El resto del día transcurrió con calma ya que el castaño disfruto de las atenciones de sus papas, aunque en la noche Ángelo se disculpó y salió a atender algunos negocios. - No me esperes mi amorcito, papá regresare tarde, pero mañana desayunamos juntos – dijo despidiéndose de su pequeño a quien le dio un beso en la frente antes de partir. - Bueno Jin cenaras con el abuelo – dijo Romeo. - Abu – repitió Jin riendo. Romeo se emocionó cargando al pequeño. - Hm… es abuelo, pequeño pillo. - ¿Porque le dice así? - Es mi forma de dar cariño – opino un poco ofendido, dejando que ella tomara al pequeño para ir a la sala, donde se acomodaron para leer un cuento - ¿y la razón de leer es…? - Así se familiariza con las palabras y con esto lo estimulare para que el desee hablar, buscando repetir las palabras que escucha – indico ella para acomodarse y hacer que Jin mirara el libro mientras ella leía. Romeo solo sonrió quedándose sentado a una distancia prudente escuchando, hasta que fue la
Curiosamente Ángelo podía denominar a Stefanie como una buena adquisición, ya que en el mes y medio que estaba con ellos su hijo ya hablaba más y hasta ya practicaban hacer dibujos. Realmente no tenía queja de ella ya que ni le molesta ni interrumpía e igual buscaba el momento oportuno para pedirle algunas cosas que quería para jugar con Jin, algo que agradaba ya que notaba el sincero interés de ella por cuidarlo y ayudarlo a aprender.Stefanie ya tenía un mes y medio viviendo a la fuerza con ellos y curiosamente ya se habia acoplado a muchas cosas, ignorando las veces donde ellos hablaban a la ligera de matar traidores y algunas transacciones ilícitas. Ella buscaba ignorar todo eso porque realmente no deseaba involucrarse en ese mundo peligroso… al menos no de ese lado, por ello solo se limitaba a enfocar su atención en Jin.Era una linda mañana de un sábado soleado, en el cual se le informo a Ángelo que estaba prohibido comprar postres de camino a casa, porque harían galletas casera
Tras eso sonó una nueva detonación donde ella se tensó, ya que junto con ese sonido sintió como algo líquido y un poco viscoso la salpicaba por su cuerpo al mismo tiempo que escuchaba algo golpearse contra el suelo. Stefanie temblaba un poco mirando como ese sujeto estaba muerto a su lado con una bala en la cabeza y al alzar la mirada vio a una persona a su lado quien sujetaba con fuerza una pistola en esos momentos.- ¿Están bien? – pregunto acercándose a ella.- Aléjate, no caeré en tu juego – indico ella aun estando a la defensiva, donde el pequeño estaba asustado y al mover su cabeza buscando calor y mimos de su mamá vio a la persona que les ayudo.- Sniff Valen… – dijo asomando su rostro con timidez.- Hola Jin, veo que es verdad y ya hablas – dijo en tono risueño el rubio guardando su arma e hincándose para quedar a la altura de ambos.- ¿Tu? – Stefanie se relajó un poco al notar que esa persona era un aliado y no un enemigo; donde ahora lo analizaba bien notando era un rubio de
- ¿Entonces el nombre? – pregunto serio Valentino.- Los Lombardi fueron asociados y motivados por los Coppola – informo serio Giovanni.- Malditos – opino Ángelo molesto.- Pero sabes, creo que esa pareja estaba en complot con los Coppola – menciono Valentino, captando la atención de sus compañeros.- ¿Porque lo dices? – pregunto Ángelo.- El objetivo real de todo este circo fue Jin, ya que si lo piensas fríamente tu saliste con tus mejores hombres a una junta supuestamente importante y pese al ataque a la mansion, su objetivo era buscar a un niño parecido a ti, ya que es lo que descubrí al emboscar a uno de esos sujetos y por eso me apresure a entrar a la casa e igual puedo deducir que ellos jamás pensaron que ya le hubieras colocado una niñera real a tu hijo, una que si lo protegió y peleo por él.- … - Ángelo miro asombrado eso ya que el aun no presentaba a su pequeño ante el mundo bajo porque aún estaba pequeño y no hablaba bien, por eso se supone solo los más allegados sabían de
Al día siguiente como era lógico todos se quedaron en casa y no dejaron salir al jardín a jugar a Jin; por seguridad, pero el pequeño fue entretenido con su libro para colorear en la sala acompañado de Romeo quien leía el diario y Stefanie leía uno de sus libros de texto. - Stefanie – le llamo serio Romeo mirando que ella le miraba de reojo – sé que la rechazaste, pero en esta hoja esta las ubicaciones de algunas armas como usaras como último recurso, por si algo como lo de ayer se llega a repetir – indico serio notando que ella fruncia el ceño. - Hm… - contesto tomando el papel. - Memorízalo y luego lo destruyes – menciono con calma para retomar su lectura. - Mami, mami. - ¿Qué pasa? – dijo ella mirando que el castañito le mostraba el dibujo que hizo. - Mia – dijo feliz sonriendo notando que ella sonreía, para luego girarse y llamar al mayor – abu, abu. - A ver – menciono el pelinegro dejando el periódico de lado para inclinarse un poco y ver el dibujo – nada mal, todo un Picas
Tras esa peculiar conversación, los siguientes días pasaron rápidos y tranquilos, hasta llegar al viernes donde Ángelo ya tenía a varios hombres listos para vigilar a Stefanie y Jin por cualquier cosa e igual Luciano los cuidaría a una distancia segura. - Papi, papi – hablaba emocionado el pequeño al sentir que el auto se detuvo. - Te portas bien Jin, nos vemos en un ratito - decía el pelinegro al ver que llegaron a la escuela y besaba la mejilla de su pequeño. - Vamos Jin – le llamo la pelinegra, mientras bajaba de la limosina. Jin sonrió y tras darle un beso en la mejilla a su papa corrió a tomar la mano de ella para bajar del auto y despedirse. - Diviértanse y te portas bien hijo – se despidió Ángelo con una gran sonrisa, la cual al ver que este le daba la espalda se esfumo y adopto un semblante serio a la vez que su celular sonaba y lo contestaba enseguida – estoy en posición - se escuchó que le decían. - Sabes lo que te estoy encargando y lo que te pasara si fallas – dijo ser
Al salir de la biblioteca, empezaron a caminar buscando las pizarras donde estaba la lista de los alumnos y en que salón estarían. Stefanie miro el mapa y las señales donde las pizarras estaban cerca del gimnasio.- En el 1b – menciono sonriendo al ver su nombre, pero en eso escucharon risas y ruido donde el castañito por curiosidad busco el origen del sonido.- ¡Ahí! – dijo señalando el edificio deportivo del campus.- ¿Quieres que vayamos? – pregunto la pelinegra mirando que el pequeño asentía – aún tenemos tiempo – dijo mirando su reloj de mano donde tomando tomo de la mano – podemos ir, pero recuerda, no sueltes mi mano ya que habrá mucha gente ¿entendido?- Si – dijo feliz sujetando la mano de ella para así ingresar al gimnasio, donde estaba montada una mini feria para que los clubes les enseñaban a los nuevos estudiantes lo que hacían y habia algunos que ofrecían comida y juegos.- Am am – el castañito miro un puesto donde unas chicas tenían bolsas con dulces.Stefanie solo rio
Stefanie entro de nuevo a la empresa sintiendo un ligero déjà vu al ver a Jin dormido entre sus brazos, pero en eso recordó que Ángelo le dio una tarjeta especial para que no pasara lo mismo de la vez pasada, a lo que solo dejo escapar un suspiro antes de ingresar al edificio.- Buenas tardes – le saludo la recepcionista, donde la pelinegra noto que era una chica nueva.- Buenas tardes.- ¿Tiene cita, señorita?- … - Stefanie mostro la tarjeta donde la chica solo sonrió.- Adelante, es el elevador de en medio y solo muestre la tarjeta en el lector – le indico ella.- Gracias – le contesto para andar al elevador, mientras acomodaba mejor al pequeño movía sus cabellos para que no taparan su rostro y lo miraba con cariño.- Sabes creo que muchos desearían esa mirada – escucho una voz algo burlona notando que el elevador se habia abierto y Ángelo le miraba divertido.- No sé de qué hablas – dijo ella frunciendo el ceño.- Hehe es que le vez con tanto amor que le tengo algo de envidia.- H