Continúa metiéndome los dedos, mientras veo cómo sus pantalones se aprietan cada vez más, queriendo liberar su grandioso pene. Empezó a dibujar círculos con sus dedos dentro de mí y yo no puedo aguantarlo más, estoy tan mojada que decido parar esto y dirigirme al baño para calmar la calentura, si no lo hacía, iba a montarme sobre él sin importar la cantidad de gente que había en el lugar.Bastó con entrar al baño cuando siento que cierran la puerta con pestillo, me doy vuelta y veo que es Diego, imponente, grande, se veía tan jodidamente delicioso. Toma mi cintura con fuerza y me sienta en el lavamanos, comenzó a besarme con frenesí, agarró mi cabeza firmemente, como si me fuera a escapar de esos labios, de esa lengua que me quema con cada beso salvaje y profundo.Mientras hacíamos eso, bajé el cierre de su pantalón y por su parte, él acaricia mis piernas recorriendo mis muslos hasta subir mi vestido por completo. Desliza la parte superior de mi vestido para liberar mis senos y se aga
Regreso a la mesa donde cenamos y ya había pagado la cuenta, me toma de la mano y me da un tierno beso en los labios.- ¿Vamos a dar un paseo por la playa? – pregunta.- Sí claro, como rechazar una invitación tan romántica– bromeo.Después de dejar una suculenta propina en la mesa, salimos del restaurante, cruzamos la calle y nos sentamos en uno de los asientos que están en la vereda antes de ingresar a la arena. Nos quitamos los zapatos y nos adentramos a la playa, la noche esta estrellada, la luna ilumina y dibuja un precioso camino en el mar, el sonido de las olas y la suave brisa acompañan nuestros pasos. Lo bueno de La Serena es que no hace ni frio ni calor en estas fechas, por lo que es muy agradable el paseo.- Sentémonos aquí – señala Diego.Se quita su chaqueta y la dobla como una almohada donde nuestras cabezas se apoyan juntas para poder observar las estrellas. Por varios minutos estuvimos en silencio, toma mi mano y entrelaza sus dedos con los míos, con su pulgar acaricia
Un día antes del partido, los futbolistas, los asistentes y los encargados de prensa nos alojamos en el hotel que está cerca del Faro monumental de La Serena, un gran edificio con preciosas habitaciones con vista al mar. Llegamos a eso de las nueve de la mañana para alistar uno de los salones ya que el DT va a dar una conferencia previa al clásico entre Club Deportes La Serena y Coquimbo Unido.Muchos barristas se aproximaron a las afueras del hotel para alentar al equipo. Suenan bombos, cae polvo de extintores color rojo y blanco y se escuchan los canticos de los hinchas alentando a los jugadores. Debido a la cantidad de asistentes, se pidió apoyo a la policía para que cuidara de los hinchas y nada malo les ocurriera mientras estén reunidos allí.-Mario, reúne a los muchachos para que salgan a saludar a su gente, Andrea, sube historias a redes sociales con lo que va a ocurrir - ordena Marcelo.Los jugadores salen a saludar a las vallas papales instaladas en el ingreso. Cris se acerca
Ha llegado el día del encuentro y hay muchas expectativas, ambos equipos están en la parte alta de la tabla de posiciones y venían de ganar los partidos anteriores, por lo que definitivamente iba a ser un juego emocionante.Aquí estoy, en medio de la cancha con el buzo oficial de CDLS que me identifica como una más del equipo. Alzo la vista hacia los miles de hinchas que llegaron a ver el partido. Me siento tan pequeña dentro del campo de juego, con toda esa algarabía, la tribuna teñida de granate y aurinegro, me sorprende ver toda esa hinchada, toda esa gente gritando por los jugadores. Impresionante es escuchar los bombos que hacen retumbar mi corazón, canticos que inician en una esquina del estadio y llegan al otro extremo, todos al unísono, y como quien sube el volumen a la tv, más y más hinchas se suman al coro llenando el estadio con gritos a todo pulmón. Extintores se activaban y rollos de papeles caen desde galería a cancha, ¡ahora entiendo todo!, ¿cómo era posible que estos
Durante todo el resto de la jornada estuve muy preocupada, siento que debo estar con mi amigo. Le pido permiso a Marcelo para irme unos minutos antes para saber su estado.-Andrea, vámonos juntos, tengo que hablar con el doctor y darles el reporte a los medios sobre el estado de salud de Cristian – indica mi jefe.Llegamos a la clínica, gran cantidad de prensa se encuentra esperando en el acceso a urgencia. Apenas los periodistas nos ven se aproximan hacia nosotros para consultar sobre el estado de salud de Cristian.- Buenas tardes, estamos a la espera del reporte que nos entregará el doctor, apenas tengamos más novedades les avisaremos – declara Marcelo.Ingresamos al interior, mi jefe va en búsqueda de alguna enfermera que nos pueda dar más información sobre Cris. Una de ellas nos indica que se encuentra estable.- Ya suturamos su herida, acaba de salir del scanner y estamos a la espera de los resultados.- ¿Puede recibir visitas? – pregunto.- Esta dormido, pero puede pasar a verl
Dos días después del accidente Cris es dado de alta, con la señora María fuimos a buscarlo y lo acompañamos hasta su domicilio. Es primera vez que veo su departamento, es muy minimalista y ordenado con paredes de color blanco marfil, muebles de madera estilo rústico, ¡es un lugar muy acogedor!- Bueno chicos los dejo, tengo que volver a la casa, mis animalitos me esperan – nos avisa la señora María.- Gracias mamita, te amo, muchas gracias por todo – dice Cris y la besa en la frente.- Andrea, cuídamelo mucho, no lo dejes solo hoy – me cierra un ojo.- ¡Mamá! – replica Cristian.- No se preocupe, yo se lo cuido – la abrazo con fuerza.Cuando su madre se retira y cierra la puerta, siento un extraño cosquilleo en el estómago, estoy con una sensación de nerviosismo difícil de explicar, recordé lo que me había dicho aquel día cuando estaba bajo los efectos de los medicamentos. Lo llevo hacia su dormitorio y lo recuesto en la cama, me coge por la cintura y me tira a la cama con él.- ¿Eres
Camino a casa voy pensando muchas cosas, mis sentimientos por Diego y mis sentimientos por Cristian, pasar tiempo con mi amigo siempre es maravilloso, pero ¿sólo es mi amigo? ¿Acaso él siente algo por mí? Aun me queda dando vueltas lo que me dijo en la clínica y que no me atreví a volver a preguntarle., ¿acaso yo siento algo diferente? Es mi amigo, es más joven que yo, es tan bueno y moral y no merezco alguien tan perfecto…. ¡Pero que estoy pensando! Estoy buscando excusas para no sentir nada. De pronto mi teléfono suena, lo saco de mi bolsillo y veo que es Antonia.- Hola hermosa - contesto- Perra maldita ¿dónde estás ahora? - responde con una voz extraña.- Saliendo de la casa de Cris, ¿dónde estás tu? ¿Estas bien? - digo preocupada.- ¿Cómo está el? mándale mis saludos… Hey Andy, ven al carrete en el departamento de Marco, estamos todos aquí Celebrando – me invita Anto.- No gracias, sólo quiero ir a dormir – respondo.- Esta Diego, me ha preguntado por ti ya que no le contestas e
Me acerco a la puerta y Carlos Huerta me detiene, estira su brazo y me ofrece un trago antes de irme, lo acepto sin preguntar ni siquiera qué es, aunque por su aspecto debe ser algo con frutos rojos. Bueno, con tal de deshacerme de él soy capaz de beberme el mar mismo y conociendo a estos tipos, si lo rechazo va a seguir insistiendo y tengo prisa por salir de allí. Diego me mira con curiosidad al otro lado del living, Carlos me toma del brazo y me lleva nuevamente donde él, quiero irme, pero el trago hizo efectos en mi rápidamente, no tolero mucho el alcohol, así que mi ánimo empezó a cambiar y decidí quedarme un tiempo más.Carlos intenta conversar conmigo de cualquier tema, pero yo lo ignoro por completo, aunque debo admitir que es un chico muy atractivo, sus rasgos son exquisitos, su pelo con rulos bien definidos, moreno, se nota bien tonificado, sin embargo, no causa nada en mí, además lo detesto y sólo quiero que se aburra para que se vaya a otro lado. Diego le susurra algo en e