Lea:Lista para irnos – suspiré cuando él se acercó a abrazarme.No quisiera irme. ¿Podríamos venir otra vez, pero con mi pequeña?¿Tu pequeña? – pregunto algo confundido. ¿Acaso tenía algún problema con traer a Halia? Me voltee abruptamente hacia el y dije algo enojada¿No quieres que venga, acaso no la quieres?, sabes que ella es…Lea por supuesto que me encantaría que viniera, lo que pasa es que, no se como vallas a tomar esto pero… ¿podríamos llamarla “nuestra pequeña”? – juro que en ese momento me sentí mal, yo recriminándole algo inexistente y el insinuaba que veía a Halia como si fuera suya.¿En serio, tu la vez de esa forma?Claro que si, pero no sabia como reaccionarias – sin previo aviso regrese a sus brazos y solo murmure – no se que hice para merecerte. Eres tan bueno y por supuesto que ahora es tu pequeña.Gracias Lea. No quiero perderlas nunca.No tienes de que preocuparte, a mi me parece que estaremos juntos por mucho tiempo.Así será amor. Anda vámonos ya es tarde.Te
Lea:No es posible. Nuestro primer día de san Valentín juntos y los dos teníamos que trabajar, además la guardería de Halia cerraría temprano por la fecha y tendría que recogerla a las 3 y traerla a la librería conmigo. Le traje un libro para colorear y dos muñecas para que no se aburriera pues mi turno terminaba a las 6:30.Si que era difícil la situación y aparte no podía encargarla con mis padres o la familia de Micolash ya que todos tenían pareja y no era justo arruinarles sus planes para este día.Después de nuestro fin de semana romántico, Micolash y yo no nos podemos alejar mucho del otro; ahora casi todos los días estábamos juntos íntimamente. Hoy nuevamente había preparado algo especial para vestir esta noche y sabia que se volvería loco. Esa seria nuestra celebración a solas pues haríamos un pequeño intercambio y nuestra cena con Halia.Vi mi reloj y vi que eran diez para las tres, así que me escapé para ir por mi niña. La guardería no estaba lejos así que me fui caminando.
Lea:La carta que venia con las flores era pequeña pero no importando la cantidad sabia que serian unas hermosas palabras.LEA:UNA TARJETA COMO ESTA NO ES LO SUFICIENTEMENTE GRANDE PARA AGRADECER EL MONTÓN DE ALEGRÍA QUE HAS TRAÍDO A MI VIDA. HAS DESCUBIERTO EN MI A UN HOMBRE QUE PROMETE ENTREGARTE SU AMOR POR SIEMPRE.TU COMPAÑÍA ME HA HECHO EL HOMBRE MÁS FELIZ DE ESTE PLANETA Y ESPERO QUE PODAMOS COMPARTIR FESTIVIDADES COMO ESTA POR MUCHO TIEMPO.TE AMO, NUNCA OLVIDES QUE SIEMPRE ESTAS EN MI MENTE Y EN MI CORAZÓN.CON AMOR, MICOLASH.Si de algo podía estar segura en esta vida, era mi amor por Micolash. Las palabras que me dedicaba y ese arreglo de rosas que abarcaba la mitad de la mesa me indicaban sus sentimientos. Termine de leer la tarjeta y se acerco a besarme. Halia empezó a reírse como siempre lo hacia cuando nos veía a besarnos y por eso nos tuvimos que separar.Es hermoso lo que me dices.Es solo la verdad – sus palabras me daban aliento por mi situación actual y era mejor
Lea:Apenas iba despertando, busque mi celular para ver la hora y vi que eran las 9. Que alegría que Micolash no tenía que pararse temprano hoy, pero claro no podía olvidar el motivo por el que yo aun seguía dormida: no tenía empleo. Suspire aun afectada por el hecho, pero sabia que me las arreglaría. Voltee al otro lado de la cama y Micolash seguía dormido. Le di un beso en la mejilla y me baje de la cama para ir con Halia.Llegue a su habitación y ella no estaba, me alarme un poco y fui hacia la sala y allí la encontré viendo las caricaturas con el volumen muy bajito.Hija, ya despertaste – dije agachándome para darle un beso.Si mami. Tengo hambre – esta pequeña siempre tenía hambre.Te preparare algo delicioso. Ven.Cuando estábamos en la cocina, decidí picar un poco de fruta pero Halia quería picar el melón, le di un cuchillo más inofensivo de plástico y comenzó a partir pedazos muy desiguales para su platito. Cuando termino de hacerlo supuse que era hora de hablar con ella.¿Hal
Micolash:La fecha había llegado. Mi hermana Alina se casaba hoy. Me sentía muy feliz por ella, hoy daba un paso más en su vida y eso me traía a la mente todos los recuerdos de nuestra niñez. Recuerdo como jugábamos en el jardín de la casa, como llegue a defenderla en la escuela de niños que la molestaban, nuestras platicas ya como adolescentes confesando cuando nos gustaba alguien, en fin grandes momentos que habíamos pasado juntos.La ceremonia era a las 6 de la tarde, yo estaba vestido con mi smoking y Halia ya había sido vestida por su madre.Voltee hacia el reloj, ya eran 4:30 y aun teníamos que pasar a casa de mis padres para irnos todos juntos. Por eso me impaciente un poco y llame¡LEA!Ya voy, no me presiones – escuche la voz estresada de mi novia.¡Se nos hace tarde, Alina nos matara!Ya casi termino – grito.Mientras esperábamos, Halia me estaba presumiendo su hermoso vestido, era azul cielo y de muy buen gusto para una niña pequeña. También me presumía su peinado pues Lea
Lea:Todo había salido perfecto, la ceremonia había sido hermosa y mi Halia lucio tan tierna llevando el vestido de Alina.Al conocer a la familia de Micolash me encontré con un cálido recibimiento y eso me hacia sentir aceptada. Francamente tenía miedo de su opinión por el hecho de que yo tenía una hija pero parecía no importarles. Todos decían que era una niña adorable.Ahora Halia andaba corriendo con Michelle, parecía que la había presentado con otros niños y ahora jugaban a las escondidas. Por supuesto Halia fue a ocultarse bajo nuestra mesa. Micolash y yo estábamos en la mesa encubriéndola viendo a los demás bailar. Más tarde fui invitada a la pista.Lea me concedes esta pieza – me pregunto Julius.Claro – tome su mano y nos dirigimos hacia el centro de la pista. No era una gran bailarina pero al menos me defendía mejor que mi padre. La pobre Renata siempre tenía que buscar a alguien más para poder bailar. Me daba risa como mis padres eran tan diferentes.Es hermosa la fiesta –
Una semana después…Lea:Parecía que había estado en el teléfono y en la computadora todo el día. Primero estuve hablando con Ariana y me dijo que las cosas en la librería seguían tensas y ya estaba buscando otro lugar en donde trabajar pues Greg se ponía cada vez más difícil. La animé mucho y estuvimos platicando que su madre se sentía un poco mejor de su artritis y además de que había conocido a un chico que de acuerdo con ella era muy divertido. El afortunado se llamaba Eric y no podía esperar a conocerlo.También hablé con Gerard al parecer le iba bien vivir con hermano y me platico algunas de las actividades que hacían juntos. Le gustaba tener compañía. Le mandó un gran saludo a Halia y prometió que vendría a visitarnos.Luego hable con mi madre pero con ella era solo la platica rutinaria de todos los días.Después de eso me puse a limpiar un poco el departamento y cuando vi la hora ya era tiempo de recoger a Halia. Cuando regresé, ella se recostó en el sillón y tomó una siesta.
Valla parecía una oferta caída del cielo. Pero ahora tenía un gran problema, Micolash no quería ver ni en pintura a Riley, el dejo bastante clara su postura el día de la boda.Ahora tenía que armarme de valor y contarle sobre la propuesta. Diablos, creo que desde que lo conozco nunca había deseado que llegara muy tarde a casa.El resto de mi día fue la rutina diaria. Micolash llego a las 7 y cenamos todos juntos. A las 9 acosté a Halia y Micolash y yo nos sentamos a ver la tele. Yo estaba recargada sobre su hombro y lo agarraba del brazo, fue tiempo de un comercial y sabia que era hora.¿Micolash?¿Si?Hoy recibí una llamada – dije temerosa.Por que tan misteriosa, ¿quién era? – pregunto sonriente.Me ofrecieron trabajo.Wow, que bien. ¿En donde, con quien? – es ahora o nunca Lea.RileyelamigodeAlice – dije de corrido casi inentendible.No te entendí nada muñequita, ¿Quién?Vamos Lea no seas gallina.El amigo de Alina… Riley – él se quedo muy serio procesando lo que le había dicho. Si