Se había escuchado la voz del imponente CEO Donovan Lombardi, el millonario no estaba jugando, no le cederían la oportunidad a Ares así de fácil, su gemelo habló con él y le dijo que la bella rubia le gustaba mucho, que la quería para tener una relación seria. Era por eso que estaba ahí, y por qué sabía lo poco paciente que era Sergey Ivanov. — Nosotros tenemos derecho de antigüedad, tengo más años que tú siendo amigo de Sergey... Somos prácticamente como hermanos. Además no puedes decir que un Lombardi sea más adecuado para ser novio que un Valentain. ¡Ya deberías saber que somos una leyenda! — Puede ser que lo sean, pero es por qué nunca se habían enfrentado a un Lombardi, la masculinidad, elegancia, sofisticación, y éxito, nos definen como los mejores partidos del país y a nivel internacional. ¿Lo sabías acaso, Apolo Valentain. No están siendo rival de cualquier hombre común, si no de la poderosa dinastía Lombardi. — Se muy bien quien eres y quiénes son tus herederos, L
Los tres imponentes CEOS, estaban complacidos al escuchar las palabras de su renuente amigo. Lo conocían muy bien, sabían que era difícil de tratar, y que con sus hijas era como un león que las cuidaba y protegía en todo momento. Más lo que escucharon después, no era para nada algo que se esperara. — Tomaste la mejor decisión Sergey, tú cómo siempre encontrando las mejores soluciones para cualquier inconveniente. — No he terminado Apolo, escuchen ustedes dos también, Dorian y Donovan, yo estaré dispuesto a conceder mi permiso para el noviazgo de sus hijos con mis hijas, siempre y cuando ustedes concedan que mis hijos cortejen a las suyas. —¡¿Qué...?! ¡¿Te volviste loco, ruso?! Las jóvenes Isadora Lombardi, Angela Montana y Artemisa Valentain. ya están en edad de tener novio, que mejor que sea alguien que ustedes ya conocen, mi Alexander y Aleksey, son jóvenes CEOS casaderos, es mi deber como padre alentarnos a encontrar a una buena chica, y estoy seguro de que sus hijas al
Fué en ese momento que el apuesto escritor se dió cuenta del por qué él no había sido perseguido. Los CEOS que estaban ahí presentes eran ya exitosos y con una preparación más que excelente. Ellos... Simplemente no lo consideraban un rival. — Dije que no voy a involucrar a mi hija Angela en esto, ella queda fuera, emparejarla con uno de tus trillizos no me parece buena idea. Sergey. — Entonces Donovan queda descartado para salir como mi Serena, es lo mejor cariño, los Montana tienen muy mala fama. Son obsesivos compulsivos con el control, son capaces de ponerle un chip rastreador a cada bolso, cada collar, pendientes, y hasta los tacones que uses, todo para saber en dónde estás en todo momento. — ¡¿Qué...?! ¿Es eso cierto Donovan? Serías capaz de hacerme cosas como esas? — Serena que tenía el fuerte carácter de su padre, estaba muy sorprendida, ella jamás permitiría que la controlaran de esa manera. — Señor Ivanov, los chips de los que habla son solo por la seguridad de l
Sergey estaba dispuesto a enfrentarse a su amigo de toda la vida, el CEO Apolo Valentain, y al CEO Donovan Lombardi, todos estaban defendiendo lo mismo, y ninguno ahí iba a ceder. — Tío, nos iremos a casa, creemos que papá necesita tiempo para pensar en tu propuesta, vamos papá, mamá nos está esperando. — Sergey, no imaginé que fueras tan maquiavélico, no tienes compasión por tu viejo amigo. — Lo mismo te digo yo, como si tú la hubieras tenido por mí al venir aquí a apoyar a tu demonio para robarme a mi hija. — Nosotros también nos retiramos, esto es solo una pausa, volveremos a retomar el tema en otra ocasión. Solo toma en cuenta que los muchachos tienen atracción el uno por el otro, Sergey. — Dijo el CEO Lombardi antes de retirarse con sus gemelos. — Hija por hija, Donovan, queda en ti acceder o no, ya me lo harás saber después, que tengan buena noche. — Vamos papá, mamá ya me ha enviado un mensaje preguntándome por qué no llegamos todavía a casa a a cenar. Creo que
Angelo se humedeció los labios con el líquido ambarino, escuchaba atentamente a la bella pelirroja. Era hora de hablar lo que tenía para decir. — Emma eres una chica muy especial, de hecho me siento afortunado por haberte conocido, pero debes de saber que yo también tengo una historia, tuve... Tuve una prometida una vez, pero desafortunadamente ella murió en un accidente, desde entonces no me he abierto al amor, y para serte sincero no creo que lo haga nunca. — ¿Cómo...? Disculpa, Pero... yo no sabía nada, Emmanuel debió decírmelo. Es que... En realidad sé muy poco acerca de tí. — No tienes que disculparte, son cosas del pasado, el punto es que... Yo te puedo dar todo lo que quieras, coches, joyas, villas, viajes, pero lo que no voy a darte es amor, nunca me voy a enamorar de ti, Emma, aunque seas una mujer muy hermosa y maravillosa. ¿Lo entiendes? — Vaya, que drástico, eres brutalmente honesto, pero... No sería justo que yo no me enamorara de ti, y tú si. Si lo piensas e
Mudos y estáticos quedaron todos en la sala de estar, el rostro inexpresivo del hombre que recién llegaba no mostraba que estuviera bromeando. — ¿Qué significa esto Rafael? Estamos celebrando el compromiso de mi hermana y de Angelo. No me avisaste que venías. Dime, ¿Por qué estás aquí? Emmanuel y Rafael habían sido buenos amigos en la universidad, por supuesto que también conocía a Angelo Leyva. — Ofrezco una disculpa por llegar así a tu casa Emmanuel, pero necesito hablar con Emma, es urgente y necesario. — No entiendo, ¿Qué tienes tu que hablar con mi hermana? Explícate ahora mismo. — ¿No se los dijiste Emma? — El CEO le hacía la pregunta directamente a la bella joven. — ¿Decirnos qué? !Habla ahora! Emmanuel estaba perdiendo la paciencia. — Decirles que ella y yo tenemos una relación, solo que pasaron muchas cosas y tuvimos un mal entendido, ella... — ¡¿Mal entendido, dices?! ¡Teníamos una relación como bien dices, pero de pronto te encuentro casándote con tu ex p
Rafael aún haciendo todo lo posible para contener a su imponente cuñado, no dejaba de lado a la bella Emma, ella había caído desmayada en los brazos del CEO Leyva. El solo toque de sus manos sobre el cuerpo que consideraba suyo lo enfurecía y mataba de celos, ella era suya, era su mujer, y ni muerto iba a permitir que se la robaran. — ¡Suelta a mi mujer! — ¡Emma! ¿Qué es lo que te pasa? ¡Carajo, tú y yo no hemos terminado! — Emmanuel dejó de pelear con Rafael y corrió a auxiliar a su hermana, pero el CEO Mendoza no se quedó de brazos cruzados. — ¿Qué le pasa a ella? Emma mi amor, responde cariño, estoy aquí, vine a por tí, no voy a resignarme a perderte. — La angustia reflejada en el rostro que hacía un momento permanecía inexpresivo era más que evidente. — ¡Alejate de ella Mendoza, después de lo que ha sufrido por tu culpa no la mereces, ni mereces estar cerca de ella! — Emmanuel, la única razón por la cual no te he noqueado es por Emma, Pero te juro que si intentas
Rafael fue al sanitario a lavarse un poco, estaba lleno de golpes y tenía sangre por doquier, tenía los nudillos bastante lastimados, pero eso le importaba poco. Afuera un joven CEO de ojos azul violeta y cabellos rojo oscuro llegaba con un traje en mano. Era quien había acompañado a Rafael en su viaje en busca de su amada. — Buenas tardes a todos, mi nombre es Robert Isaías Rossi, vengo a buscar a mi amigo Rafael. Más el CEO ya venía hacia él. — Roby, estoy aquí. El heredero de la familia Rossi miró a su amigo de pies a cabeza, Rafael estaba bastante maltrecho, se notaba que la pelea con quién sea que haya sido, había sido dura. — Vaya, te quito los ojos de encima por una hora y ya te encuentro como santo cristo, ¿Eh? Aquí está tu traje, ve a cambiarte. — El ojiazul se volvió a ver a Emmanuel, Angelo, y Erick. — Veo que son tres, si le echan montón a mi amigo se las verán conmigo también. — ¡Tu descarado amigo dirás, después de lo que hizo todavía tiene la desfac