Kaia no podía creer que esa mujer se podía estar salvando de la demanda por estar hospitalizada. Era como si tuviera todo a su favor, pero a qué costo, ahora estaba en la misma o peor situación en la que había estado ella. En la vida todo se paga y le había llegado el turno a ella de pagar.— Chantal está hospitalizada porque le han detectado una malformación en el útero y eso está impidiendo que su bebé crezca, su útero no ha cambiado de forma desde que le confirmaron su embarazo. Lo más probable es que ese niño no llegue a lograrse.Vincenzo le comunicó a su esposa lo que él sabía hasta ese momento sobre el estado de Chantal. Aunque no lo alegraba lo que estaba pasando, sabía que ella se lo había buscado.— Lo siento en verdad, no pensé que la cosa fuera tan grave, aunque ella sea responsable de lo que me pudo haber pasado y a nuestro bebé, su hijo, no tiene la culpa de nada y tampoco le deseo nada malo, pero tarde o temprano tendrá que pagar por lo que nos ha causado.— Lo sé, mi a
Ya casi había pasado una semana y no se tenían noticias de Chantal, ni buenas, ni malas, simplemente estaban haciéndole muchas pruebas y un nuevo tratamiento. Nadie sabía lo que estaba pasando y el futuro tanto de esa mujer como de su embarazo era incierto.— ¿Tienes algo planeado para hoy?Vincenzo miraba a su mujer con adoración, quería poseerla en esos momentos, pero no sería nada agradable para ella, ya que estaba teniendo uno de esos días malos.Kaia sentía el estómago muy revuelto y un poco de mareo. Su cabeza también la sentía un poco pesada y se sentía muy abrumada en esos momentos.— No, estoy esperando que se me pase el malestar, espero que dentro de unas semanas ya no tener esos espantosos malestares. Dicen que loa primeros tres meses son los más difíciles y espero que sea así. La doctora también lo confirmó diciendo que ya estaba por salir de esa fase tan difícil.— Yo lo espero también, pues ya estamos cerca de las doce semanas, saldremos pronto del fatídico primer trimes
De repente la puerta se abrió sorprendiéndolos a los dos, Dafne y Giorgia, sin haberlo planeado, habían escuchado parte de la conversación entre Chantal y Hermes, oyendo la confesión de esta. Ambas se llevaron las manos a la cara sin poder dar crédito a lo que acababan de oír. Chantal de viva voz haciendo esa horrible confesión.— ¡No lo puedo creer, Chantal!Dafne no daba crédito a lo que habían escuchado sus oídos, esa confesión era la causa de que su nuera se hubiera puesto tan mal. Esta mujer no tenía escrúpulos, no tenía vergüenza y no tenía respeto por nadie.— Dime que no es verdad lo que acabamos de escuchar, eso ha sido muy grave de tu parte, Chantal. Pudiste haber causado una tragedia de mayores dimensiones. Es el colmo que hayas sido tan ruin para hacer lo que hiciste.Giorgia tampoco podía creer que su nuera haya sido capaz de haber hecho algo en contra de la esposa de Vincenzo. Por mucho que no fuera de su agrado, nada justifica la maldad y el deseo de querer llevarse con
Vincenzo y Kaia paseaban tomados de la mano en la plaza comercial, muchos que los reconocieron se daban cuenta de que en realidad la esposa del presidente del conglomerado más importante del país, era hermosa, que se había quitado ese horrible maquillaje dejando ver una piel libre de esas feas pecas. Lo que la hacía lucir aún más bella era que su estado de ánimo era de felicidad y de tranquilidad, ahora que sabía que su bebé estaba fuera de peligro y también el hecho de salir con su esposo como una enamorada pareja a buscar la ropa y accesorios para su bebé.— ¿Ya vieron de quién se trata? — Dijo una mujer cuando pasaron junto a su mesa.Como siempre las habladurías de la gente no se hicieron esperar y todos los ojos de las personas se estaban posando en ellos como era de esperarse, ella y su esposo a donde salían juntos siempre eran el foco de todas las miradas, juntos formaban una hermosa y distinguida pareja.— Desde luego que sí, el presidente del conglomerado Leonardi, está cami
La pareja había caminado en busca de los mejores atuendos para la salida del hospital, tanto para ella como para el bebé. Esa escapada les pareció muy relajante y beneficiosa para Kaia, había dejado de pensar en los otros problemas que tenían en puerta. Se le había olvidado por completo todo lo de Chantal y los días difíciles que pasaron cuando su estado de salud estaba muy delicado y el de su bebé por igual.— ¿Quieres comer al aire libre o adentro del restaurante? Quiero complacerte en todo y eso incluye que decidas en dónde quieres que nos sentemos.— Vamos a comer al aire libre, dejemos de ser tan acartonados. De vez en cuando es bueno que nos dé un poco de aire.— ¿Me estás diciendo que soy acartonado?El encargado los llevó a la parte del restaurante que estaba condicionada al aire libre. El lugar era muy agradable y se podía sentir el viento, pero no estaba muy fuerte, estaba demasiado agradable y se podía respirar el aire puro del paisaje. Vincenzo, antes de estar con Kaia no
Por otro lado, a Dafne le urgía llegar a su casa, no podía dejar que esa mujer se saliera con la suya, llamaría a su hijo y lo pondría sobre aviso, algo tenían que hacer al respecto. Chantal había actuado de una manera tan ruin y tan infame que no tenía perdón. Sintiéndolo mucho ella debía de pagar por lo que había hecho y para Gigi y para Dafne había sido muy duro darse cuenta de la verdad de la boca de ella misma, no tenía reparo en admitir el daño que había hecho y quiso maquillar todo en medio de sus lágrimas de cocodrilo.— Dafne, tenemos que tranquilizarnos un poco, no podemos llegar a nuestras casas en estas condiciones. No podemos armar un revuelo allá y menos ahora que Kaia apenas se encuentra estable y fuera de peligro. No podemos causar más daño del que ya le han hecho.Ambas tenían que calmarse un poco, no era bueno que al volver a casa de nuevo afectaran al matrimonio de Kaia y Vincenzo. Ellos ya habían pasado por mucho y ahora solo tenían que centrarse en ser felices, si
Maximus estaba seguro de lo que le iba a decir su esposa, pero no quería quitarle la intención diciéndole él que ya lo sabía. Quería que su esposa se desahogara porque se veía que lo que tenía guardado la estaba atormentando demasiado y tampoco quería que le hiciera daño guardarse las cosas, era mejor que sacara todo y él la escucharía con atención.— Ven, siéntate y cuéntame de que es lo que te has enterado. Por lo que puedo ver, no ha sido nada agradable y no quiero que te vayas a poner mal de salud.Dafne le contó a su esposo con lujo de detalles, todo lo que había ocurrido desde que ella y Gigi, habían escuchado la confesión de Chantal sobre su participación directa en lo que le había sucedido a Kaia. Maximus se sentía un poco culpable por no haber hablado antes con su esposa y así haberle podido evitar esta gran impresión, pero si no lo dijo fue porque Vincenzo lo pidió así.— Tenemos que llamar a Vincenzo para que se entere de todo esto. Esa mujer tiene que ir a la cárcel o que
Vincenzo recibió la llamada de su padre y acordaron que en cuanto ellos descansaran por un par de horas se podían presentar en el conglomerado. Él sabía más o menos el motivo para el cual los estaban requiriendo.— Mi amor, mis padres vendrán en unas dos horas, preguntaron cómo te encontrabas, así que vayamos a que descanses en lo que yo termino de revisar estos documentos. No quiero descuidar para nada, ningún aspecto relacionado con tu salud.— Está bien, mi amor, voy a tomar la siesta, aunque me hubiera gustado que te acostaras conmigo. Ha sido un día de lo más increíble el que hemos pasado juntos.Ella hubiera querido tomar esa siesta con su esposo y relajarse en sus brazos por un breve rato, pero por ahora eso no iba a poder ser posible y se tendría que dormir ella solamente. A veces desearía que su esposo no trabajara tanto y así podrían pasar más tiempo, juntos, pero por ahora así eran las cosas, aunque todo estaría a punto de cambiar con la llegada del bebé.— Estaré revisando