Sin embargo, el carácter despreocupado de Gala seguramente no sospecharía de Damián.

No es que esté tratando de sospechar de Damián, simplemente no quiero que mi buena amiga pase por lo mismo que yo, sufriendo la traición de un hombre, ese dolor devastador. No quiero que mi buena amiga lo experimente.

Damián seguía mirando su teléfono constantemente, escribiendo algo en la ventana de chat de vez en cuando, mientras Gala seguía charlando conmigo sin prestar atención a las acciones de Damián. Pero yo estaba observando sus movimientos todo el tiempo.

A mitad de la cena, Damián excusándose diciendo que tenía que ir al baño, se llevó el teléfono consigo y se dirigió hacia allá.

Cuando lo vi apresurarse hacia el baño con un rostro nervioso, me hizo sospechar aún más. Tenía la sensación de que este tal Damián no era tan honesto como parecía.

Gala seguía comiendo despreocupadamente, sin notar la inquietud de Damián.

—Gala, ¿cómo te trata tu novio normalmente? ¿Cuánto lo conoces?— le pregunté e