Capítulo 75. Una mala nocheNarra Alondra Ferreyra PérezEse día llegué solo a las últimas clases al Tec y me desconocí a mí misma, porque yo nunca hubiera faltado a ninguna clase y me importó más en ese momento arreglar las cosas con Daniel, más que ninguna otra cosa. Saliendo de clases, me sorprendí al verlo esperándome ahí en el estacionamiento, muy guapo y recargado en su camioneta.–Alondra, hermosa – Me abrazó – Tenía que verte, pasé la peor noche de mi vida. No podía creer que te hubiera perdido.Los dos habíamos pasado una noche terrible, no pude soportar que creyera que yo tenía algo con Axel, eso me había enfadado de mi amigo, por haberme besado de una forma que ninguno de los presentes en la fiesta se hubiera esperado y mucho menos imaginado.–Es que no me has perdido, Daniel – Me perdí en su aroma – Nunca me vas a perder, menos mal que ya te quedó claro que Axel y yo, no tenemos nada.Daniel, me interesaba demasiado y por eso le había pedido a Axel, que me ayudara con eso
Capítulo 76. En una nueva relaciónNarra Alondra Ferreyra PérezDaniel, hacía unas cosas que normalmente no hacían los demás chicos, ya que consideraban que eso había pasado de moda, pero no tenía nada de malo que algunos siguieran tratando a los demás con el debido respeto que se merecían, los mayores.–Hola, Daniel, que atento y amable eres – Carmen lo recibió muy amablemente – Siéntate por favor, ¿Quieres quedarte a comer?Se notaba que a Daniel, lo habían criado a la antigua, y eso veía que le agradaba a Carmen, él era demasiado respetuoso, con todos, me había dado cuenta de eso, siempre se dirigía con mucho respeto hacia los demás.–Sí, me invita claro que sí.Desde luego que lo estaba invitando, era para que nos quedáramos los dos a comer, se iba a quedar fascinado con lo que había preparado esta vez Carmen, él ya había disfrutado de la buena comida de mi mamá, porque cada comida es diferente.–Hola, hijita, ¿Todo bien? No sabía que tu tío te había dado el día en el taller – Dij
Capítulo 77. Una dura verdadNarra David De María RamírezMi vida seguía encaminándose al precipicio con más y más fuerza cada día, yo no podía salir adelante sin Alondra. Todo lugar me la recordaba, todo Madrid y cada parte de mí, añoraba a mi consentida a esa mujer que lo era y que lo seguiría siendo todo para mí. Yo seguía con mis estudios y saliendo de juerga con mi colega, lo cierto era que ya enrollarme con alguien significaba para mí, alucinar y creer que estoy con ella.–Colega, no puedes seguir así – Sabadelle se sentía desesperado – Han pasado ya 3 meses y no puedo creer que no puedas superarla, me parece que ya es demasiado, solo suéltala.Algo que aunque no lo creyera era lo que estaba pasando, ella seguía aquí en mi pecho como si no se hubiera ido, podían pasar los días y los meses, ya no había remedio, aquí seguiría por siempre. Por más que yo me la quisiera sacar del sistema, ella permanecía como si nada, esa era la realidad de mi existencia.–No, no puedo y para que me
Capítulo 78. Una decisión muy apresuradaNarra David De María Ramírez–Lo conozco, hijo, es un chico un poco más grande que ustedes, pero es bastante atento y agradable y se nota que la quiere y que quiere intentar algo bien con ella.Esas palabras dichas por mi madre, fueron como dagas al rojo vivo entrando en mi corazón, no podía ser justo que ella ya estuviera rehaciendo su vida, mientras yo la estaba pasando tan mal, me estaba arrancando una parte vital de mi ser.–Eso no puede ser madre, ella no puede y no debe estar con nadie – Grité como loco – Alondra siempre tiene que ser mía, ella me pertenecerá para toda la vida.Quería salir corriendo a alejarla de ese tal Daniel y me dolía que mi madre aprobara esa relación, cuando Alondra era solo mía y nadie más, estaba que me llevaba el demonio, eso no me lo podía estar haciendo ella Alondra, me amaba solo a mí, así como la amaba yo, solo a ella.–No hijo y siento ser yo, la que te obligue esta vez a que pongas tus pies sobre la tierra
Capítulo 79. Nuevos amigos, nuevos planesNarra Alondra Ferreyra PérezEsa semana se me hizo muy larga, pensando que el fin de semana iría con mi guapísimo Daniel a Ciudad de México, habíamos quedado viajar el viernes por la noche para aprovechar allá, la totalidad del fin de semana. Simone y Nacho se nos pegaron a ir y eso era mejor, así Nacho, iba a conducir y yo podía irme plácidamente todo el camino en los brazos de mi Batman. Él llegó por mí al taller y me acompañó por mis cosas a casa de Carmen y también pasé a despedirme de ella.–Mamá, ya me iré con Daniel – Abracé a Carmen – Yo te aviso cuando llegue a Ciudad de México.Estaba feliz porque todo me estaba saliendo bien por una vez en la vida, era lo que debió haber pasado siempre, con Daniel, me sentía segura de mí misma, vivía mi vida a plenitud, como debía ser, él sacaba la mejor parte de mí. Donde mi lado pesimista se hacía a un lado y todo lo veía de una manera positiva.–No se preocupe por Alondra, señora Carmen – Dijo Da
Capítulo 80. Una aventura por disfrutarNarra Alondra Ferreyra PérezMe dio la pastilla y la botella con agua, para que me pudiera empezar a sentir bien, esta eran los detalles que me hacían querer estar todo el tiempo con él, era el hombre ideal, estaba hecho para mí y dichosa de tenerlo a mi lado.–Y tú también, me encantas más a mí.Me tomé la pastilla y poco a poco, mientras platicaba con Daniel, sentía como me empezó a dar sueño demasiado rápido, lo que agradecía. Necesitaba dormir para poder, descansar y sentirme mejor y para evitar devolver el estómago por el mareo que me provocaba ir en la carretera.–Alondra, duerme preciosa. Yo cuidaré tu sueño.Fue lo último que escuché que me dijo mi Batman y después, sentí sus labios y sus manos acariciando mi cara, con mucha ternura y también con amor. Nadie había sido además de David, así de lindo y de delicado conmigo. Mi Batman me besó en los labios muy tiernamente y yo abrí los míos para perderme con él, sin saber si era un sueño o e
Capítulo 81. Una noche de juerga, parte 1Narra David De María RamírezSabadelle y yo andábamos esa noche en la fiesta de la vida nocturna de Madrid. Mi colega montó un bar en su piso e invitamos a muchas personas, entre ellas a mujeres hermosas que eran amigas en común con ambos. Jovana llegó al piso como era de esperarse y yo desee que no hubiera nuevamente un problema entre ella y yo.–Hola, De María, aunque no lo creas me da mucho gusto volver a verte – Me dijo Jovana – Vamos por unos shots.No tenía ningún mal rollo contra ella, solo que no viniera en mal plan, yo estaba tranquilo y no quería problemas con nadie, además ella me caía muy bien, y también me daba gusto que estuviera aquí esta noche para que acompañara a mi colega, aunque mujeres nunca le faltaban.–Hola, Jovana, a mí también me da mucho gusto volver a verte y sí, vamos por unos shots, es lo que ambos estamos necesitando.La noche se veía qué traía buena marcha, así que nos tomaríamos esos shots, que la gente estaba
Capítulo 82. Una noche de juerga, parte 2Narra David De María Ramírez–Tú también, me has gustado a mí. Vamos por unos tragos, necesito mojar esta garganta.Me puse de pie y tomé de la mano a Claudia, nos fuimos a la barra y el barman nos dio unos tragos. No podía creer que por Alondra yo me hubiera perdido de todas estas bellezas, como Claudia. Ella era bellísima, morena, de cabello ondulado y de un cuerpo de infarto, casi de mi altura y muy agradable, me pregunté en ese momento si ella, era o es una mujer más de Sabadelle.–David, creo que no nos conocimos de la forma correcta – Ella se mordió el labio sensualmente, de forma muy provocativa – Las presentaciones ahora, ya son más personales.Veía la coquetería en sus ojos y en toda su expresión corporal, ella se había acercado a mí por algo y yo sabía a qué se había acercado, quería lo que todos quieren en estos tiempos, sexo sin ataduras, ya nadie tenía a una sola pareja, eso era cosa del pasado, ya nadie quería estar en una relaci