NARRA DIANNEEstoy impaciente, pues, me dormí y mis hermanos me contaron que habían encontrado el sitio donde tenían secuestrado a mi tío Andrew y que mis padres, mi hermano Joseph y Albert se fueron con los agentesEstaba muy ansiosa esperando que alguien llamara, encendí la televisión y pasaron una noticia urgente, se veía a muchos agentes, los amigos pandilleros de mi hermano, policías disparando entrando y saliendo de esa enorme casa, hasta que vi que llegó una ambulancia sacaban una camilla con alguien herido y atrás estaban mis padres y AlbertEso hizo que me asustara, pues por los rostros preocupados que observé me imagine enseguida que quien está ocupando la camilla puede ser mi tío Andrew y exclamé frente a mis hermanos—Mi tío debe ser el que está herido, es mi tío, Dios mío —ellos me observaron con susto y comento Adam —Llévanos a la clínica Dianne por favorAndrew Jr opino muy seguro —Debemos decirle a la tía Sophie para ir juntos, ella está allá abajoBajamos corriendo la
NARRA MARIOClarisse sabe hacer el amor genial, me dejo muy satisfecho, estábamos mirando las noticias y salió el rescate del padre de la chiquilla que me gusta, su hermano y esposa también, ella estaba muy atenta cuando dijo fuerte—Mira Mario, allí está mi amor junto a la madre de esa mocosa, entonces van a la clínica del doctor Carter —Se levantó para vestirse muy elegante y pregunte—¿Adónde vas mujer? —me observo divertida, diciendo—Voy a visitar a mi amado tormento y a aclarar las cosas con esa mocosa de mierdaLa miré sin poder creer que va a meterse a la cueva del lobo, pues, la clínica es de los Carter y ella es su hija, lógico que ellos están allí y los demás familiares con lo que pasó y la van a correr a patadas, pero esta mujer es una loca de atarSe fue dándome un beso caliente, me quedé pensando en que ya debía regresar al colegio y volver a ver a mi diosa blanca preciosa, pero también a mi primito que se va a desatar preguntándome del asalto y de que en donde estuve y
NARRA ALBERTEsa visita de la estúpida Clarisse no me gusta para nada, otra vez está jodiéndome la vida, pensé que ya tenía resuelta mi vida, amar a alguien con locura, tener el amor verdadero junto a mí, que ella me ame como yo a ella, lo tengo todo carajo, pero de nuevo esa maldita arpía regresó, alzo la mirada y veo a un bello ángel acercarse a mí, esa inocente sonrisa me aloca y más cuando la bandida relame sus labios sin dejar de mirarme y le inquiero—Mi amor, mi corazón salta cada vez que te veo —Dianne llega a mí para besarme sin dejarme siquiera reaccionar, me encanta, me gusta, me mata de amor, esta chiquilla rebelde, la adoro cuando me habla—Albert, te amo mucho, te amo tanto que no me da miedo lo que amenazo la zorra esa, sé que me amas como yo te amo, solo quisiera que luchemos juntos contra ella, sin mentiras, sin secretos, para no darle fuerza alguna para separarnosMierda mi ego se infla cuando la escucho hablar de esa forma tan cariñosa y tan segura que me hace conte
SIPNOSISHola me llamo Albert Collins tengo 28 años y soy profesor de Literatura en un Colegio prestigioso, llegue a vivir en un departamento lujoso porque mi familia es humildemente millonaria y pues soy el único hijo que prefirió estudiar Letras y Filosofía y no la Carrera Contable como mis dos hermanos mayores que son los que están al frente de las empresas familiares, mis padres ya se retiraron a disfrutar su vida con paseos alrededor del mundo. Me recriminan que trabajo en un puesto muy bajo para mi categoría, pero es que esta es mi vocación y me gusta mi trabajo.Mis hermanos me comprenden, recibo un mensual con una jugosa cantidad, tengo mi auto Ferrari, mi ropa de marca, tarjetas de crédito, tengo todo para vivir holgadamente y sin trabajar, pero la vocación de enseñar es tan fuerte que simplemente lo hago y así conseguí este empleo de ProfesorPero no me arrepiento porque por esta linda vocación, conocí a quién me remover
Bien, pues, nos despedimos y comencé a bajar las escaleras, al llegar al último escalón vi unos zapatos deportivos blancos junto a mí y la famosa nalgada de nuevo, me enderecé para ver y no había nadie observe alrededor y solo vi a una persona corriendo con uniforme de gimnasia hacia los baños, había unos asientos de mármol casi frente a ellos y me senté allí creyendo en mi inocencia que descubriría al acosador de mis nalgas, pero que equivocado que estaba cuando se abrieron las puertas de los baños salieron montones de alumnos vestidos de uniforme normal de clases.Pasaron junto a mí saludando todos entre ellos la bella Dianne, pero si era ella no tenía pruebas además ni siquiera vi el rostro de quien me palmeo las nalgas, eso me lleno de impotencia suspire profundo y cerré mis párpados tratando de calmar mis nervios y sentí que alguien me beso en mis labios, fue tan rápido miré y solo estaban todos los alumnos de espaldas caminando hacia las escalerasMe levanté a observarlos, todos
Amaneció de nuevo, caramba que se me hace duro levantarme, pero el deber me llama así que a apresurarme, me bañe, me vestí, pero hoy voy más informal voy a ir con guayabera y pantalón negro, mis horas son todas en la mañana después de receso estoy libre, repase mis clases un momento y guarde todo para bajar con todo listo ya.—Albert, qué guapo estás hoy, estas para comerte papi rico, jajajaja —lo dije mirándome en el espejo mientras me acicalaba mi cabello.Desayune de manos de mi nana, me despedí y me fui rumbo al colegio iba muy tranquilo, pero en el semáforo en rojo sentí de nuevo una mirada que me hacía erizar mi nuca, mire a mi derecha y estaba al volante un hombre muy serio, pero conocido cuando mire en el asiento de atrás vi sonriendo y tirándome besos volados la alumna Dianne Carter y del asiento del pasajero también sentí una mirada curiosa y creo que era la madre que me sonreía mientras observaba a su hija sin decirle nada solo sonreía, desvié mi mirada al frente porque est
La primera hora me tocaba con sexto curso, qué genial, empezaría con ella, al entrar me percaté que no estaba sentada allí, así que empecé a tomar lista, cuando llegue a su nombre—Dianne Carter —nadie contesto y seguí antes de decir el último nombre, ella llegó y entro sin saludar y sin mi permiso para sentarse, le agarre del brazo, me miro enojada y cite—Señorita Dianne salga, toque la puerta, salude y pida permiso para entrarMe miró y se carcajeó fuerte y soltó en forma burlona—Mis padres son dueños de este colegio y es mío también, así que puedo entrar cuando me venga en gana —la deje terminar de hablar y la jalé fuera del aula diciendo—Sus padres son dueños de este colegio, usted no lo es, además debe saludar a su profesor cuando lo ve, es por educación y tercero llego tarde, así que usted no entra a mi clase, está expulsada —entre y cerré la puerta con seguro, afuera se escuchaban sus gritos—Ábrame la puerta profersorcillo de miércoles, este colegio es míoooo, ábrameeee idi
Salí del colegio y se me ocurrió visitar al padre de la revoltosa, me dirigí hacia la clínica, tenía la dirección, deje el auto en el estacionamiento subí en el ascensor al abrirse me gusto el ambiente elegante dándole el toque del porqué son la mejor clínica del país, llegue a información y pregunte por el doctor Adam Carter, la chica me dijo donde estaba el consultorio y fui para allá, antes de llegar lo vi salir riéndose, sin embargo, al verme paso de largo solo saludando de la mano, eso me extraño lo seguí diciendo—Espere doctor Carter, soy el profesor de Dianne su hija —se dio vuelta y soltó una carcajada y expreso—Hola, soy Andrew Carter, hermano de Adam, Él está en el consultorio, disculpe la risa es que fue muy gracioso que me confundiera—Oh, es que son idénticos, cualquiera se confundiría —Me dio la mano, se despidió y se fue, yo camine hacia el consultorio y escuche gemidosMe quede parado afuera extrañado, eran gemidos, si eso era lo que escuche no estaba equivocado, pen