenamos tranquilos, aunque luego de cenar, nos quedamos los más jóvenes en el porche de la casa, había un par de hamacas, de esas que son sillones y también habían algunas reposeras.Pía se comía a besos a Fabrizio y él le devolvía cada uno de los besos y parecía feliz con eso.A mí me estaba agarrando un dolor de estómago, por verlos tan acaramelados.La actitud de mi prima era esperada, pero que Fabrizio le siga el juego, realmente me descomponía.La estúpida era yo, que lo recibía cuando él quería.En mi cara me gritaba que yo no le importaba y que prefería a mi prima.Gritar es una manera de decir…Hasta Luca estaba incómodo, por cómo se estaban besando ellos dos.Sandy los miraba a ellos y me miraba a mí.-Te encargo un lápiz labial importado, de esos que trae tu amiga, vení, te muestro el color.Dijo Sandy, parándose y yendo para adentro.Nos fuimos las dos y Luca nos siguió.Lo que no sabía el marido de mi prima, es que ese espectáculo, posiblemente haya sido para