—Muy bien, señorita, bienvenida a mi dulce y pequeña casa —Me recibió Olivia en cuanto abrió la puerta de su hogar.Me pareció una linda entrada, llena de flores y arbustos bien podados. Eric me acompañaba, pues se aseguraba de que yo llegara a salvo y sin ningún inconveniente.Él tenía planeado ir a un árcade con Jeanniel para revivir los viejos tiempos, tal vez tomarían un poco, pero sería un agradable rato entre colegas que consideraba una buena despedida de soltero.—Cuídala, y no le metas tantas cosas a la cabeza, Olivia —pidió el castaño, con las manos en los bolsillos.—Ay, que poca confianza me tienes —reprochó ella—. Solo tendremos una agradable noche de chicas. Hay alguien a quien quiero presentarle.—De acuerdo, yo me despido —resopló mi hombre, dándome un corto beso en los labios—. Diviértete.—Tú también, mándale saludos a Jeanniel de mi parte —respondí.Eric se marchó, dejándome sola en la entrada de la vivienda de Olivia. La pelirroja me veía con una emoción indescripti
—Nicole Díaz, después de revisar las pruebas proporcionadas, escuchado los testimonios de los afectados y su defensa propia, se le ha encontrado culpable de los delitos de robo, difamación, incumplimiento de una orden de alejamiento, falsificación de identidad y acusación falsa. Estos son delitos graves que han causado un daño significativo a las partes afectadas. ¿Tiene algo que decir antes de que dicte la sentencia? —dictaminó el juez, mirando a la culpable.Estábamos en el juicio de Nicole, la cual estaba vestida con el traje de prisionero... Me sentí un poco mal por ella, también estaba esposada y la acompañaba su abogado, no pudo hacer mucho por ella, por más que lo intentó, tenía todo en su contra.Aunque actuó con profesionalismo.—¡Eso es mentira! Todo ha sido manipulado. ¡Soy inocente! No pueden hacerme esto, ¡es una conspiración en mi contra! —exclamó la pelinegra, presa del miedo por lo que le esperaba—. ¡No! ¡No acepto esta situación! ¡No pueden encerrarme! ¡Tengo derechos
Estaba viendo las noticias en mi celular, no paraban de hablar del heroísmo de Eric por encontrar a un criminal dentro de su empresa.Aunque también tenía sus haters, diciendo que en primer lugar no debió de haber dejado entrar a Nicole. Pero más eran las personas que lo apoyaban por ser la estrella del momento de Jax Brown.La noticia se viralizó, Eric prefirió que fuera así porque eso le daría más popularidad a la hora de subir en el ranking. Los posicionamientos los anunciaban justo una semana después de la boda, solo faltaban dos días para el gran evento.—¿Le escribes a alguien más? Veo que le estás sonriendo mucho al celular —soltó Eric, con un tono pícaro.Yo estaba sentada frente a él, con el escritorio de por medio. Había terminado los mandados que me ordenó y tenía unos minutos libres mientras él escribía unos informes para Jax, los cuales yo debía revisar antes de enviarlos...Era un trabajo duro que afectaba mi visión, estaba pensando en usar lentes.—Suenas un poco celosi
El gran día había llegado, no faltaban muchas horas para llevar a cabo la ceremonia de bodas y ya yo había salido del estilista que me hizo tanto el peinado como el maquillaje.Dos pájaros de un tiro.—Quedaste fue preciosa, ya me imagino la cara que pondrá Eric cuando te vea —alegó Olivia.La mujer era mi acompañante, íbamos de camino a casa de mis padres porque papá me llevaría en su auto al fortín en donde se llevaría a cabo la boda.Pero antes tenía que vestirme y contaba con la ayuda de Olivia para ayudarme con el vestido, así se aseguraba de que todo estuviera en orden.—Gracias, tú también te ves hermosa —respondí.Ella también aprovechó de maquillarse, aunque llevaba su cabello suelto y hecho rulos.—La novia es la que tiene que brillar hoy, así que si llego a ver a otra mujer vestida de blanco o con un maquillaje extravagante, prometo sacarla —dictaminó, decidida en sus palabras.—Tranquila, no creo que haga falta —reí con nervios.—Lástima que no irán todos los empleados de
Mi cara estaba cubierta con la tela transparente que formaba parte de la cola. Solo la usaría por un pequeño período de tiempo, hasta que Eric me destapara.Quise que fuera así, habría más secretismo en cuanto a mi rostro. Me emocionaba.El ramo de flores iba en mis manos, era pequeño, pero Olivia decidió que sería más cómodo así.Tomé a papá del brazo, preparada para el gran día que tanto Eric había planeado para mí. Mi viejo tenía una enorme sonrisa, yo estaba satisfecha porque esta vez sí quiso llevarme al altar.Caminamos hasta la entrada, Olivia ya había entrado primero, junto a mamá ya que iban a avisar de que la novia había llegado. De pronto, en cuanto pisamos la entrada, la banda sonora empezó a sonar.La melodía que solían poner en las bodas invadió mis oídos, esa donde las trompetas eran lo que más se escuchaba. Me sentí plena, lista para disfrutar de esa tarde.No faltaba mucho para la puesta de sol, Eric me había comentado que la vista era maravillosa, la mejor.—Siempre
—Mucha felicidad y prosperidad para ambos, estaremos siempre que nos necesites, Ximena —habló mamá, sosteniendo mi mano.Las fotos habían sido tomadas y estábamos preparándonos para el baile, Olivia se había encargado de contratar a unas personas que pondrían una pista improvisada.—Gracias, mamá, papá, por acompañarme en este momento tan especial para mí —respondí, mirándolos a ambos.Eric estaba junto a mí, orgulloso del evento que había planeado con la ayuda de nuestra colega. Jeanniel y su mujer no tardaron en llegar a nuestra posición.—Nosotros iremos a sentarnos, estos tacones me matan los pies muy rápido —expresó mamá, con ternura.Mis progenitores se fueron, como la mayoría de invitados que ya estaban sentados en las mesas donde se llevaría a cabo el banquete, lugar en donde se podría presenciar tanto el baile como el atardecer de la zona.Y es que Eric planeó todo meticulosamente, porque bailar con el atardecer de fondo iba a hacer el momento mucho más especial y único, sobr
Eric no preguntó por lo que pasó entre su madre y yo, igual planeaba decírselo después, con más calma le mostraría la carta también.Regresé a la mesa. Mi padre se levantó para hacer sonar una copa y llamar la atención de todos los presentes. Era hora del brindis y cada bebida estaba preparada para ello, no me di cuenta de que lo hicieron mientras me alejé.—Atención, por favor. Me gustaría decir algunas palabras —proclamó mi padre, viéndose elocuente—. Me gustaría recordar que las diferencias entre las palabras y los hechos son abismales. Por eso es importante aprender que hay personas que te ofrecen las estrellas y otras te llevan a ellas. ¡Es un claro ejemplo sobre la diferencia de quien quiere y quien ama! —expresó—. Hoy agradecemos de estar presentes en este importante momento que comparten Ximena y Eric Watson. Así que, brindo por ellos y por su amor.Papá alzó la copa con la bebida, el resto hizo lo mismo, procurando chocar la mayor cantidad para llevar a cabo el brindis. Sonre
—Es emocionante haber visto la primera ecografía ¿No creen? Recuerdo cuando vimos a nuestra pequeña Liz por primera vez —comentó Jeanniel, haciéndose el dramático.Estábamos en casa, esperando que el programa de noticias iniciara, en donde sabríamos de qué puesto quedó Eric en el ranking. Eso le permitiría abrir su segunda compañía, lo cual lo tenía abrumado por saber si podría hacerlo o no, ya que tomaría un largo tiempo.Nos acompañaban Jeanniel, Amanda y Olivia. Por suerte, el sofá de la sala era lo bastante grande para abarcarnos a todos.—¿Ya escogiste un nombre? —cuestionó Olivia—. Pero Amanda, te sugerí que usaras el mío —se quejó.—No creo que a nuestra niña le guste ese nombre, sin ofender —reprochó Jeanniel.—¿De donde sacaste Liz? —inquirió Eric, curioso.—Me parece una agradable combinación de letras —Se excusó el moreno.—Es lindo, siento que es una manera de decir luz... Porque nuestra pequeña será la luz que ilumine nuestro camino —expresó Amanda, un poco apenada.—Ves,