POV : TARA. [Parte I]El cuerpo laxo de Bastian cayó sobre el mío, permanecimos unidos y todavía era capaz de sentir los escalofríos recorriendo su cuerpo. No deseaba que se moviera, deseaba tenerlo dentro para siempre, sabía que solo era una ilusión, un deseo que nunca sería satisfecho, pero me agradaba la idea.Quizás así se sentía estar enamorada, desear poseer esa persona para siempre...Sin embargo no podía estar segura, solo había sentido este famoso revuelo de mariposas del que todo el mundo habla una vez en mi adolescencia. Escuché la respiración tranquila y uniforme de él sobre mí, ahora estamos más calmados, sus manos seguían atadas al espaldar de la cama, pero parecía que no le importaba, ni siquiera le molestaba, habíamos pasados los últimos dos días encerrados en mi casa, aprovechando que "mi esposito" se encontraba de viaje. Me gustaba sentirme tan segura con alguien que no tenía la intención de lastimarme. Era tan agradable. Cerré los ojos por un momento y me dejé a
POV : TARA. [Parte II] Dos meses después...«Creo que odio este trabajo.» — ¡Que pasen un lindo día! — Sonreí mientras los ejecutivos pasaban junto a mí e ingresaban al elevador. — Muchas gracias por su tiempo. ¡Espero hayan disfrutado del pastel de manzana! Yo misma lo preparé.— ¡Adiós, a todos!. — Aislyn Jones, se unió a las despedidas colocándose a mi lado. — Ha sido un placer estar en su compañía. — Ambas dijimos entre dientes. Incluso si no supiera la verdad, pudiese creerme las palabras que salían de mi boca. Pero la realidad era que la revista TIME estaba hundida en la miseria, habíamos filtrado a la competencia cada edición nueva y aunque Maxim, se veía muy calmado yo sabía que por dentro desbordaba desesperación, estaba acabado, la revista no le estaba generando.— Para que conste, te estuve observando todo el tiempo. — Dice sin apartar esa mirada inquieta. — ¿Soy yo o has estado evitándome desde lo que sucedió aquella vez? — Murmuró esto último en voz baja y disimula
POV : BASTIAN. [Parte I] — Tu vista siempre debe estar en su cuerpo. — Sam instruye a Tara que se encuentra apuntando hacía un saco de patatas que hemos colocado a varios metros y una gota de sudor me recorre la espalda. Detesto ver a Tara con un arma entre sus manos, pero entiendo que su situación la obliga a cuidarse. — Bien. — Le contesta y acto seguido, asiente para empuñar el arma con más fuerza. Sus manos están resbaladizas por el sudor, pero trato de ayudarla. Llevamos más de seis horas en el campo de tiro y aún no puede acostumbrase a la sensación de sostener el arma. — Baje un poco más los brazos, mí Señora. — Susurré en su oído. Estaba detrás de ella, sosteniéndola de la cintura con mis manos. — Mis brazos duelen Bastian, ya no puedo mantener mi postura. — Se quejó. — Tu puedes, yo sé que sí. Pon el dedo en el gatillo debes afianzarlo correctamente. — Reacomodé sus brazos para aclarar su campo de visión. — Ahora debes separar tus piernas. — Con mi pie abrí su piern
POV : BASTIAN. [Parte II ] Son casi las nueve cuándo llegamos a mi departamento, Sam anuncia que tomará una ducha. Yo, luego de escucharlo, me encamino a la habitación para hacer lo mismo, he comido tanto que creo que mi estómago me mantendrá despierto toda la noche. Tara me sigue en silencio, el niño rico de su esposo de nuevo se marchó dejándola sola. "No entiendo cómo alguien puede ser tan idiota". Veo como se desviste frente a mí y se encamina hasta la ducha, segundos después escucho el sonido de la regadera. Esa acción tan simple ha puesto mi piel de gallina, así que me dirijo al closet y remuevo la ropa en busca de una franela y un pantalón ancho para dormir. Me debato entre desvestirme ahora y meterme a la ducha junto a ella o esperar a que salga. Al final lo único que hago es quedarme de pie en medio de la habitación por unos segundos. «Ve con ella» Me susurra la voz en mi cabeza, por alguna extraña razón mi pulso se ha acelerado igual que mi imaginación ha comenzado
EXTRA. POV: ATLAS. ¡Había perdido la cabeza por una mujer!Observaba a Pandora desde la cúspide dónde me encontraba sentado, ella se paseaba en la sala común con una sensualidad exquisita, una falda corta que presionaba firme a través de sus muslos. En sus manos presumía a una de las Gorgonas, su pecho se hinchaba mientras respiraba profundamente, el estrecho material de su corsé abotonado se estira hasta revelar las líneas de su sujetador y también las duras areolas rosas de sus pezones. Era hermosa. Mucho. Pero lo que más me enloquecia es que era completamente mía, la había reclamado delante de todos y quería retenerla de cualquier manera, estar con ella por las noches ya no saciaba mi sed, necesitaba más, necesito avanzar al próximo nivel, a partir de hoy la protección de las máscaras no será necesaria. Dejé que mis ojos vagaran un poco más sobre su cuerpo. Así que, mi mirada subio desde sus piernas, hasta detenerse en sus magníficas tetas, nuestras miradas se encontraron y su
POV: TARA. Mientras Bastian resguardaba el Bentley en un sitio seguro, yo lo observaba con completo detenimiento, sus ojos se oscurecían cada vez más entre las sombras de la noche, al fin había llegado la oportunidad de saciar aquel deseo de venganza que guardamos durante tantos años... También me las había arreglado para evitar preocuparme, manteniendo mis pensamientos en el presente y en nuestros planes. Pero caminando por este callejón mal oliente en mitad de la noche todo lo que podía pensar era en cada cosa que podría salir mal. Estábamos metiendonos en una trampa. Yo lo sabía. Bastián lo sabía. Y pienso que Sam también. ¿Pero y que pasa con los demás? Se les pagó lo suficiente como para que no les importara. Sin embargo, los mercenarios en varias oportunidades me habían demostrado su lealtad al igual que Samael.Es probable que tengamos éxito. — Capricornio a base: "Estamos listos para ingresar" Repito, "Listos para ingresar" — Bastian informa sobre nuestra posicion, luego
POV: TARA. [ Parte II] Al levantar la mirada me encontré con Atlas. Su mirada era gélida igual que su comportamientoy provocó un escalofrío en mi cuerpo. No de placer o excitación, sino de miedo, era la misma que tenía el día en que abusó de mi. Ahora podía recordarlo claramente. Observé sus manos manchadas con sangre y me puse nerviosa, luego fijé la vista hacia los chicos con completo terror. Sam y Midas se encontraban amordazados, se veía claramente que recibieron una fuerte paliza... "Es un desgraciado" Entonces, mis ojos descubrieron lo peor. Bastián yacia en el suelo sobre un charco de sangre. — ¡Dios mío, no! — Tape mi boca con mis manos, aún llevaba puesta la capucha que cubria la mitad de mi rostro. ¿Que había sucedido con Sebastián? Miré a Maxim y este notó el dolor en mi rostro, así que comenzó a reír. — ¿Te gusta, I'vitsa? Es una ofrenda de paz. — Pateo el cuerpo de Bastian — Tu me quitaste a mi hermano y yo te quité a tu... Amante. — Dijo esto último con una expres
POV : ACE. [Varios Meses Después...]Mis ojos atravesaron el concurrido salon elegante, dónde se llevaría a cabo una gran subasta. El sitio habia sido cerrado hace meses y hoy por fin tendría la oportunidad de adquirirlo cómo único dueño. Pasé mis dedos por encima de la mesa situada bajo el gran ventanal. Había una gran capa de polvo pero era la pieza perfecta igual que todo en este lugar. Sabía que el día de hoy tendría competencia, razón por la cuál sentía miedo de perder la oportunidad de poseer el local. — No entiendo, ¿Por qué necesitas comprar este lugar? — Anunció Ethan a mi lado. — Todo quedó hecho ruinas. Tendrás que invertirle una fortuna. — No lo entiendes, yo lo necesito. — Confesé sin más. — ¿Por? — su insistencia me tomó por sorpresa, la verdad es que tenía una muy buena razón por la cuál quería apropiarme del establecimiento. "La Diosa Pandora"Ella era la única mujer que alguna vez habíaprovocado deseo y al mismo tiempo dolor en mi corazón.Debo decir que la ch