Capítulo 56
Un escalofrío mortífero recorrió mi espina dorsal al escuchar a Liliana confesar que tiene un hijo adolescente. Mis manos tomaron con fuerza mi pecho, mientras que la mano que sostenía la muñeca de Dara terminó a un costado de mi cadera. Un ligero sudor se apoderó de mi frente, y cuando vi a mi ex novia sonreír, forcé también una sonrisa.
—¿Estás bien, amor?
Mi futura esposa preguntó, y no supe que decir, me sentía completamente confundido.
—Yo... —Carraspeé con fuerza la garganta, y de este modo aclarar mis pensamientos, —claro que lo estoy, ¿Por qué la pregunta?
—Estás pálido… —La española intentó tocar mi rostro, aunque la detuve antes de que lo hiciera. Sus ojos se posaron en Liliana, y luego en mí
Capítulo 59Dara SmirnovPuedo sentir como la bilis comienza a subir por mi garganta, y un mareo repentino se hace presente dejándome sin aliento. Dora trata de detenerme, su mano toma la mía, pero me zafo de ella tan rápido que le es casi imposible a la anciana mujer seguirme el paso.Con desespero busco las llaves de mi coche dentro de mi bolso, y una vez que la encuentro entro al vehículo acelerando el paso lejos del edificio en donde mi prometido vive. Mis manos aprietan con vehemencia el volante del carro, todo a mi alrededor se siente tan extraño. Tan alejo a mí.—Cálmate… Cálmate, Dara… Eres una jodida Smirnov… Eres la nieta de Miguel Smirnov…Mi pulso está demasiado acelerado, puedo sentir como pierdo el control de todo, y debo parquearme a un costado de la calle cuando un camión casi me arrebata la vida. Mi teléfono comienza a sonar mostrándome el nombre de mi padre, así que lo guardo dentro de mi bolso porque lo último que quiero ahora mismo es iniciar una nueva guerra.Lueg
Capítulo 58Sergei RussoSalgo de mi cama sin hacer ruido con la intención de que Dara no se despierte, y note que me he ido de casa. Son casi las seis de la mañana, y ver su pequeña silueta despertando a mi lado es una gran bendición para mí. Estoy deseando tanto hacerla mi esposa, y dueña de todo mi imperio, y para eso necesito saber la verdad por parte de Liliana.En silencio me visto casi tan rápido como el sol comienza a posarse de nuevo en el cielo, mi ama de llaves me ve salir de mi habitación, y le hago una seña para que guarde mi secreto, pero, sobre todo, para que por nada del mundo le diga a mi futura mujer en donde estoy.—¿Qué quiere que le diga a la señorita?—Dile que estoy en la empresa…—¿Eso es todo?Dora me da mi maletín.—Ella no puede ir a la empresa, debes evitarlo.La anciana me fulmina con la mirada.—No eres ese tipo de hombres, Sergei, te crie, y sé que no serías capaz de serle infiel…Le hice una seña con la mano para que no continuara hablando, ¡Por supuest
Capítulo 57Dara SmirnovMi corazón late tan rápido que me es imposible respirar, reviso rápidamente mi mano al notar el enorme diamante que reposa tranquilamente sobre mi dedo. He aceptado al amor de mi vida, he aceptado ser su esposa, y las ganas de llorar me hacen presentes, mientras que mi cabeza reposa sobre su pecho. Mis manos se aferran a él, al único hombre que he amado de verdad y la felicidad desborda tanto de mi cuerpo que comienzo a sentirme débil ante él.De repente sus manos se instalan sobre mis hombros, y en un movimiento casi brusco me separa de su lado. Sus ojos están idos, como si las ganas de irse de aquí lo obligaran a alejarme de su presencia. Trato de sonreír por un momento, tal vez el auge del momento nos ha puesto nerviosos a todos, pero al verlo revisar su móvil sé que algo no está bien.—¡Felicidades!Grita, papá al acercarse a nosotros, Sergei medio sonríe casi obligado, así que intento disimular el incomodo momento. Un nudo se forma en mi garganta, pero ve
Capítulo 60Sergei Russo—Quítate la falda, y convénceme primero de no matar a ese hijo de puta…—Fue lo primero que le dije cuando los celos tocaron mi sistema. Podía sentir como mis manos temblaban con solo la idea de verla con otro. Mi corazón comenzó a latir con demasiada fuerza, mientras que un escalofrío me recorrió la espina dorsal con el hecho de perderla.—¡No me voy a quitar nada!Ella demandó, y bajé la cabeza, lo comprendía, el secreto que estaba guardado lo estaba jodiendo todo. —Tengo algo que decirte…—¡¿Me pusiste los cuernos?!Preguntó alterada, y no supe que responder.—¡Joder, Sergei Russo! ¿Me pusiste los cuernos con Liliana?Apreté el volante de mi coche porque las palabras no querían salir de mi boca, si bien. —No…—Mierda… Mierda… ¡Me asustaste!Apreté mi labio inferior, entre tanto mis pestañas no dejaban de parpadear con rudeza. Debía decírselo ahora. Debía tomar este camino si quería que mi relación con Dara fuera para siempre como lo deseaba.—Te mentí en alg
Capítulo 61Han pasado casi cuatro semanas desde que Liliana abandonó el país.Han pasado casi cuatro semanas en donde Sergei y yo pudimos arreglar nuestras fallas, y seguir adelante con nuestros deseos de casarnos. Mi madre entra en la habitación en donde me están maquillando para mi boda. Siento un nudo en la garganta porque tuvimos que atravesar por demasiadas cosas para llegar hasta este sitio. Hasta culminar nuestro amor.—¡Te ves preciosa!Grita mamá a punto de llorar.—¡Sí lloras yo lloro!Dicto, abanicándome el rostro.—Sergei está nerviosa, está con tu padre en la otra habitación.—¿Se ve guapo?—¿Tú que crees?Bajo la cabeza para sonreír.—¿Cómo le hiciste para durar tanto tiempo con papá y siempre amarse?Mi madre desvía la mirada, para luego volverme a ver, se le notaba la nostalgia en sus ojos. —El amor, hija, el amor todo lo cura, todo lo vence, todo lo puede…—Tengo miedo…Siento sus brazos alrededor mío, y me calmo y poco.—Es normal sentir miedo el día de tu boda—, Mía
PRÓLOGO Mi teléfono no deja de sonar desde que salí del apartamento que me regaló el abuelo Miguel en Blue Sky. Seco mi frente con un pañuelo de papel que saco de la cartera de colección que sostengo en una de mis manos. Mi hermana Sandara me queda viendo para que me apresure ya que por mi culpa ambas vamos tarde a la reunión de accionistas de la empresa de la familia. Le pido a mi chófer que maneje lo más rápido posible ya que no me quiero topar con papá si llegado al caso nos ve llegando con retraso a las oficinas de Techology Inc. En pocas palabras no sé cómo mi madre se lo ha aguantado por tanto tiempo siendo el hombre que me dio la vida, demasiado posesivo y celópata. Acomodo mi cabello a un lado y lo alboroto para así no parecerme a la sosa de mi hermana gemela, lo sé, lo sé, es un chiste interno. Bajo el portafolio dónde llevo toda la información requerida para el día de hoy y me detengo al sentir de nuevo ese ligero mareo que termina moviéndome todo y no me permite avanzar.
CAPÍTULO 01 ¡Mierda! ¡Papá me va a matar! Tiro de mi cama a Maya y brinco hacia al suelo jalándome el cabello al ver a un montón de pendejos ebrios en el piso de mi habitación. Empiezo a gritarles que se vayan antes de que Akim o Miguel lleguen a Blue Sky y sea la primera Smirnov desheredada de la historia. Sandara viene caminando como si nada hubiese pasado desde la cocina hacia la sala y abre los ojos al verme en este estado deplorable. ¡Nos hemos pasado de ostias con la fiesta de anoche! Mamá nos tiene prohibido usar cualquier propiedad de la familia para estas cosas, ya que, para la sociedad, aún estando en la boca de todos por ser nieta de un ex mafioso peligroso y sádico como el abuelo, también tengo un compromiso matrimonial con Liam Nornan, el hijo del primer ministro de defensa de España con el cual tengo una relación desde hace tres años aproximadamente y dar un mal ejemplo nos dejaría en mal visto a todos. Conocí a Liam de casualidad en una cafetería de la ciudad, recue
CAPÍTULO 02 ¡Estoy en un abismo sin salida! Doy un disparo al tiro al blanco de color rojo y le atino, justo en el centro como desde un principio desde que llegué al campo de entrenamiento del abuelo Miguel. He estado de un genio que ni yo misma me soporto y creo que los estúpidos medicamentos que me recetó mi psiquiatra ya no me están ayudando. Tengo tanta ira conmigo misma que vacío el cartucho del arma y los proyectiles salen disparados uno tras de otro sin cesar. Vuelvo a cargar el revolver para volver a desahogar mi frustración. He sido el hazme reír de toda Europa por culpa de Liam Nornan. He querido ir a cortarle los huevos con mis propias manos, pero papá me amenazó con mandarme al psiquiátrico de Suiza si llego a cometer un delito de esa magnitud y si fuese por mí, ya ese tipejo ni existiría. Me tiro en el suelo y bebo un poco del botellón de agua que uno de los asistentes de este lugar me han traído. El calor en Barcelona hoy está insoportable y el sudor baja por mi fre