Siento que se escuchan cornetas y que todo se ilumina con las palabras que ha dicho. Tantas evasivas, comentarios hirientes y miradas llenas de odio han dado el pago necesario para experimentar esto.
‘Soy feliz. Hemos avanzado grandemente con su respuesta.’ Me digo mentalmente.De inmediato, me arrodillo y miro al techo agradeciendo a Dios por esta bendición tan grande que causa que mi dolor y preocupación sean completamente parte del olvido.— Esto es magnífico, muchas gracias, Dios. Mi esposa finalmente ha aceptado. — digo inmensamente feliz.— Las personas se burlarán porque un jefe de la mafia está arrodillándose, agradeciendo a Dios.— Soy la creación de Dios, por eso, debo agradecer a mi creador siempre, Axael. Sobre todo, cuando me ha permitido escuchar unas palabras que tanto han costado. — digo y ella mueve un poco a la bebé.La enfermera ayuda a cNuestro tiempo pasa contando cosas agradables, mientras Axael observa a la bebé que escasamente se mueve en su lugar debido a la comodidad que experimenta, es por ello que sonrío feliz porque después de tanto hemos logrado ser una familia armoniosa que puede comunicarse bien.El tratamiento de Axael llega y el tiempo de visita termina, por lo que, debo tomar a la bebé que mi esposa no quiere soltar y la entiendo, yo no quiero separarme de mi hija y no la tuve en mi vientre durante ocho meses.‘Ojalá pudiera cambiar mi lugar con ella. Estaría bien que yo sea el enfermo y ella quien se quede con nuestra hija.’ Me digo mentalmente.— No quiero que se marche, yo no haré ruido si es ese el problema para que ella se quede. — dice Axael.— Desearía quedarme contigo y la bebé hasta que nos marchemos, pero, no es posible, estás en cuidados intensivos, necesitas cuidados m&a
Enloquecí, esa es la única palabra que puede describir lo que siento en estos momentos, porque se supone que mis escoltas están para evitar cualquier desgracia. Pero, la realidad es que estos bastardos se atrevieron a ignorar la seguridad de mi hija.— Tienen exactamente dos minutos para encontrar a todos los implicados y traerme las grabaciones desde el ingreso de la leche materna a este maldito lugar hasta que llegó a la boca de mi hija y les digo desde ya que quien esté dándome respuestas idiotas van a morir.— Sí, jefe. — dicen todos tanto en el mensaje en el grupo donde mandé la información como los que me escuchan porque están cerca de mí.— No me importa si la bebé estaba conmigo, ustedes debieron asegurarse de que todo estuviera bien con mi hija. Así que, prepárense, porque si alguien le hizo daño de forma intensional… morir&a
Quiero matar a la mujer que recibió la plata para hacerle daño a mi hija, pero, más daño pienso hacerle a Amelia, porque esa maldita mujer no tenía por qué meterse con mi familia. Si ella tenía algo en mi contra, debía hacerme daño a mí directamente.‘La mataré, sin duda, la mataré.’ Me digo mentalmente.— Entonces, quisiste matar a una bebé y ahora crees que voy a tolerar eso, ¿verdad?— No sabía que iba a matarla, por favor…— Sí, seguro.— Por favor, no me hagas daño. Yo no sabía que iba a matarla. Si no, no habría aceptado. — dice ella llorando.— Dijiste que ella te menciono que la llevaría a un lugar mejor, ¿No pensaste que ese lugar mejor sería la tumba?— ¡Le aseguro que no lo sabía!— Bien, hoy aprender&a
‘Por un demonio.’ Me digo mentalmente.Ni siquiera he salido de un problema, cuando ya estoy en otro y bastante grande que no sé cómo solucionar, porque si le digo que miento para matar a quien quiso hacerle daño a nuestra hija, probablemente sea peor.— Entonces envíame la ubicación e iré por ti. Espero que me hagas recordar lo bien que la pasábamos en la tina o por toda la casa. — dice Amelia.— Hablaremos después. — digo colgando la llamada.— ¿Podemos marcharnos o seguiré escuchando tu agradable conversación? — pregunta ella con seriedad.— Axael…— No quiero saber al respecto. — dice ella con frialdad.Miro a los chicos con molestia porque no me informaron que mi esposa estaba escuchando mi conversación muy comprometedora… una que acabará con la posibilidad de una vida pacifi
‘Debes soportarlo, eres el hombre. Necesitas hacer eso, Maximiliano.’ me digo mentalmente intentando calmarme.No puedo quejarme como un idiota cuando he sido el que menos se ha esforzado. Axael ha temido mucho, está muy enferma aun por eso, así que, debo perdonarla aunque no me pida disculpas y aclararlo todo.— Lo mejor es que lo hablemos en el avión. No puedo arriesgarme a perder al resto de mi familia, porque una loca está molesta conmigo. — respondo caminando hacia donde se encuentra mi hija.— Maximiliano…— Ahora no, padre. Estoy agotado de tanta mierda.— ¿Qué fue lo que sucedió? Quiero entenderte.Tensiono mi cuerpo, quería tanto desahogarme con mi padre, pero, el tiempo estaba en nuestra contra, necesitaba transportar a mi familia a un lugar seguro sin que Amelia se entere. Por eso, me enfoco en llevar a mi hija sin que noten ello y que no
Lo dije… lo que me prometí no decir y lidiar por mi cuenta, ahora ha sido contado porque mi boca no tuvo filtros para eso. Pero, ya no puedo llorar o temer por eso, no puedo hacer eso cuando Amelia está haciendo sus mierdas molestas.— Di algo, Axael. Porque si tus quejas me matan, tu silencio me atormenta al punto de querer morir.— Lo siento. — dice ella.— ¿Qué dices?— No sabía cómo pasaron las cosas, esto también es mi culpa. — dice ella limpiando sus mejillas con brusquedad.— Axael, no te digo esto para que también te culpes por eso, solo…— También debo proteger a la bebé, debí dudar sobre lo que me daban. Porque ella también es mi hija y yo debo compartir tus preocupaciones sobre su seguridad y todo lo demás.— No quise decir eso.Axael hace una señal para que me acerque
‘¿Cómo puede una mujer como Axael dudar de lo hermosa que es? ¿Acaso no se da cuenta que es un jodido ángel?’ me pregunto mentalmente.— Maximiliano…— ¿Por qué piensas eso, Axael? Nunca he mirado a otra mujer después de tenerte, no he follado con alguien además de ti, esposa.— No mientas, hace mucho que no follamos.— Porque hemos tenido muchas discusiones, miedos y demás, pero, no por falta de deseo.— Maximiliano, no necesitas mentirme, ve a lidiar con lo tuyo como lo has hecho siempre que yo seguiré cuidando de la bebé. — dice ella con frialdad.No dudo en demostrarle lo que hago para saciar mi necesidad, así que, cierro la puerta con seguro y agarro una silla para colocarme justo frente a ella y así tocar mi cuerpo, mientras ella me observa aturdida.— ¿Qué estás haciendo?
Estoy completamente excitado, por eso, aunque mi cabeza me dice que debo detenerme y enseñarle a mi mujer de una forma diferente que solo la quiero a ella, mi boca se pega a la intimidad de ella y succiona cada preciada parte que extrañaba saborear.— ¡Maximiliano! — exclama ella como si fuera algo vergonzoso.— Ni te atrevas a detenerme, porque tú fuiste quién me provocó. — le digo de inmediato.— Espera un momento.— He esperado durante meses por tantos malentendidos y decisiones de mierda que he tomado, ya no pienso esperar más cuando mi mujer me ha provocado así. — digo pegándome a ese exquisito coño mientras ella se retuerce del placer, porque aunque quiere fingir que no está lista, su intimidad que parece un rio que me dice que estaba esperándome hace mucho.Estamos locos, lo sé, acaba de salir del hospital y no fue porque