Kevin J.Cuando entramos en la villa esperábamos encontrar a nuestras prometidas atadas y maltratadas, el instinto asesino lo teníamos a flor de piel. Así para lo que no estábamos preparados era la escena que nos encontramos. Aunque a estas alturas debería estar acostumbrado a que mi mujer, me sorprendiera. Lo que vimos cuando llegamos a la zona de la piscina era increíble.Todos los guardaespaldas del padre de Emily e incluido el señor Taylor, se hallaban con las manos alzadas metidos en la piscina en la zona que hacían pie, mientras nuestras prometidas bebían mojitos en las hamacas, en vueltas en camisetas masculinas. -” ¡Hola, niño de mamá!”-, me saludo Miriam desde la hamaca como si estuviera pasando un día con sus amigas en la piscina.-” ¿Pero estas mujeres de donde han salido?”- oí que decía Keanu detrás de mí.Comprendí su incredulidad, esa mujer me hacía perder años de vida. Cuando se levantaron y caminaron hacia nosotros, sentí que me desmayaba.¿Cómo podía una camisa ma
Emily.Mientras esperaba me preparé con una ducha, la lencería, la colonia, el maquillaje, el champan y los taconazosMe imaginé que ese sería el aspecto de las mujeres que desean tener una noche de bodas especial con sus hombres, aunque para ser sincera, comenzaba a sentir un poco de miedo y nervosismo, ¿y si no estaba preparaba, y si cometía un error, y si no le gustaba sexualmente a un hombre tan experimentado como era Jason? Había muchos "y si no", y mi valor comenzó a flaquear, aunque no me dio tiempo a retírame o huir, ya la puerta se abrió de golpe y un hombre sudoroso, atractivo, vestido de esmoquin entró en la habitación, que tras colocar el cartel de "No molestar" en la puerta, la cerró con llave y me miró con deseo, sin perderse ni un solo detalle del atuendo que llevaba.-" ¿Tan pronto y huyendo, señora Graham? Eso no me deja en muy buen lugar, en mi papel de esposo." me dijo el acercándose muy despacio, mientras se iba despojando de la chaqueta y atacaba los botones de
Arianna.Abrí los ojos, sonreí, hoy era el día en que se oficiarían los compromisos, para que en un mes me casara con ese mandón de Keanu Powell, para ser sincera estaba deseándolo, cuanto antes esto terminara, Mi esposo, mis hermanos y yo podríamos comenzar a vivir nuestras vidas, sin preocuparnos que podría suceder a tanta gente que se puede ver afectada con estas bodas, además, si como decía Emy, tener sexo con el hombre que amas es tan maravilloso, bueno se puede decir, que me va encantar estar casada, pensé mientras me levantaba con una sonrisa pícara. Las semanas pasadas desde la boda de Emy y hasta este día, se había desarrollado, muy rápido, los herederos Powell, habían estado ocupados trabajando debido a que tenían que dejar todo preparado para poder cogerse dos semanas de luna de miel, cuando nos casáramos. No habíamos podido tener muchas citas, en ocasiones me aparecía por su despacho para simplemente besarlo, cosa que el me agradecía, dejándome deseando ir más allá, era un
AriannaCaminaba por el salón de eventos, con mi bandeja sobre una mano, sosteniendo las copas de champan mientras las ofrecía a los invitados, sonreía pensando, que al menos esta vez Elena nos había dado un uniforme adecuado, con unos zapatos cómodos, no como el evento anterior que habíamos hecho trabajo de azafatas, esa minifalda pantalón, y ese top ajustado que revelaba más que cubría, daba la sensación que lo que ofertábamos era nuestro cuerpo en vez de los servicios del gimnasio, y como colofón nos había subido a unos tacones, que eran armas de tortura para mujeres, en especial a alguien tan alto como yo, y tan poco experta en usar esos objetos castigadores de mujeres. Mire a Mirian, sonriendo a los invitados mientras ofrecía canapés en esas bandejas tan relucientes. Todo iba viento en popa, Elena estaría contenta por conseguir este evento de presentación, para inversores. Cristian corps, contrato a mi Amiga, porque yo se los recomendé. Es una pequeña empresa de informática. Ho
Arianna.Llegamos al aparcamiento, faltándonos el aliento, nos subimos al coche de Elena justo a tiempo de ver salir a varios hombres de negro, acompañados por los tres "pretendientes a esposos" que nos habían salido.-" No se tu Elena, pero ni de coña me dejo atrapar por esos dementes"- le dije recuperando el aliento, al sentarme y ponerme el cinturón en el asiento del copiloto.-" ¡Estos ricos están como cabras! Me da pena el señor Powell, ¿crees que se dio un golpe en la cabeza cuando se cayó en la terraza? "- pregunto Mirian desde atrás, mientras Elena salía rápido del aparcamiento, esquivando a nuestros perseguidores. -" No lo sé, lo único que sé, es que ni de coña me caso con nadie que yo no haya elegido, y menos participar en el juego macabro que a estos americanos les gusta hacer cuando se aburren."- aseguro Elena.Cuando llegué a casa, decidí olvidarme, de nuestra surrealista aventura de esta noche. Bastantes problemas tenían yo ahora para seguir pensando, en las formas macab
Arianna.Mire la hora mientras me dirigía a la parada del autobús, o guagua como decimos los canarios, aunque ahora como estábamos viviendo en la península... Estoy cansada, pero comparado con lo que llevan soportando mis amigas, estoy tranquila.Desde que el presidente de Powell S.L. Holding anuncio, hace dos semanas, que éramos el paso para que sus nietos heredaran su puesto, mis amigas han soportado el acoso de sus respectivos pretendientes. Al día siguiente del anuncio de Kevin Powell senior, Elena nos pasó la información de quien era esa familia y la influencia que tenían, nos quedamos impresionadas, pero no le dimos más importancia, hasta que Mirian comenzó a recibir regalos carísimos o visita inesperadas de la que, según decía ella, era su "futura suegra," en su trabajo, en su casa...Los regalos los devolvía inmediatamente con una nota "muy explícita", la última fue la que más me gusto."Mira millonario de pacotilla, ni se te ocurra volver a mandar a tu madre para que me convenz
Adriana.Me sentí expuesta y avergonzada, no deseaba que nadie supieras nuestro secreto, y me imagina que mis amigas le ocurrían lo mismo, -" por eso dividiré mis acciones entre las tres, pero solo cuando tengáis el apellido Powell, se pueden activar, si mis nietos quieren salvar sus herencias, que se aseguren que son ellos quien os los den."- sentención el presidente.Hubo unos minutos de silencio mientras nos mirábamos desconcertadas, nos habían descubierto el farol, mientras asimilábamos las tres que el presidente de esa multinacional, era más difícil de doblegar que el titanio, así que cuando vi que Miriam se adelantaba, me dije de perdidos al rio si Miriam no escandalizaba a Kevin senior, ya no le afecta nada.-" Primero ¿quién le ha dicho que somos vírgenes aun?, por mucho que le contaran nadie sabe a quién metemos en nuestra cama. Y segundo presidente, si fuéramos vírgenes, es un problema que podemos solucionar esta misma noche, y elegido por nosotras. Quien sabe en poco tiempo,
Mike.Cada día que conocía algo más de mi futura esposa, me daba cuenta de que la vida era cada vez más divertida. ¿Cuándo una Junta de accionistas de Powell S.L. Holding se había convertido en lo más alucinante que había vivido en el último año?La verdad que cada una de las nietas que había elegido el abuelo, para nosotros, era una joya en potencia, mi futura cuñada tenía un genio y unas agallas que iba a hacer que mi todo poderosos hermano se arrodillara más de una vez, aunque él no se haya dado cuenta hasta ahora, esa mujer podía lograr que se enamorara de ella, y ese espectáculo no me lo quería perder. Mi primo, por el contrario, creo que, si se ha dado cuenta que ha metido un escorpión en un nido de avispas, solo de pensar en la cara de mi tía cuando esa pelirroja saque a pasear esa lengua sin control, me daba ganas de estallar en carcajadas. Pienso, que eso es lo Kevin está deseando, aparte de al observar como la mira, pretende tenerla ocupada en su cama muchísimo tiempo. A ver