Alexa conduce el auto como si alguien la estuviese persiguiendo.

— Alexa ¿qué sucede? ¡harás que choquemos! — le grita Ozlem a su hermana.

— Lo lamento — responde Alexa reduciendo la velocidad.

— ¿Por qué de repente conduces tan rápido? Parece que te estuviese persiguiendo un fantasma.

— ¡eh! Sólo quiero llegar a casa y saber si Cristopher está bien, no me di cuenta de que estuviera manejando tan rápido — responde Alexa.

Al poco tiempo llegan a casa y Alexa estaciona el auto en el garaje. Para sorpresa de ambas, la camioneta de Alexa ya está estacionada allí, lo que significa que Cristopher ya llegó.

Alexa siente un alivio al ver a Cristopher sentado en la sala, pero al mismo tiempo tiene una curiosidad abismal por saber quién estaba al volante del auto que encontraron chocado en la ruta 32.

— ¡Cris! Que bueno que estás aquí — le dice Ozlem al joven ingeniero.

— ¡Hey! ¿Qué sucede?... ¿Por qué esas caras? — pregunta intrigado mientras se levanta del sofá. .

Alexa se acerca a él y lo