Alison quedó en media oración en la reunión cuando vio que Cristopher entró precipitadamente y puso los ojos en ella, como si estuviera buscando a otra persona. Sus dedos rodearon la carpeta que tenía en sus manos, temiendo lo peor y esperando alguna cosa desagradable de su parte ante su repentina intromisión.—Disculpen… —ella se excusó levantándose de inmediato y se acercó a él tanto como pudo—. ¿Necesitas alguna cosa?Cristopher siguió detallando sus movimientos demasiados extraños para su postura, y para la manera en como era Jane.Él la conocía muy bien. La había visto crecer, y a sus 30 años podía incluso predecir los movimientos de Jane porque ella era demasiado obvia, o más bien, muy conocida como para pasar por alto algo diferente en ella.Así que, de un momento a otro, el hombre le tomó del brazo, asintiendo, y luego la sacó de la oficina.—¿Qué tienes entre manos?Alison pudo sentir la respiración agitada, y en cuestión de segundos quedaron en medio de un pasillo de oficina
Llegando a su oficina, Alison se sentó tomando la cabeza entre sus manos mientras la adrenalina iba disminuyendo en su cuerpo.Lo mejor que había pasado era que Cristopher no supiera la realidad. Ahora que lo pensaba, el que él supiera la verdad, era complicar más los hechos, y a estas alturas del partido, Alison sabía que no podía hacer más de lo que ya estaba haciendo por él y por todos los que rodeaban a Jane.Tomó el teléfono para informar que estaba de vuelta, y en unos minutos, su equipo estuvo de nuevo en su oficina.La mañana estuvo realmente provechosa. A pesar de todo lo que estaba sucediendo en su vida, Alison estaba realmente feliz porque de alguna forma el deseo no solo estaba satisfaciendo su amor platónico, sino los sueños profesionales que jamás en toda su vida soñó palpar, aunque estuviera en el cuerpo de otra persona.Tener muchas miradas concentradas en sus palabras e ideas hizo que su corazón palpitara de una forma maravillosa, y que estas mismas ideas fueran enriq
—Hola… —Ali pegó el móvil a su oreja cuando el ascensor abrió las puertas y comenzó a caminar para buscar a Paul en el estacionamiento.—Jane… —su voz ronca por la mañana le hizo cerrar los ojos y detenerse para concentrarse. Ya iba tarde de por sí, y estaba más que ansiosa por buscar a Samantha para desayunar con ella.—¿Está todo bien? ¿Necesitas algo?—¿Dónde estás?Alison fijó la mirada en la camioneta y a Paul afuera forjando una sonrisa para entre tanto caminó rápidamente hacia su lugar para subirse y sentarse en el asiento trasero. —Estoy yendo al hospital… te lo dije ayer…Hubo un silencio largo y cuando comenzaron a andar, Ali le indicó a Paul en susurro que se dirigiera al hospital.—Bien… nos vemos en unos minutos…—¿Qué? —Ella intentó preguntar, pero cuando revisó el teléfono de Jane, la llamada había sido finalizada.Tuvo que soltar el aire ante la irritación que esta clase de grosería acompañaba a la pareja, y luego comprobó por el retrovisor, esta cara que a veces no l
No demoraron mucho en llegar al gran edificio principal, cuando estacionó en su zona especial y Jane se apresuró a bajarse para ayudar a Samantha a caminar.Ella lo observó por un tiempo, pero le pidió que se adelantaran mientras tomaba un respiro ante la nueva situación que se estaba presentando por primera vez en su vida.El magnate dejó que su frente tocara el volante y apretó los ojos tratando de pensar en otra cosa para menguar su deseo.No podía tener una explicación en cuanto a lo sucedido, y se dijo a sí mismo que también necesitaba un momento con Benjamín, porque ahora realmente toda esta situación lo estaba aterrando.Alison entró a la planta junto a Samantha y la condujo a su oficina, mientras que Helena dejaba las cosas en la mesa.—¡Tu oficina es hermosa! Y la vista…—Ve con calma… no quiero que te marees… —Ali se puso de lado agachándose mientras ambas contemplaban la vista un poco nublada de New York—. No es el mejor día para observar, pero es lindo…Samantha se giró ha
—Puedo irme… no hay problema… —Cristopher se levantó de inmediato, pero Alison se apresuró en intervenir.—He dicho que puedes quedarte, no diré algo diferente de lo que te he dicho a ti…Ambos hombres se observaron y a continuación, Benjamín asintió hacia él para que se volviera a sentar.—Adelante, Jane…Alison carraspeó un poco y tomó aire para comenzar.—Ammm… sé que he sido una persona muy difícil… por mucho tiempo, pero todos merecemos una segunda oportunidad, ¿no es así, Benjamín? —el hombre asintió rápidamente, y se acercó corriendo su cuerpo hacia delante.—Todos, Jane… pero no puedo mentirte al decirte que debes eliminar tus medicamentos… sé que en muchos momentos nos podemos sentir bien, sin embargo, no podemos arriesgarnos a cometer los mismos errores de nuevo.Ali parpadeó varias veces tratando de entenderlo y luego asintió. No sabía a qué se refería exactamente, pero iba a tomar su dirección para no complicar las cosas.Ya tendría tiempo para hablar de esto con Jane.—Es
Capítulo 17El contacto fue devastador para Ali. Primero, no estaba advertida de que Cristopher fuese a besarla cuando era tan evidente su rechazo por Jane.¿Qué había cambiado? ¿Qué había pasado allí adentro con ese médico para que su actitud mezquina pasara al extremo de la seducción?Ella no pudo mover sus labios, allí estaba estática intentando procesar ese beso, hasta que el magnate profundizó su acción, introduciendo su lengua en su boca y buscando de alguna forma una respuesta de parte de ella.No pudo evitar estremecerse ante el toque, y recordando el primer beso, cedió ante la caricia que el hombre estaba haciendo en su mandíbula con sus dedos.Sin siquiera saber qué estaba haciendo, llevó una de sus palmas a su mejilla y comenzó a probar sus labios, obteniendo ese sabor inigualable que sintió desde el primer día.Este hombre era exquisito en todas sus facetas, su boca se movía con avidez mientras su respiración cada vez se entre cortaba más, y por su fuera poco, una mano su
Había pasado un tiempo desde que salieron de la ciudad ajetreada y entraron a uno de los barrios de Brooklyn, donde Alison había escuchado vivía la gente millonaria.Pero el escucharlo se quedó corto cuando ella se quedó observando las mansiones que pasaban por el camino.En el momento en que llegaron a una especie de entrada con muchos árboles bastante cuidados y podados en el camino, Alison iba abriendo la boca totalmente embelesada, por la belleza de estructura natural que divisaba al pasar de forma lenta por el camino.Todo esto, hasta que se detuvieron en una mansión, que, con respecto a la iluminación que conservaba ahora que era de noche, se veía irreal para ella.—Yo… pensé que iríamos a cenar… —balbuceó saliendo de su ensoñación, mientras Cristopher apagó el motor frente a la gran construcción.—Sí… aún sigue en pie… ¿Qué pasa, Jane? Te noto excesivamente nerviosa… ¿No es esto lo que quieras? ¿Acaso no es tu mayor deseo que estemos juntos todo el tiempo? Que corresponda a tus
—Gracias por esta noche… —Alison le dijo a Cristopher, mientras él se desajustó el cinturón, cuando llegaron frente al edificio.—Te acompañaré… —aunque era un gesto lindo de su parte, ella negó al ver sus ojos irritados.—No es necesario, debes estar cansado, y mañana tienes trabajo…Otra sonrisa divertida apareció en el rostro del magnate mientras Ali copió el gesto.Le encantaba verlo sonreír de esta forma.—Esa es otra sorpresa, no sabía que te gustaba tanto trabajar…—Me gusta… quiero decir, a la nueva Jane —ambos soltaron otra carcajada, y luego de que invadió el silencio, Cristopher se fue hacia ella para darle un beso corto en los labios.—Hasta mañana, Jane…—Hasta mañana, Cristopher…Ali se bajó rápidamente del auto, y girando hacia atrás le dijo adiós con la mano, entre tanto vio que él se esmeró por asomar su mano también en despedida.No esperó que él arrancara o se fuera, y sin borrar la sonrisa de su boca, caminó hacia la recepción dando las buenas noches a todos los pr