- Hija dónde estás, me quedé esperando por ti.
- Abuelo Miguel, perdón por no avisarle que ya me iba a venir.
Lo que pasa es que tuve que regresar de prisa a la casa porque hoy había que entregar un informe en una clase y el compañero que las recogería ya estaba afuera de mi casa y por eso me vine rápido-.
Mintió Aixa y rogó al cielo para que no se acordara de que hoy no había clase en la universidad cuando el señor Bustamante le llamó tal y como se lo dijo a su nieto.
- Está bien mi niña, pero me hubieses hablado para que en mi auto llegaras más rápido-.
Dijo el señor Bustamante quien no se tragó el cuento del informe, ya que sabe que hoy no hay manera de que lo presente en la universidad porque no hay clases.
En ese momento comenzó a sospechar de que lo que ella le comentó, que arreglaron sus di
El señor Miguel Bustamante llegó y estuvo por tres días en casa de su nieto, en todo momento los esposos fingieron que su relación estaba bien.No daban indicios de que hubiese algún problema entre ellos, bueno eso lo hacían en presencia del Señor Bustamante, pero cuando se llegaba la noche las cosas cambiaban y se ponían como eran realmente, ambos dormían en la misma habitación pero Leonardo obligó a Aixa a que ser quedara a dormir en el sofá pues él se quedaba solito en la enorme cama.Ahora que el abuelo se ha ido, Aixa volvió a la habitación en dónde dormía al principio de su relación.Por otro lado, Marcela le llamó a su suegra para comentarle que necesitaba ir a donde un médico, pues desde el día de ayer está sintiendo pequeños calambres en su vientre y teme por la salud de su bebé.-
- ¿Qué has dicho Leonardo?Yo no tengo ninguna enfermedad para que me quieras llevar a una clínica y mucho menos a la fuerza-.Dijo Aixa asustada.- Cálmate mujer no te alteres-. Pidió Leonardo al ver que ella estaba histérica y nerviosa.- Vas a hacer que me practiquen un aborto, a eso es que me llevas verdad maldito sin corazón-. Gritó Aixa muy enojada.- No Aixa no es nada de eso.Mira no te lo quería decir para que no te preocupes, pero tu hermano Aldair sufrió un accidente laboral y está hospitalizado y decidí llevarte para que lo veas y él se sienta tranquilo de tenerte a su lado.- ¿Cómo está él?¿Qué le pasó a mi hermano?Preguntó Aixa igual de preocupada que al principio.- Por eso quiero llevarte para que veas por ti misma cómo está él.
Es día viernes y los esposos ya van de regreso a su país Honduras. Leonardo quería que se vinieran un día antes ya que Aixa tenía cita con el ginecólogo, pero ella le rogó para que se quedaran un día más y cómo lo hizo delante de su hermano Aldair pues él no tuvo más opción que decirle que sí se vendrían hasta hoy.- ¿Me vas a acompañar mañana al médico?Preguntó Aixa con la ilusión de que él le diga que sí irá.- No, ve tú sola yo no puedo porque ya me ausenté por varios días en la empresa y un jefe como yo no puede hacer a un lado los negocios solo por andar en clínicas con su mujer.- Está bien Leo, yo no te voy a obligar a que te encariñes con el bebé. Pero si te lo digo, que ojalá después no ruegues por su atención-.
Al día siguiente cuando aixa se despertó, estaba totalmente desnuda y sola en la cama. Leonardo ya hace rato que se fue para la empresa y le dejó dinero en efectivo junto a una nota diciéndole que es para que pague la consulta del médico y para otros gastos que surjan de última hora y para sus médicamentos por supuesto.- Vaya, por lo menos él me ayuda económicamente ahorita que yo no tengo un trabajo-. Pensó Aixa para sí misma.Leonardo se propuso a terminar lo más rápido posible con una parte del trabajo para luego ir a la clínica con Aixa, ya que se sentía emocionado porque vería por segunda vez a su bebé y no se lo hizo saber a Aixa para que ella no se dé cuenta de lo muy interesado que está él en su hijo.Aixa con solo una bebida natural en su estómago se fue para la clínica, ya que por las mañanas
Hace dos horas y media que la señora Zulema y Marcela están esperando a que Leonardo llegue, y ya están apunto de salir porque él nunca llega y ellas piensan que seguramente es que él no quiere venir para no verlas. Ya que al parecer ya no soporta a ninguna de las dos.Mientras que Aixa está en su habitación y llora, llora porque una vez más el amor de su vida le ha fallado. Bueno eso es lo que parece por lo que la señora Zulema le ha confesado, pero que sea cierto a saber porque falta que ver lo que Leonardo tiene por decir.Llora porque no tiene a dónde ir pues después de que su abuelo murió, ella alquiló su casita y ahora le da pena ir a sacar a las personas que están viviendo allí por el momento.Leonardo por fin llegó a su casa, iba preocupado por lo que se encontraría y en todo el camino venía rogando al cielo para que su madre y Ma
- No yo no seré tu sirvienta como lo fui en aquella ocasión, tú tienes buenas tus dos manos así es que puedes prepararte lo que tú quieras-. Dijo Aixa.- Leonardo ya me dio la orden de que todo lo que quiera te lo pida a ti porque serás mi sirvienta-. Respondió Marcela.- Jaja sé clara Marcela, tú lo que estás tratando de hacer es que yo me aleje de mi esposo, pero cómo se lo dije a mi suegra ayer; yo por nada del mundo me voy a separar de Leonardo porque él es mi marido.- Apuesto y no pierdo que no tienes idea de donde se quedó a dormir Leonardo anoche verdad.Pues yo te lo voy a decir, mi hombre el padre de mi hijo durmió junto a mí, yo tenía mucho frío por lo tanto el me arrulló en toda la noche para que yo estuviera calientita, claro después de haber hecho el amor con lujuria por varias veces-.Dijo Marcela sacan
- ¿Tú amenazándome a mí?Jajaja por favor se más seria mujer, yo soy un hombre muy poderoso por lo tanto no te atrevas ni siquiera a contradecirme cuando yo te diga o te pida algo porque sabes muy bien que te va a ir muy mal-. Dijo Leonardo.Han pasado tres semanas y las cosas siguen igual o peor en casa de Aixa, ella ya dejó de asistir a la universidad y ahora está trabajando para comprar sus propias cosas y ahorrar para cuando tenga el dinero suficiente huír de Leonardo a un lugar seguro.Todos los días antes de irse a trabajar tiene que hacerle el desayuno a la amante de Leonardo y también debe de dejarle preparado el almuerzo para cuando sea la hora de comer Marcela solo lo meta al microonda para que se le caliente y esté listo para disfrutarlo. Y como Leonardo se va más temprano que ella entonces él no se da cuenta de los maltratos que sufre Aixa por parte de Marcela.
Horas más tarde...Aixa se ha despertado, se siente un poco fortalecida, dormir le ha ayudado en gran manera para retomar fuerzas. Con la silla de metal que estaba dentro de su habitación y qué sirve para sentarse cuando se maquilla en la cómoda, le ha dado a una de las ventanas, le ha dado con todas sus fuerzas y aunque no tenga suficientes pero de algo ha servido.Su esfuerzo ha funcionado, ha roto el vidrio que daba forma a la ventana en dirección a uno de los pasillos de atrás de la casa.Llora de la felicidad, está contenta porque al parecer en la casa no hay nadie, ha salido, por fin a logrado salir de su cautiverio.Sin pararse a ver los vidrios que se le han incrustado en la mano al momento de sostenerse de los bordes de la ventana corre, corre por toda la casa hasta que logra llegar a la puerta principal, la abre y sale a la calle, no sabe a dónde ir, no tiene a nadie.Decide ir a la