Ashley Yo nunca, jamás, había besado a alguien. Una vez lo intenté en mi adolescencia con un chico que había conocido en una fiesta al que me llevaron arrastras. Traté de cumplir el reto, pero cuando me acerqué lo suficiente, simplemente no fuí capaz y salí corriendo como alma que huye del diablo. No estaba lista para ese beso.Sin embargo, estaba muy lista para este beso. Es como si mi cuerpo me lo exigiera, como si Uzziel fuese la fuerza del imán y yo un simple metal que busca su contacto, el cual apenas lo conseguí, me llenó de sensaciones que jamás pensé experimentar en mi vida.Me inclino más hacia él y trato de copiar todos sus movimientos, porque por mucho que se sienta bien y correcto, nunca he besado en mi vida y el temor de arruinarlo sigue latente.Un gruñido sale de Uzziel y me separo un poco para verlo, pensando que no lo gustó el beso, pero apenas me encuentro con sus ojos brilloso él me toma de las mejillas y me besa, consumiendo mi escencia por completo, como si mis
Ashley Cierro mis manos en puños y trato de tranquilizarme, pero nuevamente los recuerdos me golpean y no solo siento ira, también una profunda tristeza por como se dieron las cosas ese día.Tal vez, si él no se hubiese aparecido y chocado contra el auto, mis padres seguirán vivos y yo nunca hubiese conocido a Uzziel ese día, por lo que no estaría metida en esta situación. En resumen, todos los problemas de mi vida fueron causados por él.-Ashley, por favor.- Uzziel aparece y trata de tocarme, pero yo me alejo de su toque, sin dejar de ver ese hombre que tampoco pierde mis movimientos.-Hola, cuñada.- doy una respiración profunda y las ganas de lanzarme sobre él son grandes, demasiado.- No soy tu cuñada... Tú.- lo señalo y después cierro el puño, exhalando. Todo lo que siento dentro de mí está empeorando, es como si la ira comenzará a tomar cada parte de mí.- Tu destruiste mi familia.- hablo más calmada y me giro hacia Uzziel, de repente sintiendo el rencor que no había sentido ante
UzzielPresenciar como Ashley me come con sus ojos lo único que ha hecho es encenderme de una manera descomunal. Quedarme aquí de pie ha Sido una estrategia para no saltar sobre ella y reclamarla como mía.Sin embargo, no se ha detenido, y estoy perdiendo el control, nuevamente, solo que está vez, mi instinto se mezcla exclusivamente con la lujuria, la cual solo desata ella.-¡Ashley! - grito su nombre y ella reacciona, sonrojándose inmediatamente. Su inocencia solo hace que me calme todavía más, solo que mi amiguito no entiende razones y está duro como una piedra desde que bajo esas escaleras y la Vi con ese vestido dulce.Sé que ella no es de usar esa ropa, la he observado durante demasiado tiempo para no saberlo, pero en mis fantasias siempre me la imaginé con esos vestidos, la facilidad con la que podría pasar mis manos por su muslos, subirlas y llegar al paraíso, dónde su placer sería mi recompensa, es simplemente demasiado exitante para dejarlo pasar y ahora, justo ahora, me est
Ashley Cubro mi boca con mis manos y dejo que el llanto salga sin ser escuchado. Mis hombros se mueven frenéticos y siento tanto dolor en mi pecho que lo único que quiero es gritar, liberarme. Está sensación de perder el control, de perderme a mi misma por culpa de personas que realmente no conozco, simplemente me hace querer correr lejos.Pero no puedo.Uno de esos dos me alcanzaría en segundo, sin contar que estoy olvidada en este lugar, lejos de una civilización decente. Yo.. ellos, ellos acabaron con la vida de mis padres. Los únicos padres que conocí y ahora, ¿Me dicen que no los puedo llorar? ¿Qué ellos no eran mis padres? Que se vayan a la mierda, porque Morgan y Cloe Allister son mis padres y los amaré con toda mis fuerzas hasta el día que Dios decida que yo debo acompañarlos.Me fundo en mi llanto y dolor hasta que mis ojos están tan hinchados que no puedo ver bien. Me limpio como puedo y después me voy a bañar. No sé qué hora es, pero lo que sí sé es que el hambre me está
UzzielLa cara de sorpresa de Ashley es simplemente cautivadora y preocupante.- ¿Qué? No- niega con la cabeza. - Te dije que iríamos a mi ritmo, este no es mi ritmo... Ni siquiera debería ser tu ritmo, por Dios. Es un ritmo muy, muy.... Muy rápido. No podemos casarnos.- sonrío.-Vamos a salir.- ella asiente y se deja guiar. Podría solo soltarla, pero saber que está desnuda debajo de esa toalla me tiene como acelerado. Quiero hacerla mía y prácticamente mi interior está gruñendo y gritando que lo haga.Se sienta en la cama y una parte de la toalla deja ver la curvatura de sus senos, por lo que entierro mis uñas contra la palma de mi mano para tomar calma del dolor. Mis ojos se van hacia sus manos y sus nudillos lastimados me molestan, porque yo soy el causante de todo sus males, de una forma indirecta o no, está sufriendo por mi culpa, lo puedo sentir, lo sentía en el piso de abajo y justo ahora, se ha convertido en el mío propio.Tomo su mano y lo acerco a mi boca.- ¿Qué haces? - pr
Ashley ¿Otra profesia? Todavía no he escuchado la primera y cada vez están saliendo más. Necesito en definitiva un día libre, porque tengo tanto que procesar que ya ni sé que está pasando. Observo a los supuestos demonios y admiro su atractivo. Desde rostros inocentes, cabello entre rubio y rojizo, ropas incluso coloridas, alturas imponentes y lo más interesante, miradas divertidas sin rozar lo peligroso.Cuando yo me imagino demonios, en definitiva no los veo a ellos. Usualmente cuando alguien grita demonios, las personas se imaginan hombres vestidos de negros, con auras oscuras, miradas penetrantes que prometen llevarte al infierno y dejarte ahí para que te quemes. Te imaginas acostada en la cama y que de repente de jalen los pies y te lleven con ellos, dónde te sacan el alma para dárselas a su jefe.Y yo veo a estos tres, y no los veo como tal. Más bien parecen esos amigos que te llevan a pasear un día y te hacen reír por cualquier cosa. Se ven como esos amigos a los que se le
Ashley Estoy tan concentrada en mi nariz que ni siquiera noto el quinto demonio hasta que lo tengo sobre mí. Él me agarra del cuello y evita por completo que grite pidiendo ayuda, ya que Uzziel y su hermano están concentrados peleado contra los dos demonios restantes, que se mueven tan rápido con esos cuchillos que puedo ver varias heridas en ambos antes de que el demonio me lleve fuera de la casa.-No era mentira lo de la profecía. Realmente te necesitamos, pero no necesitamos a esos lobos.- me da un beso en la mejilla y me obliga a seguir caminando, pero va muy rápido y yo voy en retroceso, por lo que no logro mantener el equilibrio y caigo, solo que el demonio no me deja caer, más bien me aprieta el cuello todavía más y me lleva arrastras.Yo sostengo su brazo con fuerza y busco la forma de soltarme, aunque no consigo nada y siento que cada vez más me está acercando a la barrera. Si salgo, las brujas me podrán llevar fácilmente, ¿Cierto?Me lleno de miedo y de ira al mismo tiempo
Ashley Uzziel me lleva a cenar y pasamos una noche tranquila. Vemos una película de mi lista y me río demasiado por las quejas que pone cada tanto. Él nota todos los errores cinematográfico y después de que termina la película, se sigue quejando. Salimos a caminar un rato y él me cuenta cosas de su mundo, incluso toca el tema de mis verdaderos padres, pero me siento en tanta paz, que simplemente le huyo a esa conversación. Aunque hace mala cara, no me dice nada y seguimos caminando.Me muestra la hermosa vista nocturna de un pueblo que se capta lleno de vida. Me dan ganas de pedirle que vayamos, pero me quedo callada porque sé que están rondando muchos peligros, así que solo disfruto, incluso cuando nos sentamos a la orilla de la piscina, para hablar otro rato hasta que prácticamente me quedo dormida en sus brazos.Cuando me medio despierto, estoy sobre él en la cama, con mi rostro apoyado en su hombro. Podría protestar, son embargo, no me nace, así que solo me quedo tranquila y dis